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Doctores rusos y mascarillas chinas: Italia se vuelve el escaparate de la solidaridad global
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Italia, símbolo de la pandemia

Doctores rusos y mascarillas chinas: Italia se vuelve el escaparate de la solidaridad global

Italia detalla las ayudas y muestras de solidaridad para combatir la pandemia del Covid-19, una lista que sorprende por lo mucho que han sonado unas ayudas y lo poco que se conocen otras

Foto: Llegada de un equipo de médicos cubanos a Turín. (EFE)
Llegada de un equipo de médicos cubanos a Turín. (EFE)

"La solidaridad debe ser la tinta con la que escribir esta página de la historia", decía una carta de Giuseppe Conte enviada a la presidenta de la Comisión Europea, la alemana Ursula von der Leyen.

La solidaridad que ha recibido Italia, primer país occidental golpeado por el coronavirus y, junto a China, símbolo internacional de la pandemia, se ha convertido en un examen a la empatía y generosidad de la aldea global. Los movimientos diplomáticos han generado una importante red de solidaridad internacional que ha llegado de todas partes, incluso de países con pocos recursos.

¿Quiénes han sido los Estados que más ayuda han enviado a Italia? Rusia, China y EEUU parecen encabezar la complicada de establecer lista de donantes de material médico y envío de sanitarios. Los países europeos, cuya cabeza es Alemania, están lejos de las cifras de las tres superpotencias en estos baremos en los que quedan fuera ayudas financieras y repatriaciones.

Foto: La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen. (EFE)

"Giuseppi was very happy" (Giuseppe estaba muy feliz), anunciaba el presidente estadounidense, Donald Trump, tras hablar con el primer ministro italiano y firmar un memorándum de ayuda a Italia por valor de 100 millones de dólares en material sanitario. En cantidad bruta, esta es la mayor aportación recibida por Italia, pero se trata de una medida a futuro, ya que hasta la fecha no se ha recibido aún nada. Por tanto, la ayuda llegará lejos de los picos máximos de la pandemia. Además, diversas asociaciones italianas en EEUU han recaudado 17,9 millones de dólares con los que se ha financiado, entre otras cosas, un hospital para enfermedades respiratorias en Cremona con 60 camas.

En el entorno Unión Europea, Alemania, uno de los países más criticados por parte de la sociedad italiana que ve en su postura contraria a los eurobonos una muestra de insolidaridad, ha trasladado a 36 pacientes italianos para tratarlos en sus hospitales en los momentos de mayor colapso sanitario (puso a disposición de las autoridades de Roma 85 camas) y ha dado 75 respiradores. Los datos alemanes en coste son elevados pero difíciles de cuantificar. El coste de traslado de 36 pacientes de Italia a Alemania y el posterior tratamiento en unidad de cuidados intensivos, junto al coste de 75 máquinas de ventilación, es más elevado que algunas cifras más espectaculares de otros estados que entregan mascarillas y trajes.

placeholder Ayuda humanitaria de Ucrania a Italia. (Reuters)
Ayuda humanitaria de Ucrania a Italia. (Reuters)

Francia, por su parte, ha enviado un millón de mascarillas y 20.000 trajes protectores para médicos. Polonia ha mandado 2.000 litros de desinfectante y Austria, 3.360. Hungría, 100.000 mascarillas y 5000 trajes, mientras que Suiza ha mandado 50.000 mascarillas y 5000 trajes. Estonia, la semana próxima enviará 30.000 mascarillas; Lituania, 10.000 y Letonia donará material desinfectante y termómetros especiales. Luego, ha habido numerosas pequeñas asociaciones italianas en el ámbito europeo que han contribuido con diversas ayudas.

Una buena campaña china

¿Y China? De allí llegó primero el virus y después buena parte de las donaciones. Desde un punto de vista comunicativo ha sido el país que con Rusia mejor ha publicitado sus ayudas, con una completa campaña de imagen alentada en los medios en los inicios de la pandemia. Pekín entregó entonces 2,2 millones de mascarillas y 2.000 test de diagnóstico a la Unión Europea que posteriormente fueron dados a Italia. La ayuda China sigue en todo caso llegando, también directamente a algunas regiones, con otras 100.000 mascarillas y 50.000 guantes y trajes. Hay, además, múltiples donaciones de entes locales y privados chinos que superan en total la cifra de 7 millones de mascarillas y 150 respiradores.

