El Popular calcula un ahorro de hasta 200 millones anuales con su plan de ajuste

El Banco Popular ha comunicado este domingo las líneas principales del pacto cerrado con los sindicatos para la salida de 2.592 trabajadores, que pasan por la prejubilación de una parte de la plantilla y por la oferta de bajas incentivadas "de adscripción voluntaria". En total, la plantilla quedará reducida en un 20%.

De esta forma, el banco que preside Ángel Ron evita una convocatoria de huelga con la que habían amenazado los sindicatos tras conocer el plan presentado el pasado 20 de octubre, y logra rebajar un 10% el ajuste de personal, desde 2.900 trabajadores a 2.592. Desde que comenzaron las negociaciones en octubre, repartidas en doce sesiones, los sindicatos han celebrado varias concentraciones en distintas ciudades de España.

El plan de ajuste se enmarca en un nuevo Plan de Negocio 2016-2018, que incluye la separación de su negocio bancario del inmobiliario y, según el Popular, tiene como objetivo "mejorar la rentabilidad y eficiencia", así como "contribuir a modernizar la estructura de la entidad". Con el proceso de ajuste, en el que se invertirán 375 millones de euros, el grupo pretende ahorrar entre 175 y 200 millones de euros anuales a partir del primer trimestre de 2017.

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El pacto contempla tres grupos: los trabajadores de 59 años o más -colectivo que suma 1.700 personas en el banco- quedan con el 75% del salario bruto o el 70% bruto más el 50% del complemento voluntario; los de 58 años -el caso de 200 trabajadores- recibirán el 70% del salario bruto o el 65% del bruto más el 50% del complemento voluntario; y por último, el grupo de empleados de entre 55 y 57 años -que son unos 100- y recibirán el 65% del salario bruto o el 60% del bruto más el 50% del complemento voluntario. Quienes se adhieran de forma voluntaria a la medida, tendrán una prima adicional de 3.000 euros.

Con el proceso de ajuste, en el que se invertirán 375 millones de euros, el grupo pretende ahorrar entre 175 y 200 millones de euros anuales a partir de 2017

Los empleados de entre 50 y 54 años, que a cierre de año decidan prejubilarse tendrán una indemnización de 35 días de salario por año de servicio, con un límite de 110.000 euros. Los que al término de 2016 tengan entre 45 y 49 años y se sumen al acuerdo, podrán acceder a una indemnización de 35 días de salario por año de servicio, con un límite de 28 mensualidades, mientras que para los menores de 45 la indemnización será igual pero con un límite de 24 mensualidades. Para estos tres últimos colectivos y en reconocimiento a la antigüedad, se pagará una indemnización adicional de 500 euros por año trabajado.

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Además, y en caso de adscripción voluntaria a las medidas de bajas incentivadas, la entidad abonará una indemnización por "prima de enganche", que será de 25.000 euros cuando el empleado lleve en el Popular 25 años o más, de 20.000 euros para una antigüedad de 21 a 24 años, y de 15.000 euros cuando la horquilla de veteranía está entre 16 y 20 años. Para los menos antiguos, entre 11 y 15 años, la prima será de 10.000 euros; de 7.000 cuando el tiempo en la empresa oscile entre 5 y 10 años, y de 3.500 para los más nuevos, con menos de 5 años en la entidad.

El acuerdo también ofrece la alternativa de excedencias voluntarias compensadas durante 3 años, prorrogable un año más, para un máximo de 250 empleados menores de 50 años y con más de 10 de antigüedad. Durante esa excedencia, el empleado recibirá anualmente 15.000 euros.

El acuerdo también fija que los empleados mayores de 50 años percibirán sus indemnizaciones mediante esquemas de "prejubilación" hasta que cumplan los 63 años. Por tanto, quienes se acojan a estas excedencias no podrán prestar servicios profesionales a entidades competidoras con el Banco Popular. Además, se establecen medidas de movilidad geográfica, que afectan hasta a 200 empleados, con la intención de corregir desequilibrios de plantilla territoriales y que llevan aparejadas compensaciones económicas en función de las distancias.