BMW renueva el X7, ahora con etiqueta eco hasta en la versión V8 de 530 caballos

BMW tiene en el X7 su modelo SUV de mayor tamaño en la actual gama, con sus 5.162 milímetros de longitud, 2.000 de anchura y espacio para siete ocupantes. Además, también es el modelo más exitoso de la casa bávara dentro de la clase de lujo, lo que escenifica la importancia de los vehículos todocamino o SUV en la actualidad, pues hasta hace poco el título de 'rey del lujo' en la marca pertenecía a la Serie 7. Ahora, la firma de Múnich ha sometido a este coloso a un lavado de cara bastante sustancial que abarca áreas como el diseño, las mecánicas, tecnología, interior, conectividad o sistemas automatizados para la propia conducción o el estacionamiento.

El renovado X7 comenzará a comercializarse a partir de agosto, procedente de la planta de BMW en Spartanburg, Estados Unidos, y llegará con multitud de cambios, empezando por su aspecto. Y es que en este apartado la marca alemana ha querido darle un toque más expresivo con el nuevo lenguaje de diseño de los modelos de lujo de BMW. Así, encontramos un frontal bastante cambiado con respecto al modelo actual, pues desaparecen los faros dobles circulares y la parrilla en forma de riñón para dar paso a una nueva interpretación del conjunto. Los faros dobles ya no son redondos, sino más bien con forma de 'L' girada, y ahora las ópticas están realmente divididas en dos elementos bien diferenciados: en la zona superior tenemos una iluminación LED en forma de tira estrecha que incluye las luces de conducción diurna, las de posición y los intermitentes. Bajo estas, en un módulo independiente que está incrustado en el paragolpes delantero, van los faros de cruce y de carretera, que mientras estén apagados permanecen prácticamente ocultos por una cubierta oscurecida.

En cuanto a la nueva calandra delantera, de generosas proporciones y con lamas dobles, ahora, como novedad, puede ir retroiluminada gracias a la parrilla BMW 'Iconic Glow', deserie en la versión superior y opcional en el resto.

La vista lateral de este X7 actualizado muestra otro elemento nuevo, y que supone un récord para un BMW de producción, como son las llantas de aleación de 23 pulgadas opcionales (de serie viene con llantas de 20 o 21 pulgadas, según la versión). También trae esta renovación colores nuevos a la paleta, como el Sparkling Copper Grey metalizado o el M Marina Bay Blue metalizado, al margen de los alrededor de 40 colores BMW Individual bajo petición especial, para hacer nuestro coche completamente personal.

En la zaga, BMW ha apostado por unos pilotos traseros LED con un diseño tridimensional y que presentan una imagen muy fina. La barra cromada cubierta de cristal que los une se extiende entre los grupos ópticos izquierdo y derecho, haciendo que la impresión de anchura del vehículo sea aún más palpable. También en la zona trasera encontramos el portón trasero dividido y de accionamiento eléctrico, que permite abrir y cerrar ambos elementos sin necesidad de usar las manos gracias a la función Acceso Confort de serie. La capacidad del maletero del X7 alcanza 2.120 litros si solo necesitamos dos plazas, aunque si tenemos las cinco o las siete plazas en uso, ese volumen se reduce hasta los 750 y 326 litros, respectivamente.

Cambios con un gran peso

Pero los cambios no solo han llegado al diseño exterior, pues también se ha renovado el interior de este lujoso y gigantesco SUV, que ahora dispone de la nueva generación de BMW iDrive ID8 con su consiguiente pantalla BMW Curved Display, ya vista en modelos como el SUV eléctrico iX. Esta pantalla corrida aúna bajo una misma superficie acristalada una pantalla de información de 12,3 pulgadas, que es el cuadro de instrumentos, y una multifunción y táctil de 14,9, dando la sensación de ser una sola de grandes dimensiones y suponiendo un gran salto respecto a la anterior generación, pues ya hemos podido verla y probarla cuando nos pusimos al volante del BMW iX, y el avance nos parece notable.

Asimismo, el BMW Live Cockpit Professional incluye BMW Head-pp Display y el sistema de navegación basado en la nube BMW Maps, con realidad aumentada en la pantalla central que nos permite ver a través de una cámara frontal las indicaciones superpuestas sobre la carretera por la que circulamos, de manera que es prácticamente imposible equivocarse en una salida o intersección, por ejemplo. El sistema iDrive ID8 también permite la integración del smartphone mediante Apple CarPlay y Android Auto, mientras que la eSIM personal diseñada para tecnología 5G puede utilizarse directamente en el vehículo para distintas operaciones y tareas, ya que el coche puede recibir actualizaciones remotas (OTA) de software.

