Nuevas pruebas de la ITV: cambios en el proceso de inspección de vehículos

El próximo 20 de mayo de 2023 llega la nueva revisión del Manual de Procedimiento de ITV (Inspección Técnica de Vehículos). La nueva versión trae dos novedades que afectan a este proceso al que se enfrentan todos los conductores cada cierto periodo de años. Una, relacionada con el sistema de llamada de emergencia, bautizado como 'ecall', y la otra con la recopilación de datos sobre el consumo OBFCM (On-Board Fuel Consumption), realizada a través del ordenador a bordo.

Sin embargo, estas novedosas no afectarán a todos los vehículos. La prueba de la llamada solo se podrá hacer a modelos más nuevos, en concreto a los matriculados a partir de marzo de 2018. El motivo es que en ese momento entró en vigor la homologación del 'ecall', por lo que no se puede exigir a registros previos. Por su parte, el sistema de recogida de datos va dirigido a turismos y furgonetas ligeras matriculadas a partir del 2021, ya sean de combustión tradicional o híbridos.

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El Confidencial

La buena noticia es que, según ha adelantado Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración (AECA), que trabajan junto al servicio de ITV, estos añadidos a las revisiones no afectan o añaden responsabilidades al usuario. Según han asegurado, "la inspección no sufrirá modificaciones, ya que estas nuevas pruebas no implicarán una acción adicional por parte de los conductores que acudan a las estaciones".

Cómo afectan al usuario las pruebas de la ITV

En cuanto al 'ecall', son los operarios los que deberán revisar que todo está en orden. Para ello, mediante una inspección visual se asegurarán de que el sistema existe y está en correcto funcionamiento. Altavoces, botones e indicadores deben estar en perfecto estado, a lo que se sumará un autodiagnóstico que confirmará que todo funciona de forma correcta.

La recopilación de datos del medidor de consumo de combustible a bordo será, en todos los casos, anónima. La ITV debe así recoger el consumo de combustible y electricidad que realizan los vehículos obligados a pasar por el proceso. Una vez utilizados los datos, estos serán borrados de forma permanente. Todo acorde a la solicitud que la Comisión Europea ha realizado a los países miembros, que han ido poniendo en marcha el sistema de forma paulatina.