La ultraderecha ya se sitúa como segunda fuerza en Alemania, según una encuesta

El partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) supera al Partido Socialdemócrata (SPD) y se sitúa ya como segunda fuerza en intención de voto, según un nuevo sondeo elaborado por el institudo demoscópico Insa que ha publicado este martes el diario Bild. No obstante, ambos partidos siguen lejos del bloque conservador formado por la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Angela Merkel y su partido hermano, la Unión Socialcristiana (CSU).

El partido de Gobierno gana medio punto porcentual y se afianza en el 28,5% de intención de voto, un incremento similar al que experimenta AfD, que supera el margen del 17% en detrimento de los socialdemócratas. Los verdes se mantienen en cuarto lugar con el 13,5% de apoyos, mientras que Die Linke (La Izquierda) y el Partido Liberal (FDP) caerían medio punto hasta situarse en el 10% y el 9,5%, respectivamente.

De acuerdo a estos datos, la gran coalición no lograría la mayoría parlamentaria necesaria para gobernar tras unas hipotéticas elecciones, al sumar apenas un 44,5 % de los votos. Una coalición tripartita entre el bloque conservador, los liberales y los verdes —como la que sondeó Merkel de manera frustrada tras los comicios generales de hace un año— alcanzaría actualmente el 51,5% de apoyos.

Otras encuestas conceden aún una ajustada ventaja a los socialdemócratas, pero todas coinciden en señalar la tendencia al alza de la extrema derecha

Otras encuestas, como el 'Politbarometer' que publica mensualmente la televisión pública alemana ZDF, aún dan una ajustada ventaja a los socialdemócratas, si bien reconocen el ascenso de la extrema derecha. Sin ir más lejos, el sondeo difundido el pasado viernes da una ventaja al SPD de apenas el 1% en el segundo puesto, mientras que la CDU y CSU se mantendrían en primer lugar con el 31%.

No es la primera vez que los ultraderechistas logran aventajar a los socialdemócratas en las encuestas —ya lo hicieron en junio y en frebrero— pero esta vez coincide con la oleada de violencia xenófoba que se ha desatado durante las últimas semanas en el Este del país a raíz de recientes crímenes cuyos principales sospechosos son extranjeros. "En Alemania no hay espacio para tomarse la justicia por su mano, para grupos que quieren propagar el odio en las calles, para la intolerancia y para el extremismo", declaró el portavoz del gobierno, Steffen Seibert, tras la marcha del movimiento de ultraderecha Pro Chemnitz que el pasado domingo se saldó con una persona muerta y seis heridas.