La nueva Fórmula 1: como Usain Bolt, pero con plomo en las zapatillas

Imaginemos por un momento a los 'Usain Bolt'de la especialidad, a punto de volar hacia la línea de los cien metros. Cuerpos y mentes moldeados en el más exigente entrenamiento listos paraexplotar todo su potencial. Sin embargo,cada uno de nuestros atletas llevalastrada cada zapatillacon un par de kilos. Es lanueva Fórmula 1 que nace en 2014.

Porque llegan nuevos propulsores nunca vistosantes en este deporte, verdaderasjoyas tecnológicas que, sin embargo, sonembridadaspor un consumo controlado, para buscarel mejor equilibrio entreprestacionesy eficiencia. Ahí es nada...Un verdadero guante tecnológico lanzado a los grandes fabricantes.

El patrón de la industria automovilística

Las nuevas plantas motrices de Renault, Mercedes, Ferrariy Honda (a partir de 2015)anticipan el esquema quela industria automovilística extenderá en nuestros vehículosen próximos años, unasimbiosis del motor de combustión con sistemas de recuperación de energía.En las 24 Horas de Le Mans, Audi y Toyota ya mantienenunaguerraa la que se une Porsche en 2014 y, quizásen elfuturo, también Nissan. Ferrari estudia detenidamente el salto, ya que el reglamento de motores es ahora convergente con la Fórmula 1.

Renault, por ejemplo, hubiera abandonado el Gran Circo de no haberse adoptado un cambio de paradigma que fue rechazado incluso por el mismísimo Bernie Ecclestone. Elconcepto 'Energy' de su nuevo motortambién se “venderá” en sus vehículos de calle con el reclamo de la transferencia de tecnología. Aunque la FIA quería imponer inicialmente los motores de cuatro cilindros, Ferrari y Mercedes impusieronla arquitectura de seis para alimentarla correspondencia con sus más deportivas y potentes gamas “de calle”.

Sandwich: turbos abajoy, arriba,sistemas de recuperación

Los motores consistirán ahora en un 'sandwich de dos pisos', con la reintroducción de la tecnología turbo(que permite motores de menor cubicaje) yeldesarrollo desistemas de recuperación de energía generada porel propio vehículoque se entregaluego al acelerador. Este apartado es el ahoradenominado ERS (Energy Recovery System),divididoen dos áreas. Una,recupera yalmacena energía cinética producida en el momento de la frenada. La otrahace otro tantocon la calorífica derivada de los gases del turbo.

Elanterior Kers producía 60 Kw (80-90 cv) kw durante 6,7 segundos por vuelta, y debía ser accionado por el piloto. El nuevo sistema produce 120 Kw(160-200 cv), durante 30 segundos por giro,sin intervención manual.Se calcula que la nueva planta motrizconjuntopuede suponer un30 % de ahorro de combustible frente a los anteriores V8.

El lastre en las zapatillas de Usain Bolt

Pero se trata también delograr la misma potencia que en el pasado ciclo (unos 750-800cv) aunque, eso sí,con mayoreficiencia energética.Para ello, dos grandeslimitaciones reglamentarias –el lastre en las zapatillas de Usain Bolt-ponen la brida a la planta motriz. Por un lado, solo se dispone de cien kilogramos de combustible desde el semáforo verde a la bandera a cuadros. Para situar este datoen un contexto histórico, cuando la tecnología turbo vivió su eclosión en los ochenta, el primer límite introducido fue de 220 litros, luego 195, y el último, en 1988, fue de 155 litros.

Se vivió entonce la etapamás espectacularen la historia de la Fórmula 1 en términos de potencia, alcanzándose hasta1.500 cv en las sesiones de calificación. Pero aquella orgíano se repetiráa partir de 2014. Porque la segunda gran limitación exige no superar el flujo de 100 kg/hde combustible a partir de10.500 rpm. Y tampoco las 15.000 rpm comorégimenmáximo del motor de combustión, frente a las 18.000 de los anteriores V8.

Un mayor campo para la diferenciación y creatividadtecnológicas

Existen otras limitaciones más específicas y de naturaleza técnica que condicionan más si cabe a los ingenieros los anterioresdesafíos. Por ejemplo,un peso máximo y volumen prefijado, tamaño de lospistones... Y también unnuevo esquema de fiabilidad.El pasado año, cada piloto contaba con ocho motores para toda la temporada. Ahora, seráncinco unidades de cada uno de los seis elementos que constituyen la planta motriz (motor de combustión, de recuperación de energía cinética y calorífica, turbo, control de la electrónica y unidad de almacenamiento de energía). Otro corsé para Usain Bolt…

De lo anterior se deriva que las áreas de potencial innovación y diferenciación tecnológica de los fabricantes pueden marcar importantes diferencias en la pista, algo que no ocurría con el anterior reglamento. Para los aficionados será más complicado apreciarlas, porque el secretismo en esta área será notable.

Un pedal de acelerador de un metro de largo

Para el piloto, las nuevas plantas motrices supondrán cambios significativos. En parte, porque la energía eléctrica almacenada estará inmediatamente disponible en el pedal del acelerador. Los nuevos motores ofrecenya la mitad de su potencia a las 5.000 revoluciones, mientras que a losV8 del pasado había que “hacerles gritar” por encima de los 12-15.000 para exprimirlas 'tripas del bicho'. Además, no volveráaquel famoso comportamiento de losturbo enlos ochenta, cuando a Keke Rosberg, por ejemplo,le daba tiempo a encender un cigarillo en el tiempo que pisabael acelerador y el motor le entregaba su potencia.

Jenson Buttonexplicaba gráficamente que, con semejantes características,“te hará falta un pedal de acelerador de un metro de largo para controlar el par del motor”. Según Button, la manerade pilotar será muy diferente,“tienes que olvidar todo lo quehas aprendido durante los años en términos de manejabilidad, la curva de potencia de un monoplaza de carreras, y la forma en la que la aplicas”. Otros pilotos, como Alonso y Raikkonen, no van tan lejos en los cambios que suponen los nuevos propulsores. Veremos cuando empiece la fiesta.

"Pie a tabla" y "modo taxista"

¿Cómo afectará a la dinámica de las carreras esta nueva tecnología y sus 'lastres', loscondicionantes de consumo? En principio, los monoplazas serán más lentos, en parte por las novedades aerodinámicas (de las que hablaremos en otro momento) como por el aumento de peso mínimo, que pasa de642 a 691kg. También habrá sensibles diferencias entre el ritmo de entrenamientos y carrera. Hasta qué punto influiráelparticular estilo de cada piloto en el consumo se comprobará pronto. Y el domingose alternarán los momentos 'pie a tabla'con el modo “taxista” al que se refría Prost en los ochenta, un ritmo dirigido por la electrónica y el muro de boxes.

Esta semana se da en Jérezel disparo de salida auna nueva e excitantecarrera tecnológica en la Fórmula 1. “Creo que en la primera carrera veremos un porcentaje de retiradas muy alto, quizás de hasta el 50%”, avanzaba Christian Horner recientemente. Tal es la magnitud deldesafío de estanueva era, en la que incluso a muchos Usain Boltles costará completar los cien metros más de lo que desearían.