España necesitará un mínimo de 340.000 puntos públicos de recarga eléctrica en 2030

ACEA, la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles, ha sacado los colores a España en su último informe de electromovilidad, al señalar que el desarrollo de los puntos de recarga en nuestro territorio está muy desequilibrado, al contrario de lo que ocurre en países de nuestro entorno como Alemania, Francia e Italia, con un incremento de la infraestructura más equilibrado. Por ejemplo, España representa el 12% de la superficie analizada por ACEA en su estudio pero solo tiene el 3% de los puntos de recarga, mientras que Italia representa el 7% del territorio y ha instalado el 6% de los puntos de recarga, y Francia va más allá porque supone el 14% del territorio pero concentra el 21% de los puntos de carga.

Solo un 6,2% de electrificados

El resultado es que España se sitúa a la cola de Europa tanto en penetración del vehículo electrificado (poco más del 6% de las ventas totales en el primer semestre, sumando el 2% de eléctricos puros y el 4,2% de híbridos enchufables) y en instalación de puntos de carga pública, algo sobre lo que también alerta el Barómetro de Electromovilidad de ANFAC (Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones) en su edición correspondiente al primer trimestre de 2021. Por eso esta asociación y la patronal de los concesionarios de automóviles (Faconauto) han presentado su 'Mapa de despliegue de puntos de recarga de acceso público para vehículos electrificados', que contempla una infraestructura de recarga pública con 340.000 puntos para el año 2030, lo que incentivará la demanda ese tipo de vehículos. Es decir, se trataría de multiplicar por 30 en estos nueve años los 11.517 puntos de acceso público existentes hoy en nuestro país.

Además, ambas asociaciones dibujan un mapa por CCAA donde proponen los puntos de recarga de acceso público mínimos que hay que instalar en cada provincia y corredor, para adecuarlos al crecimiento deseado del mercado. Ambas asociaciones piden un órgano de gobernanza, auspiciado desde el Ministerio de Transición Ecológica y Retro Demográfico (MITERD), que impulse, monitorice y coordine el despliegue de todos los puntos para tratar de cumplir el ambicioso objetivo del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, que exige alcanzar un parque de tres millones de turismos enchufables (cien por cien eléctricos o híbridos PHEV) para 2030.

ANFAC, en colaboración con Faconauto, ha desarrollado una metodología que permite planificar y monitorizar, año a año y, a nivel cuantitativo y cualitativo, el desarrollo de infraestructura de recarga de acceso público necesaria a nivel nacional y por comunidades autónomas, provincias y principales corredores en base al nivel de intensidad media de tráfico, para cumplir con los objetivos de penetración de vehículos electrificados. Para establecer el indicador sobre los puntos necesarios y su distribución a lo largo del territorio se ha partido de la previsión de cuota de parque de vehículos electrificados (turismos y comerciales ligeros) en cada provincia hasta 2030, la cuota de población motorizable en cada provincia y la cuota de PIB por provincias, para posteriormente aplicar una distribución cualitativa por provincias en base a tres ratios: un punto de más de 50 kW de potencia por cada 100 vehículos eléctricos puros, uno de más de 150 kW por cada 1.000 vehículos eléctricos puros y otro más de 250 kW por cada 1.000 vehículos eléctricos puros.

El análisis, además, se complementa con un estudio de la necesidad de infraestructura de alta potencia (por encima de 250 kW) en los principales corredores de la Red de Carreteras del Estado. Para ese cálculo se han tenido en cuenta las intensidades medias diarias por tramo de vía y provincia, una distribución mínima de un punto de más de 250 kW por cada 100 kilómetros de vía, la cuota de vehículos eléctricos puros sobre el total del parque de vehículos en cada provincia y que el tiempo de espera para recargar no fuera superior al de un vehículo que ya esté cargando. De ese modo, ANFAC y Faconauto obtienen el número de puntos mínimos de alta potencia en cada uno de los corredores por provincias.

Ya debería haber 70.000 en 2023

El cruce de ambos análisis da como resultado el detalle de cuántos puntos de recarga de acceso público y de qué potencia deberían desplegarse en cada provincia. Una herramienta que, según sus impulsores, permite ir definiendo los objetivos año a año para acompasarse con el crecimiento necesario de parque necesario para alcanzar esos tres millones de turismos electrificados en 2030. Y como hitos intermedios, el mapa ahora presentado llevaría a una red mínima con 70.000 puntos de recarga de acceso público en 2023, 120.000 en 2025 y los 340.000 ya citados en 2030.

Para las dos asociaciones promotoras del plan, su objetivo es contribuir a acelerar la electrificación en nuestro país para que España no se quede rezagada respecto a los países líderes de la UE, pues ANFAC y Faconauto ven en la escasez de infraestructuras públicas de recarga una de las principales causas de desánimo e inseguridad a la hora de adquirir un vehículo de esta tecnología. Y de seguir con la tendencia de crecimiento actual en matriculaciones de vehículos, no alcanzaríamos, en opinión de las asociaciones, los objetivos de descarbonización con los que el sector está comprometido.

Para José López-Tafall, director general de ANFAC, “el sector tiene un fuerte compromiso con la descarbonización y ya está poniendo en el mercado una amplia oferta de vehículos electrificados. Pero nos enfrentamos a unos, cada vez más, exigentes objetivos en materia de reducción de emisiones y, por lo tanto, es necesario establecer herramientas a la altura que aceleren la transición. El desarrollo más rápido de la infraestructura de recarga de acceso público es esencial para recuperar terreno con los líderes europeos”. López Tafall indicaba también que “es necesario seguir trabajando en este gran proyecto-país de la movilidad del futuro. La metodología que hemos elaborado es una propuesta constructiva y concreta para ayudar a cumplir los objetivos de descarbonización y electrificación en España, y un ejemplo más del compromiso que tiene la industria con el país y la movilidad sostenible”.

En idéntica línea, Marta Blázquez, vicepresidenta ejecutiva de Faconauto, señalaba que “eliminar las barreras de entrada de los ciudadanos al vehículo eléctrico ha de ser una prioridad para los sectores que estamos involucrados en su impulso y también para las Administraciones Públicas. Las cifras nos dicen que, hoy, una de las barreras más importantes es la falta de una red pública de puntos recarga numerosa y suficientemente extendida por toda la geografía de nuestro país. La propuesta de despliegue de puntos que hoy presentamos, y que cuantifica las necesidades en 340.000 en 2030, pretende ser una palanca para avanzar más rápidamente, pero ha de conseguirse con el esfuerzo de todos y estar sustentada en objetivos vinculantes. Salvada esta barrera, estamos seguros de que también se salvará la distancia que actualmente hay entre el vehículo eléctrico y los ciudadanos”.