¿Por qué será tan baja la huella de carbono de los coches de Astara Team en el Rally Dakar?

Astara Team, el nuevo equipo de competición creado por el grupo automovilístico español conocido hasta hace una semana como Bergé Auto, acaba de presentar su escuadra para el próximo Rally Dakar, que se disputa del 1 al 14 de enero de 2022 en Arabia Saudí. El protagonismo es para los dos buggies 01 Concept, prototipos de 4,65 metros de longitud y 1.621 kilos de peso que participarán encuadrados en la categoría T1.3, pilotados por Óscar Fuertes, que ha terminado las tres ediciones de esta prueba en las que ha corrido y acumula grandes éxitos en el automovilismo 'off road', y el televisivo Jesús Calleja, siendo sus copilotos, respectivamente, Diego Vallejo y Edu Blanco.

El 01 Concept de Astara Team recurre a un poderoso motor V8 de 7 litros de cilindrada que rinde 385 CV de potencia a 4.600 rpm y 720 Nm de par máximo a 4.300 rpm, asociado a un cambio secuencial Sadev de 6 velocidades y que transmite toda su potencia al tren posterior, pues en esta categoría solo se admiten vehículos 2WD. Pero además del objetivo deportivo, el equipo se ha marcado otro de tipo medioambiental, pues quieren competir de forma más sostenible y generando la menor huella de carbono en la historia de la carrera, para lo cual han optado finalmente por alimentar la mecánica con combustible sintético, o e-fuel, que es más ecológico y neutro en carbono.

Cada prototipo tiene capacidad para 360 litros de e-fuel, distribuidos en dos depósitos de 180 litros cada uno, y según los responsables de Astara esta es la forma de llevar energía que menos ocupa y pesa, lo que permite, por ejemplo, que el 01 Concept sea el coche más ligero de su categoría. Y es que al igual que ocurre con los combustibles fósiles tradicionales, el e-fuel es capaz de almacenar una enorme cantidad de energía, pues solo un litro de este avanzado combustible sintético contiene el equivalente a 10,752 kWh (su rendimiento energético es un 12% superior al de la gasolina); y 9,3 litros de e-fuel suponen la misma cantidad de energía que una batería de 100 kWh, que es 55 veces más pesada. De hecho, los 360 litros de e-fuel que caben en un buggy de Astara con sus depósitos llenos suponen 3.870 kWh de energía: unas baterías eléctricas capaces de almacenar la misma cantidad de energía pesarían más de 22 toneladas.

El combustible sintético, o e-fuel, se produce a partir de agua y del dióxido de carbono (CO2) del aire, y es neutro en carbono, pues el CO2 que emite durante su combustión (un 70% menos que si el motor empleara gasolina) es el mismo que se ha extraído de la atmósfera durante el proceso de producción. Además, no emite residuos sólidos ni micropartículas. Y para demostrar que es una solución de movilidad sostenible y muy eficaz, además de una fórmula con aspiraciones de victoria en la prueba, al final del Rally Dakar se elaborará un informe completo de la huella de carbono generada por los dos prototipos 01 Concept, siguiendo protocolos de medición estandarizados (GHG Protocol, norma ISO 14064) y bajo la supervisión de una entidad independiente, de manera que podrá conocerse cuál ha sido su verdadero impacto ambiental.

Los e-combustibles, al detalle

La producción de e-fuel se basa en la extracción de hidrógeno mediante la electrólisis que descompone el agua en hidrógeno y oxígeno, proceso éste que, como otros pasos necesarios para su fabricación, se realizan con electricidad procedente de energías renovables. En un segundo paso, ese hidrógeno se combina con el CO2 extraído del aire gracias a un proceso químico denominado 'síntesis de Fischer-Tropsch', del que resulta un hidrocarburo líquido sintético fácil de usar, pero también de transportar y almacenar, ya que el e-fuel se maneja a presión y temperatura ambiente, al igual que los combustibles y lubricantes fósiles tradicionales. Gracias a ello puede aprovechar las infraestructuras actuales de transporte y distribución de combustible, como camiones cisterna, tuberías o estaciones de servicio.

Además, es totalmente compatible con los motores de combustión interna actuales, de manera que puede utilizarse en turismos, motocicletas, vehículos comerciales o camiones y autobuses, pero también en aviones o barcos, que de ese modo pasarían a ser más respetuosos con el planeta. Y es que una vez que se completa el procesamiento en la refinería, el e-fuel puede sustituir por completo los carburantes convencionales, pudiéndose utilizar como e-gasolina, e-gasóleo, e-queroseno o e-lubricante; aunque también existe la posibilidad de mezclarlo con combustibles y lubricantes tradicionales en la proporción que se estime oportuno, pues su composición química es idéntica.