Rusia sube los tipos al 10,5% para defender al rublo... pero al mercado le parece poco

El Banco de Rusia ha vuelto a subir los tipos de interés con fuerza por segunda reunión consecutiva. Si en octubre los elevó del 8 al 9,5%, en diciembre los incrementa hasta el 10,5%. ¿El motivo? La intención de frenar el desplome del rublo e intentar contener así las presiones inflacionistas. ¿Lo está consiguiendo? No, porque el rublo prolonga su caída, ya que al mercado le sabe a poco el movimiento de la entidad gobernada por Elvira Nabiullina.

El euro se aprecia un 1,3% contra el rublo, hasta los 69 rublos, y el dólar, un 1,6%, hasta los 55,7 rublos. En ambos casos, sus subidas se han acelerado tras conocer la subida del precio del dinero. Y en ambos casos alcanzan nuevos máximos históricos contra la divisa rusa.

La bolsa rusa se vuelve a ver afectada por las crecientes dudas financieras que genera el país. El índice RTS se deja otro 3,6% y recula hasta los 824 puntos, con lo que se afianza en mínimos desde 2009. En lo que va de año acumula una caída del 43%.

La institución monetaria afrontaba esta cita en medio del dilema en el que está atrapada por la preocupante situación económica que atraviesa el país. Por un lado, amenaza la recesión, un riesgo agravado por la caída del petróleo. Y por otro, presiona la inflación, avivada a su vez por la caída del rublo. En noviembre, los precios se encarecieron a una tasa interanual del 9,1%, la mayor desde 2011.

Por el momento, con las dos últimas subidas de los tipos, el Banco de Rusia otorga una mayor prioridad a la necesidad de respaldar al rublo e intentar contener la subida de los precios. Eso si, sin la contundencia con lo que actuaría si el peligro de la recesión no fuera tan evidente. Por el momento, las autoridades contemplan la posibilidad de que la economía rusa se contraiga un 0,8% en 2015.