Esta fue la venganza de un hombre que no paraba de escuchar reguetón del vecino: "Podría ser ilegal"

• Un equipo español demuestra el movimiento mecánico de un motor cuántico por primera vez
• Científicos descubren el fósil de un 'dragón chino' de hace 240 millones de años

Imagina llegar a casa buscando relajación y encontrarte con que el vecino, amante de la música y de la fiesta, decide poner sus canciones favoritas a todo volumen. Además, no pone cualquier melodía, sino reguetón, un estilo musical que puede no gustar a todo el mundo.

Debido a un escenario similar es como nació el último invento que se ha viralizado en redes sociales. Se trata de una máquina bautizada como ‘Reggaeton Be Gone’, un artefacto creado por Roni Bandini, un argentino usuario de TikTok y X.

Cansado de escuchar las mismas canciones constantemente y a un volumen muy elevado, el hombre ha creado un aparato que es capaz de reconocer de forma clara las melodías utilizando inteligencia artificial. Una vez reconocida la música, el dispositivo ataca directamente al altavoz bluetooth que lo está reproduciendo con la idea de desconectarlo o, como mínimo, interferir en el audio para que este sea inaudible.

Adiós al reguetón

El propio Bandini ha compartido su creación en redes sociales. A través de un vídeo ha explicado que lo más difícil ha sido poner en práctica el invento. Para ello, el argentino ha descargado temas representativos del género, los ha manipulado y se ha apoyado en inteligencia artificial para desarrollar el software.

Además, ha entrenado a un algoritmo para que sea capaz de reconocer los ritmos habituales de este estilo musical. Así, cuando el algoritmo detecta que se está reproduciendo una canción de reguetón, emite una señal que afecta al bluetooth, produciendo interferencias.

En el vídeo ha explicado el proceso de creación al mismo tiempo que ha contado su problemática con el vecino, quien además suele situar el altavoz cerca de su pared, lo que resulta aún más molesto.

Según detalla su inventor, el proyecto no ha sido del todo fructífero. Uno de los principales problemas que ha surgido es debido a las paredes, algo que no permite al dispositivo interferir por completo la señal.

Sin embargo, el argentino, a pesar de su experiencia, ha decidido no patentar su proyecto. En cambio, ha tomado la decisión de hacer públicas las instrucciones del aparato a través de Internet para que cualquier persona pueda utilizarlo.

Con cierto humor, Bandini ha comentado que el invento lo ha puesto en marcha debido a que “mis habilidades sociales son inferiores a mis otras habilidades”. Gracias a este razonamiento se le ocurrió esta curiosa idea que ha dejado sorprendido a más de uno.