Carlos Sainz y McLaren recuperan pólvora y mecha para un revuelto GP de Portugal

Analizar rendimiento final Carlos Sainz y McLaren en los entrenamientos del GP de Portugal dependía del filtro utilizado para juzgar el séptimo del español (y octavo de Lando Norris). Quedaba la sensación de mayor potencial para la parrilla que el puesto finalmente logrado para la evolución que traía fin de semana. Pero durante la sesión clasificatoria se levantó de nuevo ese muro contra el que se estrella el MCL35: “Podíamos haber clasificado más arriba, pero iba cada vez más lento a media que avanzábamos en los entrenamientos. Algo que nunca esperas. Nos habéis escuchado muchas veces quejarnos, así que no vamos a quejarnos de nuevo con la sensibilidad del coche. Hicimos 1.17.1 en el Q2, y 1.17. 5 en el Q3. Increíble…”, explicaba Sainz. Casi cuatro décimas más lento, cuando la evolución normal de una sesión tiende a lo contrario. Ese muro era nuevamente el viento, que se atraviesa por las entretelas aerodinámicas del MCL35.

Pero ese filtro también ofrece otro panorama más optimista. Aunque Sainz y McLaren no optimizaron su potencial, el discurso del español ha cambiado frente Nurburgring, con ese monoplaza en parte experimental cuya especificación ha sido retirada en Portimao. “Como equipo hemos hecho un gran trabajo para entender qué pasó la pasada semana, y el coche aquí me dio mejor ‘feeling’ y un fin de semana más fácil. De Q2 a Q3 no pudimos mejorar como quisiéramos, pero estoy seguro de que estamos en una posición muy solida para mañana”. Porque se presenta una carrera abierta para pilotos y equipos. Por varios factores, quizás una de las más inciertas y movidas de la presente temporada.

Recuperar el pulso al coche

Dos factores principales condicionaron la sesión clasificatoria, explicaba Lando Norris al terminar la jornada, lo que también refrendó Sainz. “El viento, y el asfalto, demasiado nuevo. La combinación de los compuestos y este nuevo asfalto, con los elementos químicos que afloran, lo han hecho muy complicado para que los neumáticos funcionaran”.“Estoy contento porque el coche ha ido mejor que en Nurburgring durante todo el fin de semana. Luego en la clasificación se complicó", declaraba Sainz por la tarde, "en el último intento venía para hacer un 1:17.2 o 17.3, pero en el último sector no pude mejorar, se debió levantar viento”. El español apostó por dar dos vueltas rápidas finales con un juego nuevo, como Hamilton, pero el viento se enroscó nuevamente en el monoplaza británico.

A pesar de tan complicada sesión, Sainz reflejaba la confianza de los días en que más acoplado se ha mostrado con el MCL35. El español sacrificó su carrera en Nurburgring con una evolución (piezas diferentes a las montadas por Norris) que no funcionó, como el equipo pudo constatar en Woking con el análisis comparativo posterior. Andreas Seidl lo explicaba al final de los entrenamientos. “Los dos coches llevan aquí el mismo paquete. Empezamos el viernes con el nuevo concepto de frontal, el conjunto que introducimos en Nurburgring, y aquí probamos partes adicionales ayer para ver como rendían con este nuevo concepto aerodinámico, y fue positivo. Se supone que entrarán en juego en futuras carreras. Pero hoy hemos seguido con la misma configuración en ambos coches, que es la que Lando usó en Nurburgring, la primera que utilizó Lando”. McLaren desechaba así parte de la utilizada por Sainz en el trazado alemán, de aquí el optimismo de Sainz para la carrera. A pesar de la incertidumbre que presenta el gran premio portugués.

Una carrera totalmente incierta

Trazado nuevo para todos, recién reasfaltado, los incidentes del viernes y parte de la segunda sesión dedicada Pirelli para los neumáticos de 2021, los equipos ha acumulado muy poca información para la carrera. Seidl comentaba el panorama recién terminada la sesión clasificatoria. “El equipo está analizando todo ahora mismo, y veremos cuál es el plan para mañana. Aún es pronto para comentar. Será interesante ver cómo se comportan los neumáticos, ver como Charles (Leclerc, que sale cuarto) podrá empezar con los medios en comparación con el resto de blandos entre los diez primeros”, explicaba el ingeniero alemán, que dejaba entrever la misma confianza que su piloto.

A diferencia de carreras anteriores, McLaren dejaba por detrás a los dos Renault, un Racing Point, y al Ferrari de Vettel. Pero la nueva evolución del SF1000 y el rendimiento de Leclerc podría crear un nuevo enemigo a Sainz y Norris en el equipo italiano." Será interesante ver qué harán en la carrera, es algo desconocido", explicaba Seidl, "en algunas hemos visto, especialmente Charles, que ha hecho estas vueltas mega en entrenamientos, pero luego con problemas en la distancia de carrera. Por nuestra parte, parece que nuestro coche va bien en casi todas partes, y nosotros hemos sido de los pocos que han conseguido meter a los dos pilotos en el Q3, lo que dice mucho de ellos. El domingo podremos luchar por los puntos, estoy contento de que hayamos dado el siguiente paso con este nuevo concepto del frontal que estamos introduciendo".

Con tan escasa información, ¿Cuál podría ser la estrategia para la carrera? ¿Degradación, una o dos paradas...? “Por lo que hemos visto, el blando parece que está bien para empezar, pero con la poca experiencia recogida hay cosas desconocidas, con las condiciones que habrá... Incluso hay alguna pequeña posibilidad de lluvia por la tarde, lo que podría complicar las cosas”. Ante las singulares circunstancias de Portimao, el máximo responsable de McLaren se atrevía con un pronóstico: “Esta prueba es un desafío, pero a la vez quizás los aficionados puedan tener una carrera interesante, con diferentes estrategias y muchos factores inciertos”.