Siete casas, una piscina y una pista de tenis, un poblado a la venta en Lleida por 1 millón

Un millón de euros. Es lo que cuesta comprar un poblado rural en Lleida (en la localidad de Camarasa) de 1.800 metros cuadrados, compuesto por siete casas de diferentes superficies y construcciones anexas, piscina propia, pista de tenis, jardines, zonas de bosque y huertos.

Es el curioso anuncio que recoge estos días el portal inmobiliario Fotocasa. Un pequeño poblado situado en el paraje natural de la sierra del Montsec cuyo comprador necesitará, no obstante, realizar algunas reformas para entrar a vivir o destinarlo, por ejemplo, a un negocio turístico rural.

"Hemos detectado un éxodo de grandes ciudades a núcleos urbanos más lejanos pero asequibles"

La construcción de este poblado rural se llevó a cabo, en su mayoría, en torno a 1930. Ha pasado casi un siglo y las casas siguen en pie, en una ubicación privilegiada y en muy buen estado. La mayoría de ellas conservan parte de los elementos que las hacen características.

“Tras la pandemia, hemos detectado un éxodo de las grandes ciudades a núcleos urbanos más lejanos pero asequibles. Una huida al campo y a lo rústico sin precedentes, después de haber visto durante años cómo las grandes urbes adquirían cada vez más protagonismo en la demanda de vivienda. Por ello, en un momento clave, en el que la salida al exterior y la búsqueda de espacios abiertos y naturales están en aumento, se necesitan medidas y políticas de acondicionamiento de telecomunicaciones, para que las zonas rurales dispongan de servicios principales como por ejemplo una buena conexión a internet, que permita desarrollar el teletrabajo con normalidad. Este aspecto podría impulsar la tan anhelada repoblación de la España vaciada”, explica María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa.

La venta de poblados, pequeños pueblos o aldeas es llamativa, pero no es algo nuevo. Ya en 2013, cuando el mercado inmobiliario español estaba a punto de tocar fondo, comenzaron a proliferar los anuncios con la venta de pueblos y aldeas abandonados, algunos a precio de saldo. Uno de los portales más activos y especializados en la venta de este tipo de activos era www.aldeasabandonadas.com, que a través de su web ponía en el mercado algunos de los miles de pueblos abandonados tras el éxodo rural, unos 3.000 en toda España.

Hoy, en esa misma web se puede encontrar la venta de un pueblo —por 49.000 euros— compuesto por nueve casas y una finca de 4.000 metros cuadrados, "ideal para grupos, teletrabajo o turismo rural con encanto", reza la web, que actualmente tiene a la venta aldeas y pueblos abandonados por toda España, unos 150, con precios que oscilan entre los 30.000 euros y los 6,8 millones.

Aumenta la búsqueda de finca rústica

"Más de un año después, resulta evidente que la pandemia ha conllevado una serie de cambios de hábitos y costumbres en muchos ciudadanos", destaca Matos, quien asegura que, "tras la experiencia del confinamiento, muchos españoles se replantearon el tipo de vivienda en que querían vivir, demandando cada vez más viviendas con exteriores y provocando un éxodo de las grandes ciudades a la periferia".

De hecho, los datos del portal inmobiliario Fotocasa reflejan que, durante el confinamiento, la búsqueda de fincas rústicas fue la que más creció, un 46% más respecto a antes de la pandemia. En este sentido, durante buena parte de 2020, los tipos de vivienda más demandados en los municipios de la provincia de Madrid fueron la casa adosada (86%), la finca rústica (72%), la casa-chalé (40%) y el ático (40%). Por su parte, en los municipios de la provincia de Barcelona, las tipologías más buscadas fueron los apartamentos (52%), la casa-chalé (49%), la casa adosada (30%) y las fincas rústicas (22%).

De hecho, el peso de los chalés a la hora de comprar una vivienda ha alcanzado máximos históricos. Ahora las familias buscan más espacio, independencia y aire libre. Así, por ejemplo, según los últimos datos del Consejo General del Notariado, en los cuatro primeros meses del año se vendieron más de 47.000 chalés, lo que se traduce en 573 ventas diarias.

Asimismo, la pandemia también ha impulsado el teletrabajo en muchos sectores, provocando que muchos ciudadanos se hayan planteado un cambio de residencia. Los últimos datos de Fotocasa Research muestran que más de un 30% de los trabajadores que tienen perspectiva de teletrabajar de forma completa (más de tres días a la semana) y creen que podrán hacerlo a largo plazo se han planteado un cambio de residencia y las zonas que les resultan más atractivas son los espacios rurales (45,5%) y las zonas de costa (33,4%).