Volkswagen mejora la potencia, autonomía y tecnología de los ID.4 e ID.5, sin subir precios

Volkswagen ha presentado una renovación centrada en la mejora de la potencia, autonomía y tecnología interior de los ID.4 e ID.5, pero lo hace manteniendo el precio actual de ambos modelos en el mercado. De este modo, el ID.4 tiene una factura de partida de 53.690 euros y el ID.5 de 55.520 euros, con pedidos ya abiertos en nuestro país. Una receta que a comienzos de septiembre también siguió Tesla con la actualización del Model 3, ya que la marca americana también mantuvo inalterado el precio de su sedán eléctrico pese a las importantes mejoras.

En el interior, Volkswagen ha trabajado en ofrecer un funcionamiento más intuitivo. Para ello, tanto el ID.4 como el ID.5 reciben un nuevo software de última generación y un nuevo sistema de infoentretenimiento que pasa de las 12 a las 12,9 pulgadas. Este cuenta con una nueva estructura de menús, al mismo tiempo que se ha mejorado el Digital Cockpit, la instrumentación digital de serie, y el Head-up Display opcional de realidad aumentada. Mientras, los dos eléctricos alemanes incorporan un nuevo asistente de voz IDA, que responde con mayor precisión que en el pasado a las órdenes de voz naturales y ofrece nuevas funciones, como la información meteorológica basada en la nube, el estado de eventos deportivos o cotizaciones bursátiles.

Por otro lado, los deslizadores táctiles para el aire acondicionado y el control del volumen ahora están retroiluminados, y el volante multifunción con nueva operativa de funcionamiento también es de estreno. Además, Volkswagen ha eliminado y separado el selector de modos de conducción del Digital Cockpit, y lo ha incorporado como un interruptor en la columna de dirección, como en el recién llegado ID.7. La mejora interior se completa con un nuevo sistema de sonido de la marca Harman Kardon con 480 vatios de salida y 10 altavoces, incluidos el central y el subwoofer, como opcional en ambos modelos.

Más potencia y autonomía

Los ID.4 Pro e ID.5 Pro, ambos con batería de 77 kWh, ahora incorporan un motor eléctrico de 210 kW (286 CV), que heredan de la berlina ID.7, y supone 60 kW más de potencia que en los modelos anteriores. De este modo, la entrega de potencia es mayor, ya que el par máximo pasa de 310 a 545 Nm: 235 Nm adicionales, lo que supone un 75% más. Esta mejora de rendimiento también se da en los ID.4 GTX y ID.5 GTX, ya que elevan su potencia a 250 kW (340 CV), que equivale a un aumento de 30 kW (41 CV). De este modo, el paso de cero a 100 km/h de ambas versiones eléctricas baja a 5,4 segundos, pero la velocidad máxima sigue limitada electrónicamente a 180 km/h, misma punta que en las variantes Pro mencionadas, que antes alcanzaban solo 160 km/h.

Y no solo hay incremento de potencia, sino también de autonomía. Por ejemplo, el ID.4 Pro ahora puede recorrer una distancia de 550 kilómetros con una sola carga (WLTP), 17 kilómetros más que antes. En el caso del ID.5 Pro esta autonomía asciende hasta 556 kilómetros, lo que supone un aumento de 11 kilómetros frente a su predecesor. Respecto a la recarga, los ID.4 e ID.5 con tracción trasera siguen cargando a un máximo de 135 kW en corriente continua, pero las versiones GTX, con tracción total, aumentan esta capacidad de carga de 135 a 175 kW. De este modo, con la máxima potencia de carga, estas versiones de ID.4 e ID.5 pueden recuperar 178 kilómetros de autonomía en unos 10 minutos.

Por último, la marca alemana ha optimizado la gestión térmica de la carga, que garantiza el preacondicionamiento de la batería antes de la siguiente parada para recargar la batería. Además, se ha reconfigurado el tren de rodaje, se ha perfeccionado el control de chasis adaptativo (DCC) opcional y se ha configurado el Gestor de Dinámica del Vehículo para ofrecer un mayor equilibrio entre confort y dinámica.