ING redobla su apuesta por la recuperación inmobiliaria con mil millones en préstamos

ING ha vuelto por la puerta grande al mercado inmobiliario español. El banco holandés, que fue uno de los principales actores extranjeros en los años previos a la burbuja, se ha convertido en una de las entidades más activas en la financiación de este mercado, que ha dado un giro de 180 grados en los últimos dos años.

Sólo durante el pasado ejercicio, ING Real Estate Finance concedió financiación por encima de los 1.000 millones en 13 operaciones inmobiliarias diferentes, que abarcan desde la compra de oficinas y centros comerciales, hasta activos logísticos y refinanciaciones corporativas.

La más destacada ha sido la adquisición de Torre Espacio por parte de Grupo Emperador, 'holding' filipino al que ING concedió, en febrero del año pasado, un préstamo sindicado por importe de 280 millones, durante un plazo de 7 años, y que marcó un punto de inflexión en la apuesta de la entidad por este mercado.

Pocos meses después, el banco ahora dirigido por César González-Bueno participó también en la operación corporativa más importante que ha vivido el sector, la fusión de Merlin y Metrovacesa, con la concesión de 170 millones a la socimi y de 200 millones a la inmobiliaria.

Para cuando se produjo esta fusión, ING ya había financiado a Merlin varias operaciones, como, por ejemplo, la adquisición de un portfolio compuesto por siete activos logísticos con 67,9 millones de euros a cinco años, que firmaron en enero de 2016.

Otros gigantes del sector que han contado con el respaldo de ING durante el pasado ejercicio son GMP, con financiación corporativa por importe de 75 millones de euros, y Axiare, a quien concedió un préstamo de 75 millones de euros para adquirir el edificio ubicado en el número 9 de la madrileña calle Almagro.

La apuesta de la entidad por el mercado inmobiliario abarca a toda la Península Ibérica, también a Portugal, como ha demostrado el banco con la concesión de 50 millones al centro comercial Vasco de Gama, en Lisboa, propiedad de Sonae Sierra y CBRE GI.

Precisamente, ha sido en el segmento de los centros comerciales donde la entidad ha cerrado su primera gran operación de 2017, al haber otorgado un préstamo sindicado de 57,5 millones de euros durante 7 años a Trajano Iberia, importe que ha ido destinado prácticamente en su totalidad (55 millones de euros) a financiar la adquisición de Alcalá Magna.

"Esta operación refuerza el posicionamiento del área de Real Estate Finance en el segmento de activos 'core' como oficinas, centros comerciales y activos logísticos de primer nivel. Una intensa actividad que nos ha permitido comenzar 2017 como líderes del mercado”, ha declarado Julián Bravo, Responsable de Real Estate Finance para España y Portugal.