Los vagones del Alvia aguardan a que el juez se pronuncie sobre su destino

Los vagones del Alvia accidentado comenzaron a ser retirados de la curva de A Grandeira al día siguiente de la tragedia para facilitar los trabajos de reparación de la vía. La locomotora que encabezaba el convoy siniestrado ha sido retiradade la vía a las 5.00 horas de esta madrugada y sigue esta mañana en Angrois a la espera de ser trasladada a la nave donde la Policía custodia las piezas del convoy.

El resto de los vagones ya fueron traslados por una empresa del cercano municipio de Padrón, Transportes y Grúas Estación. Se encuentran dentro de sus instalaciones, a escasos 25 kilómetros del lugar del accidente, a la espera de que el titular del juzgado número 3 de Santiago de Compostela, Luis Aláez, instructor de la investigación de la tragedia, decida qué hacer con ellos.

Mientras tanto, un dispositivo de vigilancia los custodia para garantizar que no sufren ninguna alteración. Son una de las pruebas más importantes del caso. Los informes periciales encargados por el magistrado para averiguar las causas del siniestro aún no han descartado que, además de un exceso de velocidad, algo que ya se da por seguro, en el descarrilamiento hayan podido influir otras causas adicionales de tipo mecánico.

Fuentes de la empresa aseguran que en las últimas horas miembros de la Policía Científica han visitado sus instalaciones para inspeccionar los restos del tren. “La vigilancia de los vagones es máxima. De hecho, no nos dejan acercarnos ni a nosotros. Hay agentes de Policía Nacional y también vigilancia privada custodiándolos durante las 24 horas del día”, explica un trabajador de la empresa de transportes. “Un compañero mío, que trabaja aquí mismo, quiso hacer una foto de los vagones y le dijeron que estaba prohibido y que se marchara”, asegura este empleado. “El control es total”.

A disposición de los investigadores

Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Galicia aseguran que el juez no tiene pensado tomar ninguna decisión sobre los vagones en las próximas horas y que se mantendrán de momento en su ubicación actual, en la zona de las instalaciones de la empresa de transportes más alejada de la carretera N-550 que discurre frente a su fachada principal. Los investigadores tendrán que analizarlos para determinar si el tren presenta alguna anomalía que contribuya a arrojar luz sobre los numerosos interrogantes que siguen gravitando sobre esta tragedia. No será una labor fácil porque los vagones están completamente destrozados. Varios de ellos quedaron seccionados por diferentes partes y dosardieron. Además, todos perdieron elementos que fueron recogidos posteriormente de la fatídica curva formando así otro lote.

Su futuro será el desguace, pero lológico es que el juez ordene conservarlos al menos hasta que concluya la instrucción,por si fuera necesario recurrir a ellos en algún momento del proceso. La decisión puede generar controversia y afectar al caso. De hecho, la destrucción de los trenes de Cercanías de los atentados del 11-M generó una investigación judicial ante laacusación de quese había llevado a caboantes de que se practicaran todas las pruebas periciales necesarias para esclarecer los hechos. El propio Tribunal Supremo reconoció en la sentencia del 11-M que la destrucción de los vagones fue "apresurada" e "impidió su estudio en profundidad". Seguro que Aláez lo tiene en cuenta.