También se ha rediseñado el salpicadero en su conjunto, con molduras de madera fina para el interior, salidas de aire más estilizadas y una franja de iluminación ambiental retroiluminada para el lado del acompañante, y que integra el emblema X7. Entre los dos asientos delanteros encontramos un panel de control en la consola con nueva palanca de selección de marchas, botonera física para distintos elementos de configuración del vehículo y aplicaciones en cristal 'Crafted Clarity' para determinados mandos; aunque, eso sí, disponibles de manera opcional.

Para el mercado europeo, el equipamiento de serie incluye la tapicería de cuero ampliada BMW Individual Merino, disponible en cuatro colores a elegir, así como los asientos confort calefactados, con superficies calentables también en los reposabrazos y portabebidas calefactables o refrigerados, así como una nueva variante bicolor disponible como opción. En otros mercados la tapicería es Sensafin, un nuevo material de material vegano de alta calidad con propiedades similares a las del cuero, una posibilidad que no estará disponible en Europa.

Las tres filas de asientos para albergar a siete ocupantes son de serie (en el X5, por ejemplo, podemos elegir entre versiones de cinco y siete plazas), aunque opcionalmente se pueden pedir dos asientos confort para la segunda fila, reduciéndose en ese caso el aforo a seis plazas. Lo que sí es común es que todas las funciones de los asientos son de accionamiento eléctrico, como también lo es el techo solar panorámico de cristal de serie. Y si se quiere algo un poco más personal se puede dar el salto al techo panorámico de cristal Sky Lounge con iluminación LED atmosférica, otro extra más.

Por último, en el apartado mecánico BMW introduce el nuevo Paquete M Sport y, por vez primera, el M Sport Pro, así como la nueva versión X7 M60i xDrive, con tecnología de chasis específica y distintos elementos M exclusivos, y que viene a sustituir al anterior X7 M50i xDrive. Ambas variantes tienen la misma potencia, 530 caballos, pero el motor de gasolina V8 TwinPower Turbo ha sido mejorado y equipa ahora tecnología Mild-Hybrid de 48 voltios, con un motor eléctrico de 11 caballos, común en las tres motorizaciones de este X7 2022, pues tanto los dos propulsores de gasolina como el único diésel de la gama recurren a la hibridación suave y obtienen la etiqueta ECO de la DGT, rebajando de paso algo los consumos y las emisiones. El nuevo X7 M60i xDrive, gracias a su elevada cifra de potencia, a su tracción total y a una nueva transmisión Steptronic de ocho velocidades que también montan las otras dos mecánicas, es capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos, y su velocidad máxima, limitada electrónicamente, es de 250 km/h. En cuanto a eficiencia, su consumo combinado WLTP es de 12,2 l/100 km.

Como segunda versión de gasolina tenemos el X7 xDrive40i, que monta un motor de seis cilindros en línea TwinPower Turbo con tecnología Mild-Hybrid de 48V y genera ahora 380 caballos, frente a los 333 CV del anterior X7 xDrive40i. Su transmisión es también la Steptronic de ocho marchas, y arroja un par máximo de 540 Nm, ayudando a cubrir la aceleración de 0 a 100 km/h en 5,8 segundos (la anterior versión lo hacía en 6,3) y a alcanzar una velocidad máxima autolimitada de 250 km/h, cuando antes se quedaba en 243 km/h. Además, el consumo medio WLTP de la versión xDrive40i es de 10,5 litros cada 100 kilómetros.

La única alternativa diésel del X7 es la versión xDrive40d, también con tecnología Mild-Hybrid de 48 V y que mantiene la misma potencia de antes, 340 CV, por lo que su aceleración de 0 a 100 km/h no varía y sigue situada en 6,1 segundos, con una velocidad máxima de 243 km/h. Y comparando con los X7 de gasolina, destaca en el capítulo del consumo, pues a pesar de su gran tamaño y su generosa potencia, el gasto mixto WLTP es de 8,7 l/100 km.

Para poder lidiar con semejantes cifras de potencia (de 340 a 530 caballos) y mantener al X7 en su categoría de lujo, BMW recurre a una suspensión neumática adaptativa en ambos ejes con amortiguadores controlados electrónicamente de serie. La dirección activa integral y el Executive Drive Pro con estabilización activa del balanceo son opcionales (en el X7 M60i xDrive son de serie), pero ayudan tanto a la maniobrabilidad en terrenos urbanos de un vehículo de este tamaño como a un mejor manejo en carretera.

Por último, en el apartado tecnológico enfocado a la seguridad este renovado X7 cuenta con una selección aún más amplia de sistemas de conducción y aparcamiento automatizados, y el aviso de colisión frontal de serie detecta ahora el tráfico que se aproxima al girar a la izquierda (en los países que se circula por la derecha), así como a los peatones o ciclistas cuando giramos a la derecha. Disponibles también se encuentran por vez primera el control de rutas, la navegación activa, el reconocimiento de semáforos y el asistente de remolque y maniobras; a lo que se suma una experiencia de usuario que ahora podemos personalizar con BMW ID, My BMW App o BMW Digital Key Plus.