Varsovia utiliza almejas para evitar el envenenamiento del agua

Almejas como sistema de alarma para avisar de la contaminación del agua. Parece ciencia ficción, pero no lo es: en Varsovia (Polonia) ya lo utilizan y estos moluscos son los responsables de cortar el suministro de agua de la que beben unas ocho millones de personas.

Según el Departamento Municipal de Aguas de Varsovia, citado por Checkers Saga, los niveles de contaminación del suministro de agua de la ciudad son controlados por ocho almejas que, literalmente, tienen la capacidad de pulsar un botón de alarma y cortar el suministro de agua de la ciudad.

Estos moluscos pasan 24 horas al día filtrando el agua de los ríos donde viven y cuando detectan el más mínimo signo de contaminación, se cierran. Aprovechando este recurso natural, los científicos polacos han colocado un muelle con un pulsador en la concha de la almeja y la introducen en el depósito de agua.

Concha cerrada: peligro

Mientras el agua se encuentre limpia, la almeja tendrá la concha abierta para filtrarla. Si detecta algún tipo de contaminación en el agua, cierra automáticamente la concha y esto activa el muelle, que aprieta el botón de alarma. Si este mecanismo se replica en más de una almeja simultáneamente, se activa un protocolo que corta el suministro de agua de Varsovia. Es en ese momento cuando los investigadores intentan verificar qué ha pasado, pero la población se encuentra a salvo de un posible envenenamiento.

Para garantizar que la almeja no se acostumbra al agua procesada y, por tanto, su capacidad de medición/detección se vea comprometida, cada almeja solo se utiliza durante tres meses. Después de ese tiempo, se marca para no volver a ser utilizada, y se devuelve al río de donde se extrajo.