El yelmo del guerrero y su escudo de armas en la cabeza

Ya dejó claro Fernando Alonso en varios 'tuits'tras el Gran Premio de Japón el valor que otorgaba alrécord de puntos logrado en Suzuka. Y lo confirmará en la India con un casco especialmente diseñado para la ocasión, donde los ‘1571’ puntos adquieren un protagonismo total.

En la despersonalizada y ultracontrolada imagende un monoplaza, elcasco es laúnicazona dondevolcar su personalidad. Pocas imágenes tan impresionantes existen en la Fórmula 1 como eseintensoprimerplano delpiloto dentro del box, visera abierta y mirada tensa,rodeada de un universo de líneas y colores. En el pasado, losdiseños eran sencillos, esquemáticos, fácilmente identificables, y se mantenían durante toda la carrera del piloto. Hoy, están lejos de aquella simplicidad y permanencia del pasado.Hoy,“las carreras no solo son un deporte, son un show”, explica el alemanJens Munser, uno de los mayores expertos en el diseño y decoración de cascos de pilotos a nivel mundial.

Diseño y pintura, un proceso de varios días

Senna,Prost, Piquet, Lauda, Scheckter, Andretti...prácticamente todos los pilotos hasta la década de los noventa mantenian sus cascos inmutables."Sí, la Fórmula 1 ha cambido muchísimo, no a todo el mundo le gusta, a los aficionados tradicionales les gustaba la época de Senna y Prost, cuando el piloto tenía un casco nada más". Entonces, Munser no habría podido crear el estudio de diseño y decoración que le ha dado fama internacional en el presente. Empezó con el primer piloto de Fórmula 1 en 1998, y en la actualidadtiene como clientes a ocho pilotos de la parrilla, Sebastian Vettel y Fernando Alonso entre ellos, así como otros muchos de categorías inferiores, comoCarlos Sainz Junior. Munser fue también el responsable de decorartodos los cascos de Michael Schumacher.

El proceso puede tardar varios días, pintar el cascono menos de quince horasy, en ocasiones el coste del diseño puede superar aldel mismo casco.El diseñador trabaja estrechamente con cada piloto, escucha susgustos e ideas, pero también aporta las suyas, así comoinformación técnica para mejorar los diseñosy descartar aquellosque, por su experiencia,sabe que no funcionarán, “por ejemplo los degradados del amarillo al negro, crean un marrón en medio que es realmente horroroso”.En el caso de Schumacher, a partir de su tercer título le convenció para que ya no incluyera el nombre, “porque todo el mundo sabía quién era”, asì como que incorporara en sucasco los nombres de los miembros de su familia.

Sebastian Vettel es el ejemplo más radical en la tendencia a modificar el diseño personal de su casco. En realidad no lo tiene, por la modificación constante de sus diseños a la búsquedaefectos inusuales. Munser pintó suprimer cascocuando solo tenía ocho años y corría en karts. Desde entonces, ha pintado para el tricampeón más de cincuenta diseños diferentes. “Era para los karts, completamente diferente a lo que es hoy, y quería el personaje del cangrejo de 'La Sirenita'”.

Munser ha ayudado a diseñar y pintarinfinidad de cascos con motivo de eventos especiales.Pero Vettel se lleva la palma por su afición a cambiar de diseño constantemente.“El de Austin fue muy especial, la gente decía que era original y divertido, me gustó también el de Mónaco, con signos antiguos, el casco dorado del Gran Premio de Alemania, pero el mejor era el que tenía luz , el de Singapur”. Munser experimentódurante varios días con diferentes 'leds', además de otros problemastécnicos, pero quedó muy orgulloso cuando “al final de la carrera había ganado, peroseguía con luz mientras saludaba a los aficionados, las pilas no se habían agotado”.

“Es muy bonito cuando el casco tiene una dedicatoria”, explica Vettel, “como el utilizado enel Gran Premio de Gran Bretaña, la carrera era en casa y queríamos un diseño que hiciera a la gente darse cuenta de lo que el equipo es, así que incluímos las caras de toda la gente de Red Bull”. De momento, para el alemán, este año tiene como favoritos en diseñado para elGran Premio de Alemania, conla bandera germana como protagonista, y el Gran Premio de Bélgica.

Un casco por elatentadodel 11-S

Munser también descata el diseño especial de Schumacher tras los atentados del 11-S en 2001, cuando sustituyó la bandera alemana por la americana. El alemán ganó aquella carrera de Monza, y el detalle fue recogido por la CNN. El casco sería subastado posteriormente en beneficio de las víctimas. Giancarlo Fisichella quiso celebrar el título italiano en el campeonato del mundo de fútbolen 2006 con una edición especial, así comosu carrera número 200. Barrichello también utilizó un casco especial recordando a Massa (cliente igualmente de Munser) tras el accidente del brasileño en Hungría 2009. Y Schumacher recibió un regalo especial en la última carrera antes de su primera retirada, en Brasil 2006, con elementos que incluíanun dragón y estrellas en oro, con una lista de sus 91 victorias y la fecha del triunfo.

Alonso suelecambiar el diseño de un año para otro, aunque mantieneelementos comunes comolas flechas plateadas que aparecían en un coche teledirigido que le regalaron del pequeño, los dos ases de sus títulos,el azul asturiano yla bandera española. Sí se anima también a presentar en algunas carreras ediciones especiales, como enMónaco o Singapur. En la carrera del Principado en 2012 utilizó una versiónespecial que incluía motivos referentes a su trayectoria deportiva y de gran valor emocional para el asturiano.Fue diseñado por un amigo personaly luego subastado tras la carrera.También hubo otra versión especial para la carrera de este año.

Un piloto se define conel casco que le representa, como elyelmo alguerrero consu escudo de armas a bordo. Quizás por ello, Fernando Alonso coleccionae intercambia cascos conaquellos rivalescon los que peleaen la Fórmula 1. Con toda seguridad,el del próximo domingo no se lo cambiará a nadie…