Los motivos por los que el Mercedes CLS enamora: deportividad y clase invencible

La marca alemana Mercedes inventó allá por el año 2004 un nuevo concepto de vehículo, el de la berlina premium cupé, con cuatro plazas y un gran maletero como casi todas las berlinas, pero con un estilo deportivo gracias a la parte trasera de su techo en caída. Era el CLS, un modelo que ha tenido un gran éxito comercial desde entonces. Ahora, llega al mercado la tercera generación de este concepto de coche que emplea la misma plataforma que el Clase E y por ello todos sus sistemas de ayuda a la conducción, pero con un estilo exterior más llamativo y un nivel de equipamiento aún más completo. En el video que acompaña esta prueba pueden ver el lujoso acabado interior de nuestra unidad de pruebas.

Como todos los nuevos Mercedes, en su habitáculo destaca un salpicadero completamente digital en el que están unidas dos pantallas de 12,3 pulgadas, la del cuadro de instrumentos y la de la consola central. El resultado es realmente espectacular y proporciona al conductor toda la información necesaria en todo momento. Navegador, sistemas de ayuda, equipo de sonido, posición de los asientos o masaje… Hasta ofrece visión nocturna, por supuesto también cuenta con cámara 360° que proporciona una visión perfecta de todo el entorno del vehículo, cámara hacia delante o hacia atrás. Y todo ello con unas pantallas de la máxima resolución.

Este CLS se ofrece con cuatro motorizaciones diferentes de las que tres son diesel. La que hemos probado, la 350D incorpora un motor de 286 caballos que es ideal para mover este vehículo con la máxima agilidad e incluso con la deportividad que demuestra su estética. Lo mejor es que con este motor se convierte en un coche de viaje perfecto. Un vehículo premium, elegante y con mucho estilo, pero al mismo tiempo una máquina para devorar kilómetros.

Lo mejor es que es un coche poco consumidor, con un valor homologado de solo 5,6 litros en ciclo mixto, pero que realmente sube poco si hacemos una conducción tranquila cumpliendo con los límites de las carreteras españolas. Algo que, por cierto, es difícil y siempre hay que ir pendiente del velocímetro porque una ligera presión sobre al acelerador nos expondrá a una multa. El CLS tiene otros detalles importantes para convertirse en un gran coche para viajar, como su gran maletero, de 520 litros, o su gran autonomía.

En el lado negativo hay que destacar que aunque es un coche ancho, de las tres plazas traseras dos son utilizables a tiempo completo, mientras que la central es bastante más limitada. Por un lado la banqueta de este asiento es más estrecha y dura que las dos laterales. Pero además es que el túnel de la transmisión es muy alto lo que hace que ese pasajero central tenga que, o bien ir con los pies subidos encima del túnel, en una posición incómoda, o con un pie por cada lado del túnel que no sé si es aún peor.

Automático de 9 marchas

Asociado con este brillante motor encontramos el cambio automático de convertidor de par con nueve marchas que permite una perfecta dualidad de utilización. Se puede hacer una conducción tranquila a diario pero cuando se requiere una conducción más deportiva y unos cambios más ágiles, lo permite mediante las levas del volante. El conductor puede elegir entre diferentes modos de conducción, desde el más tranquilo hasta una opción deportiva más radical. Con este sistema se ajustan los principales sistemas del vehículo, motor, cambio, suspensión o dirección al estilo seleccionado por su conductor. Un último detalle, al que nunca termino de acostumbrarme, es a su palanca del cambio de marchas en el volante, en el lugar que habitualmente ocupa en otros coches el limpiaparabrisas.

El precio de partida para la gama CLS se sitúa en los 70.000 euros, aunque en el caso de esta versión que hemos probado, con el motor de 286 caballos, sube hasta los 77.500 euros. Sus alternativas son vehículos como el Porsche Panamera o el Audi A7 Sportback y ambos son más caros si se comparan versiones similares, aunque en el caso del Porsche no cuenta con variantes de gasóleo.

Ficha técnica

Motor: 6 cilindros en línea

Potencia máxima: 286 CV a 4.600 rpm

Par máximo: 600 Nm desde 1.200 rpm

Cilindrada: 2.925 cc

Combustible: gasóleo

Velocidad máxima: 250 km/h autolimitada

Aceleración de 0 a 100 km/h, 5,7 segundos

Caja de cambios: automática de 9 marchas.

Tracción: 4x4 (4 Matic)

Consumos homologados (Urbano/ extraurbano/ mixto): 6,7/ 4,9/ 5,6 litros.

Dimensiones (longitud/anchura/altura), 4,99 x 1,89 x 1,43

Capacidad maletero: 520 litros.

Peso en vacío: 1.925 kg.

Precio: 77.500 euros.