Foto: Donald Trump y Xi Jinping, segundos antes de darse la mano el 9 de noviembre de 2017. (Reuters)

Por su parte Rusia, cuyos camiones militares con material y médicos recorriendo las carreteras de Italia tuvieron un enorme impacto por lo simbólico de la imagen, ha donado 330.000 mascarillas, 1000 trajes, dos máquinas para realizar test rápidos, 10.000 test rápidos, 100.000 test PCR, un laboratorio de análisis, tres dispositivos de limpieza desinfectante para transporte y tres dispositivos de limpieza para grandes superficies. Hubo también donación de ventiladores pulmonares y habrá en las próximas semanas nuevos envíos de material.

Ayudas de todas partes

La lista del resto de países donadores es muy larga. India ha entregado 40.000 mascarillas, 100.000 guantes y 20.000 cascos y calzado protector. Turquía, 150.000 mascarillas, 1000 trajes, gafas y líquido desinfectante. La Media Luna Roja turca entregó además a la Cruz Roja de Italia otras 100.000 mascarillas quirúrgicas y 20.000 mascarillas para médicos. Egipto ha mandado 500.000 mascarillas y 300 trajes. Emiratos Árabes Unidos ha entregado 10 toneladas de diverso material sanitario. Kuwait donará cinco millones de dólares. Catar ha mandado material para crear dos hospitales de campo para 500 personas cada uno. Ucrania, nueve toneladas de desinfectante.

También la OTAN, a la que se solicitó ayuda el 26 de marzo, ha implementado un mecanismo de ayuda que ha generado ya la llegada desde la República Checa de 10.000 trajes protectores (la ayuda turca mencionada antes se enmarca también en esta petición a la OTAN).

Foto: EC.
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Pero además de material, hay países que han enviado médicos y enfermeros sobre el terreno. La falta de sanitarios fue en el momento del pico máximo de personas hospitalizadas un grave problema en las regiones más golpeadas que necesitaban manos para atender a los pacientes ante la baja constante de personal que se contagiaba.

La lista aquí señala la llegada de 104 sanitarios de Rusia, 52 de Cuba, 39 de China, 29 de Albania, 20 de Ucrania, 19 de Noruega, 15 de Polonia, 15 de Rumanía, 12 de Canadá, siete de Túnez y cuatro de Alemania.

Además, la Protección Civil Italiana, ante la bajada de presión en los hospitales, no ha tenido la necesidad de aceptar la ayuda ofrecida de sanitarios de países como Etiopía, Croacia, Grecia, Libia, Macedonia del Norte, Eslovaquia, Eslovenia y Suiza.

Foto: Sergio Romagnani. (EC)

A diferencia de Italia, que ha recibido ayuda en forma de equipos médicos de casi todas las esquinas del globo, España no ha aceptado recibir personal médico extranjero para hacer frente a la epidemia de coronavirus. En el caso de los equipos de doctores europeos enviados mediante el Mecanismo de Protección Civil de la UE a Italia, la Comisión Europea confirmó a El Confidencial que España no había solicitado ese tipo de ayuda en forma de delegaciones de personal sanitario, sino solo de material médico y de protección, como mascarillas.

Disculpas europeas

En términos globales, la solidaridad ha llegado de muchas partes y llama la atención que los países europeos, incluso algunos poco golpeados por el virus, no figuran en los primeros lugares. “Europa hasta ahora no ha sabido mostrar suficiente solidaridad. No ha sabido ni ha querido hacer juego de equipo”, decía recientemente en una carta al Financial Times el Ministro de Asuntos Exteriores, Luigi Di Maio. “Un espectáculo objetivamente triste que debe hacer reflexionar no solo a todos los italianos sino a todos los ciudadanos europeos”, concluye el máximo representante de la diplomacia transalpina.

Foto: Test de coronavirus en Roma (EFE)

Sin embargo, hoy mismo Di Maio, ante las excusas pedidas por Von der Leyen en el Parlamento europeo por la falta de solidaridad europea con Italia, ha declarado: "La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se disculpó hoy con Italia, admitiendo que muchos países no estuvieron presentes al comienzo de la pandemia cuando necesitábamos ayuda. Sus palabras representan un importante acto de verdad, que es bueno para Europa y nuestra comunidad".

"La solidaridad debe ser la tinta con la que escribir esta página de la historia", decía una carta de Giuseppe Conte enviada a la presidenta de la Comisión Europea, la alemana Ursula von der Leyen.

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