La batalla de Kiev: "El objetivo de Rusia es asediar la capital para acabar con el Gobierno"

Segundo día de la ofensiva militar rusa contra Ucrania. Kiev ha amanecido con el estruendo de las sirenas antiaéreas, varias explosiones de fuego de artillería y los reportes del avance de las tropas rusas cada vez más cerca de la capital, donde este viernes se concentra la mayor intensidad de la lucha. Con la entrada de las primeras tropas rusas en un distrito a apenas 10 kilómetros del centro urbano, ha comenzado la batalla de Kiev.

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"Los aviones enemigos están operando vilmente sobre áreas residenciales, en particular en la capital. Explosiones terribles en el cielo matutino sobre Kiev. Bombardeos. Impacto en un edificio residencial. Incendios", ha lamentado el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, en una alocución a sus ciudadanos la mañana del viernes. Muchos han pasado parte de la noche en estaciones de Metro, preparadas por las autoridades ucranianas para servir de refugios antibombardeos. Durante la mañana están llegando imágenes desde Kiev de ciudadanos que difunden en redes sociales sonidos de disparos, imágenes de tanques y de soldados rusos. "Esta mañana estamos defendiéndonos solos. ¿Convencieron ayer las sanciones [occidentales] a Rusia? Oímos en nuestro cielo y vemos en nuestro suelo que no fueron suficientes", ha añadido, haciendo un nuevo llamado a más sanciones y ayuda internacional para hacer frente a la invasión.

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Mientras el presidente pronunciaba estas palabras, los combates se enrarecían en las localidades de Dymer e Ivankiv, a 45 y 80 km al norte de Kiev respectivamente, donde las Fuerzas Armadas ucranianas han informado de una lucha contra unidades blindadas rusas. "Los tanques rusos avanzan en dirección de Kiev", dice el comunicado. Con el foco de la operación militar rusa en Kiev, potencialmente para forzar la rendición del Gobierno ucraniano, las tropas ucranianas han apostado por comprar tiempo, haciendo volar tres puentes que llevaban a la capital, con la intención de impedir un 'desfile' de tanques rusos hacia Kiev.

"Saboteadores" en el barrio de Obolon

La 'pinza' militar rusa habría llegado hasta el distrito urbano de Obolon, un barrio residencial a las afueras de Kiev (a apenas 10 kilómetros del centro), según ha informado el Estado Mayor de la Defensa ucraniano en un comunicado. El ministerio ha pedido a los residentes que informen de los movimientos de las tropas rusas o que respondan con cócteles molotov para "neutralizar al invasor".

Según detalla el medio ucraniano 'NV.ua', citando fuentes del Ministerio del Interior, las fuerzas rusas en Obolon —presuntamente vestidas con enseñas ucranianas— serían parte de los "saboteadores" cuya presencia en Kiev denunció anoche el presidente Zelensky. Siembre según Ucrania, habrían sido repelidas.

Controlar los aeropuertos

Pero la clave siguen siendo los aeropuertos aledaños a Kiev, donde continúa la lucha. La noche del jueves, las fuerzas ucranianas aseguraron haber repelido el esfuerzo ruso para tomar el aeródromo de Hostomel, al norte de la capital, pero las columnas rusas estarían avanzando hacia los aeropuertos kievitas de Sikorsky o Boryspil, según los partes de seguridad distribuidos por los distintos organismos ucranianos. Si las tropas rusas logran hacerse con los aeropuertos, facilitará el desplazamiento aéreo de nuevas tropas y vehículos ligeros para reforzar el asalto a Kiev.

Una vez conquistados los aeropuertos, entrarían en juego los "saboteadores" mentados por Zelensky, que atacarían infraestructuras energéticas o de comunicaciones de la ciudad, acompañadas de una nueva oleada de ciberataques, como los que ya ha sufrido el país en las últimas semanas.

"Hoy entendemos que el escenario fundamental de Rusia en Ucrania es asediar a Kiev y destruir el liderazgo del Gobierno [ucraniano]. Ese es su objetivo final", apunta en esta línea Mykhailo Podoliak, de la Oficina presidencial de Zelensky.

"La situación es muy dolorosa, una pesadilla"

Para los ciudadanos de a pie, el momento es de caos y miedo. “La situación es muy dolorosa, una pesadilla. Se están produciendo fuertes combates, pero estamos resistiendo. El problema es que no tenemos ningún apoyo armamentístico ni político… Pero todo el mundo está listo para luchar. Necesitamos armas y un sistema antimisiles. Ahora mismo nos disparan y no hay resistencia porque no tenemos nada con lo que defendernos”, explica Yuri, ucraniano de mediana edad que ha pasado la noche en un refugio antibombardeos y que esta mañana ha decidido salir de la ciudad. "Los rusos ya están aquí", dice a El Confidencial vía WhatsApp.

"Horribles bombardeos rusos sobre Kiev. La última vez que nuestra capital experimentó algo así fue en 1941 cuando fue atacada por la Alemania nazi", ha declarado el ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba. "Ucrania venció a aquel mal y vencerá a este. Detened a Putin, cortad todos los lazos. Echad a Rusia de todas partes".

Funcionarios de defensa ucranianos han asegurado el viernes por la mañana que múltiples ataques con misiles habían alcanzado Kiev, pero los objetivos y el daño infligido siguen sin estar claros. “Dicen que los objetos civiles no son un objetivo para ellos”, aseguró Zelensky sobre el ataque ruso. “Es mentira, no distinguen en qué áreas operar”.

Pese al fuerte bombardeo y el avance ruso hacia la capital, Zelensky ha asegurado que permanecerá en Kiev, aunque asegura que él es el "objetivo número 1" de Rusia. Con la seguridad de Zelensky "en cuestión", Francia ha ofrecido ayuda al mandatario: "La seguridad del presidente Zelensky es un elemento central en estos momentos, estamos en situación de ayudarle si fuera necesario. Es importante que mantenga su puesto", dijo Le Drian, que se dijo dispuesto a "tomar las medidas que se precisen" para preservar su integridad.