Vettel y Red Bull, el remedio fue peor que la enfermedad

Sebastian Vettel no se ha encontrado cómodo en las cuatro primeras carreras de 2014. Red Bull, con dos semanas por delante, apostó junto con el piloto por tratar de solucionar el problema con un “reset and start” y recurrir a un chasis ‘virgen’ de pretemporada. A partir de ahí, quieren corregir el tiro para adaptarlo al pilotaje del alemán. Sin embargo, de momento está siendo peor el remedio que la enfermedad ya que el coche ha sufrido dos fallos de fiabilidad, típicos de pretemporada, al quedarse el RB10 parado tanto el viernes como el sábado. Por si fuera poco, el germano ha tenido que sustituir la caja de cambios, con la sanción que ello conlleva. Saldrá decimoquinto.

El primer día el fallo fue eléctrico, en el cableado del nuevo chasis. "Por desgracia, un cable muy pequeño quedó atrapado en un lugar difícil", explicó Vettel este sábado. El segundo día el problema estuvo en la caja de cambios. En un principio el alemán pensó que podría ser arreglada y no habría que cambiarla, "así que no habrá sanción para mañana". Un par de horas después de su declaración, Red Bull comunicó que debía sustituir la caja de cambios. Cinco puestos de sanción y de la décimaplaza(no pudo completar ni un giro en la Q3, cuando su monoplaza se paró) pasó a la decimoquinta.

¿Aguantará este renovado RB10 una hora y media de carrera este domingo? Afortunadamente para sus intereses, a principios de la semana que viene hay unos test en los que Red Bull dispondrá de tiempo como para limar los inconvenientes entre las ‘tripas’ y ‘órganos’ del RB10 y su nueva piel. Un gran problemacon el que contarán será el tiempo ya que estos monoplazas son complejos de montar y desmontar.

Lo que parece más claro es que, con una cuarta parte de la temporada completada, sus opciones para revalidar título están muy lejos. Primero ha de entenderse con el coche y, después, lo más difícil, que Red Bull llegue a la altura de Mercedes.