Esta Navidad te va a caer un móvil como regalo y vas a volver a cometer los mismos errores

Es normal dejarse llevar por el entusiasmo cuando te regalan un nuevo móvil. Sobre todo, si llevas unos vinos de más y has comido langostinos por encima de tus posibilidades. Por eso, te invitamos a que resistas la tentación de saltarte todos los menús iniciales para sacarle fotos al menú navideño, ya que hay algunas tareas que es un error saltarse cuando comienzas a usar un dispositivo.

No hacer copia de seguridad de WhatsApp

Antes de empezar a cometer errores, es bueno saber si ya has cometido el primero, que es no hacer copia de seguridad de tu viejo móvil. Sí, lo sabemos. Los de tecnología somos muy pesados con lo de las copias de seguridad, pero es que es demasiado importante para no insistir. Además, eso te facilitará restablecer tus datos en el móvil nuevo cuando lo tengas. En Android es tan sencillo como ir a la app Google One y seguir las instrucciones. En Apple, la mejor alternativa es iCloud.

Por cierto, antes de dar tu copia de seguridad por buena, revisa dos cosas. La primera es WhatsApp, ya que permite guardar tus conversaciones tanto en Google Drive como iCloud, siempre que hayas autorizado esa copia desde la app de mensajería. Igualmente, hay aplicaciones de fabricantes de móviles que a veces guardan sus datos fuera de Google. Revisa las aplicaciones de contactos, notas o tareas por si acaso y, además, instala sus versiones homónimas de Google para sincronizar esos datos.

A la hora de hacer la copia de seguridad, asegúrate también de que incluye tus ajustes de configuración, contactos, aplicaciones (y los datos que estas usan), el historial de llamadas y mensajes, contraseñas y todos los archivos que quieras conservar.

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Ignorar el asistente de inicio del nuevo móvil

Normalmente, cuando enciendes un móvil nuevo, una de las primeras sugerencias es si quieres restablecer los datos del que hasta ahora era tu teléfono. A menos que quieras comenzar una nueva vida tras pasar por un programa de protección de testigos, te recomendamos muy encarecidamente que lo hagas. Al menos, si no quieres tener que teclear todas tus contraseñas de nuevo, entre otros pesares.

Android tiene un sistema de restablecimiento de datos que normalmente usa la última copia de seguridad que hayas guardado en Google Drive. Este asistente se inicia nada más encender el móvil y se basa en tu cuenta de Google. No es buena idea ignorarlo, ya que la mayor parte de aplicaciones de terceros para restablecer datos suelen tener dos problemas: no son compatibles con tu móvil o son de pago. También se puede hacer mediante cable si tienes el otro dispositivo a mano.

Instalar un antivirus o un gestor de apps

Tómate tu tiempo para revisar tu nuevo móvil y eliminar las aplicaciones que no te interese tener. Muchos fabricantes añaden bloatware a sus móviles, que consiste en preinstalar determinadas apps por algún acuerdo comercial con el desarrollador. Normalmente, se mantienen inactivas, pero desinstalarlas puede liberar un precioso espacio en el disco duro.

Ya que estamos hablando de aplicaciones, toma nota de esto: no cometas el error de instalar un antivirus. Sí, has oído bien. No solo consumen mucho espacio, sino que además ralentizan el funcionamiento del teléfono. Si descargas apps oficiales en las tiendas de Google y Apple, no deberías necesitarlo.

Otro tanto ocurre con los gestores de aplicaciones que, supuestamente, acaban con las apps que están consumiendo batería o datos en segundo plano. No necesitas una aplicación de terceros para eso. Tu móvil, sea Android o iOS, ya lo hace solo divinamente, así que instalar una app de terceros lo único que hace es entorpecer y... tener una aplicación más ejecutándose en segundo plano.

No cortar los permisos a las aplicaciones

Por defecto, las aplicaciones suelen tener activados un montón de permisos que no deberían. ¿Para qué diablos necesita un juego hacer llamadas o una aplicación del tiempo acceder a tu cámara? En estos casos lo mejor es entrar en la lista de apps y revisar los permisos que tiene cada una. Si tienes dudas, desactiva el permiso. El propio software te pedirá que se lo concedas de nuevo si llega a hacerte falta.

