Alonso sorprendió por la mañana y Sainz por la tarde... aunque no a Mercedes

Día de escuela en la Fórmula 1. Poco a poco, los pilotos van fijando las medidas y tomando referencias para apurar más en cada curva de este nuevo circuito urbano de Bakú. Ello provoca que, cada vez más, los 2,1 kilómetros de la imperiosa recta vaya tomando protagonismo y sea juez del tiempo por vuelta. Si por la mañana Lewis Hamilton fue el más rápido con 1:46, por la tarde el inglés repitió posición pero siendo dos segundos más rápido (la pista también cambió). Pilotos e ingenieros (con el monoplaza) van limando aristas para ajustar más los tiempos de este GP de Europa. Sin conocer los planes de cada escudería ni la carga de gasolina de cada coche, cualquier conclusión puede resultar precipitada.

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Durante los L1, antes de tanta calibración, sólo los dos Mercedes y el Williams de Valtteri Bottas terminaron antes que el McLaren de Fernando Alonso . Una ilusión óptica que se esfumó en los L2, donde los cinco primeros motores eran de la marca alemana (Mercedes, Bottas y los Force India). El meritorio sexto mejor tiempo fue para el Toro Rosso de Carlos Sainz (propulsor Ferrari de 2015, pero que alcanzó los 351 km/h en recta, igualando a Bottas como coche con más velocidad punta), quedando el asturiano undécimo. Entre medias de los españoles finalizaron los dos Red Bull, Vettel y Button, algo que puede dar pistas pero ninguna respuesta fiable.

[El tortuoso camino de McLaren de 2,1 kilómetros]

Muchos datos para analizar de cara a la puesta a punto. La telemetría definirá mejor los límites a buscar por cada piloto este fin de semana en un trazado donde la potencia está resultando vital por la eterna recta y el primer sector, donde también hay una recta considerable y curvas en ángulo recto donde será más difícil encontrar diferencias entre las manos de los pilotos. La influencia de éstos, mayormente, se concentra en el segundo sector, más revirado. ¿Suficiente para amortiguar el impacto en el tiempo de la mencionada recta de 2 kilómetros? Parece que no...

[Horarios de este GP de Europa en Bakú]

Ferrari, problemas de motor

Este es un viernes con más desconcierto de lo normal por la cantidad de elementos nuevos a interpretar por parte de equipos y pilotos ya que hubo infinidad de salidas de pista (por escapatorias) aunque un único golpe en el día: el que protagonizó por la mañana Daniel Ricciardo. Sí hubo otros motivos que provocaron la parada de los monoplazas, como el de la mañana de Verstappen o los de por la tarde Nico Rosberg (problema de motor), Fernando Alonso (fallo leve relativo a la bomba de gasolina) o los de los dos Ferrari, por falta de potencia en Raikkonen (fallo en el MGUK) y precaución en Vettel.

Por lo demás, entrenamientos muy entretenidos tanto por la espectacularidad del paisaje, como la cantidad de incidentes (mayormente salidas) durante las tres horas en los que los monoplazas han estado rodando por primera vez en Azerbaiyán. En este sentido, otra circunstancia llamativa, aunque dentro de lo esperado, es el asunto de los comisarios. Circuito urbano y nuevo es casi sinónimo de que aparecerá el coche de seguridad y, en este caso, habrá que acudir a la grúa para la retirada de un monoplaza. En estos L1 se ha debido realizar con el Red Bull estrellado de Daniel Ricciardo y la mencionada grúa ha debido dar marcha atrás durante 200 metros, con el peligro y el tiempo que ello conlleva. Son comisarios novatos (mezclado con otros con experiencia) en un gran premio de Fórmula 1 y será otra situación a tener en cuenta. En GP2, sin ir más lejos, se debió posponer la clasificación ya que han debido de realizar trabajos de mantenimiento con los kerbs.

Así fueron los primeros libres en Bakú

La precaución fue la protagonista de esta primera sesión de entrenamientos en el circuito urbano de Bakú. Quizás por eso, y por ser el primer día sobre este asfalto de Azerbaiyán para la F1, lo que ha provocado unos tiempos en los que sorprende, por ejemplo, la aparición de Alonso en el cuarto lugar (con blandos, no súper blandos). El asturiano apuró mejor que nadie cada esquina, pero en cuanto los potentes motores Mercedes, los Ferrari o Red Bull (tuvieron un día para olvidar) se pongan a tono, presumiblemente quedará más retrasado.

Las manos son las causantes de esa asombrosa cuarta plaza de Alonso, a más de 1,5 segundos del mejor tiempo, Lewis Hamilton. El británico terminó por delante de su compañero, Nico Rosberg y del Williams de Valtteri Bottas, a quien tan bien sienta esa eterna recta, las curvas lentas y la necesidad de potencia para salir de ellas de la mejor manera posible.

La velocidad punta estimada antes de saltar a la pista rondaba los 340 km/h aunque, de momento, se ha quedado en 351 km/h, marcado por el Williams de Bottas en meta. (Por la tarde, ese registro lo igualó Carlos Sainz). Entre los primeros no aparece ningún McLaren, algo que les perjudicará más cuando cada piloto vaya cogiendo confianza en el resto del trazado y pulan los tiempos... como así sucedió por la tarde.