Diez razones y media para pensar que este Mundial es de Hamilton o Rosberg

“Ambos son los favoritos. Están en posición de ganar todas las carreras. Los fallos mecánicos y la suerte serán la llave para ver quién acaba más carreras”… y se lleva el título. En el deporte no existen datos científicos que aseguren con rotundidad un resultado, sin embargo, Fernando Alonso sugirió este sábado durante el GP de España que la ventaja con la que cuenta a estas alturas Mercedes es suficiente como para pensar que el Mundial se resolverá entre las flechas plateadas. En la Q3, el W05 del ‘poleman’ Lewis Hamilton metió diez décimas y media -1.053 segundos exactamente- al primer rival, el Red Bull de Daniel Ricciardo. Diez razones y media para pensar que, efectivamente, Mercedes tiene el campeonato bajo control.

El asturiano, en la rueda de prensa posterior a la clasificación de Barcelona, expresó el deseo de que no volviera a suceder la situación de este sábado: Ferrari terminó dos segundos por detrás de la ‘pole’. Nadie en Fórmula 1 ha recortado una ventaja tan grande. Hace unas semanas Pat Fry señaló que su actual objetivo es tener en pista el segundo puesto de la parrilla y, en este sentido, también se quedaron lejos, a un segundo de Ricciardo.

El susodicho segundo equipo es Red Bull. Es la escudería que más posibilidades tiene de dar caza a Mercedes, la esperanza para el aficionado que quiere ver pelea y emoción en la parte delantera de una prueba, la máquina capaz de finalizar ‘sólo’ a un segundo. Toda una goleada del líder de la competición al segundo clasificado.

El mejor Mercedes del año en clasificación

Niki Lauda, en la última carrera, en China, expresó su “temor” por lo que pudiera hacer Red Bull indicando que Adrian Newey no había viajado hasta Shanghai para continuar su labor en la fábrica de Milton Keynes. Después de ver la clasificación se le habrá quitado cualquier tipo de angustia puesto que sus monoplazas nunca habían tenido un margen tan amplio el sábado con respecto a su primer rival, y el segundo rival, y el tercero… Parece que son los que más han avanzado en estas dos semanas sin F1.

Toto Wolff había advertido de que traían mejoras para mantener la distancia con sus perseguidores y vaya si lo ha conseguido. Montmeló es una pista donde la climatología influye de manera decisiva en la pista (y, por tanto, en el crono) y quizás las condiciones en las que se ha realizado la Q3 fueron más favorables a Mercedes que al resto, o que los neumáticos elegidos por Pirelli (todos montaron medios para disputar la clasificación) también beneficiaban más a Mercedes que al resto, etc. Se pueden buscar explicaciones pero, el caso, es que la paliza ha sido considerable.

“Creo que hemos hecho algunas mejoras pero ellos (Mercedes) también. Nos gustaría haber estado más cerca pero…”, Ricciardo explicó las intenciones con las que llegaban a Barcelona y con lo que se deben conformar: “Lo positivo es que somos claramente el segundo equipo”, que no es poco. Horner, el día anterior, también había asegurado tener bien cubierta la posición con respecto a la Scuderia.

Y eso que el Mercedes de Hamilton estaba peor que el viernes

No sólo por las palabras iniciales de Alonso se puede intuir que el dominio del equipo germano con base en Brackley continuará. Lewis Hamilton espetó un “nunca había conocido algo así”, al referirse al “tipo de rendimiento” que habían tenido. Es más, ¿logrará tener en otra ocasión una ventaja mayor? Porque su W05 “no estaba siendo lo suficientemente rápido. Perdí un poco de ritmo así que estoy contento sabiendo que incluso así ha sido capaz de regresar al frente”. Durante la Q1 se le pudo escuchar por radio un “no sé cómo pero hemos hecho peor a este coche” por los retoques “milimétricos” que el equipo realizó por la noche y, al final, logró hacer la ‘pole’ por “los pelos”, refiriéndose a las casi dos décimas que sacó a Nico Rosberg.

De cara a la carrera, si el primer rival admite que “un segundo es demasiado” como para poder optar a la victoria, el panorama pinta plateado. ¿Hamilton o Rosberg? Atendiendo a las carreras de este 2014, el balance es favorable a Lewis. El británico, salvo en la primera prueba, que tuvo que abandonar, ha batido siempre a su compañero. Tres victorias frente a una de Rosberg. Pese a ello, el alemán ha mantenido siempre un liderato que puede cambiar de dueño este domingo ya que es la primera vez que Hamilton depende de sí mismo para agarrarlo y, tal vez, no volverlo a soltar.