Un apartado de permisos especialmente espinoso es el de ubicación. No se trata tanto de una cuestión de privacidad, sino de un problema de batería. Las aplicaciones gastan un montón de energía cuando las dejas acceder al GPS en segundo plano. Entra en la lista de aplicaciones desde el menú Ubicación y aplica tijera sin miramientos. Muy pocas aplicaciones necesitan acceder a tu ubicación todo el rato en segundo plano (normalmente, solo las deportivas deberían hacerlo).

Poner 123456 como contraseña

Cada año sale la lista de las contraseñas más utilizadas y... 123456 sigue siendo la más utilizada, con más de 4 millones y medio de incautos. Y no, tu fecha de nacimiento, la de tu hijo o el nombre de tu perro tampoco valen. Básicamente, porque es lo primero que los ciberdelincuentes tratan de averiguar. En cuanto al PIN que da acceso a tu móvil, mejor si es de seis dígitos, ya que es mucho más difícil de obtener a la fuerza mediante alguna estrategia combinatoria.

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Para empezar, activa el bloqueo de pantalla y elige un PIN de seis dígitos (que no sea 123456, por favor). Después, configura el sensor de huellas digitales y/o el de detección de cara. Sí, sé que es una molestia si desbloqueas mucho el móvil, pero el estrés de perder un móvil que no tenías bloqueado es algo que no le recomiendo a nadie. Lo sé porque me ha pasado.

Asumiendo que tengas una contraseña sólida (o un grupo de ellas), aún puede haber un error en el que caigas y es... no tenerla a mano. Si usas un gestor de contraseñas como 1Password o LastPass, es bueno que recuerdes la contraseña maestra. Y si eres de los que usa varias contraseñas seleccionadas manualmente, haz memoria, porque las vas a necesitar.

No borrar tus huellas

Ahora que tienes un nuevo móvil... ¿Qué vas a hacer con el anterior? Si planeas venderlo o regalarlo, recuerda dejarlo bien formateado para que no tenga contenido personal o se pueda usar para acceder a tus cuentas.

Un último detalle es aprovechar el cambio de dispositivo para revisar tus suscripciones. En Android puedes comprobarlas desde la aplicación de Google. En los iPhone desde Configuración / Tu nombre / Suscripciones. Incluso aunque no pretendas darte de baja, a veces puede ser complicado acceder a servicios online si cambias de dispositivo y no recuerdas la contraseña. La cosa es aún peor cuando cambias de número de teléfono y tienes activada la doble verificación en esos servicios. El estreno de un móvil es buen momento para revisar todo eso.

Regalar un nuevo móvil

Si eres tú el que va a regalar un móvil a alguien y buscas algo asequible, recuerda que a veces es mejor un móvil de gama alta de hace dos años que uno de gama media actual. Si buscas un buen móvil a la última y no te importa pagar a lo grande, el Samsung S23 Ultra es la referencia Android más fiable, pero ronda los 1.250 euros. En la misma línea de precio y prestaciones está el Oppo Find X5 Pro.

Si buscas un Android igual de potente, pero más contenido en precio, el Google Pixel 8 Pro es la segunda mejor opción, rondando los 1.000 euros. Por 200 euros menos tienes el OnePlus 11 Pro, una auténtica bestia que todos los años rivaliza con los Galaxy en hacerse con el trono. En Apple, el iPhone 15 es probablemente el mejor de este año en relación precio-potencia.

En el segmento de móviles algo más asequibles, pero igualmente muy recientes, nuestra recomendación es el Realme GT 2 Pro, que protagoniza una oferta con precio de 450 euros esta Navidad. Si no lo encuentras, el Realme GT Neo 3 es una respetable alternativa. En la misma línea está también el Poco F5 Pro (450 euros) y el Xiaomi 13 T. Es un poco más caro (500 euros), pero tiene unas excelentes cámaras firmadas por Leica.

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