El euro se envalentona tras los buenos datos del sector servicios para presionar a Draghi

El viernes fueron los datos de actividad del sector empresarial. Y este martes, los del sector servicios. Ambas remesas de estadísticas, de forma combinada, han conformado una imagen de la Eurozona mejor de la esperada. Claramente por encima de los 50 puntos -con lo que certifican que la econonomía se expande-, están sirviendo como trampolín para el euro en su cuerpo a cuerpo contra el dólar estadounidense.

En concreto, el euro se aprecia un 0,4%, hasta los 1,3926 dólares, aunque ha llegado a marcar un máximo diario de 1,3931, su cambio más alto contra el billete verde desde mediados de marzo.

De este modo, acecha de nuevo los 1,40 dólares, una cota que no supera desde 2011, para meter más presión sobre el Banco Central Europeo (BCE) y su presidente, Mario Draghi, ante la reunión que el Consejo de Gobierno de la entidad celebrará este jueves. Aunque el banquero italiano abrió en abril la puerta a la posibidad de lanzar medidas especiales -como un QE a la europea- para luchar contra el peligro que supone un periodo largo de baja inflación, no parece que la institución vaya a pasar a la acción esta semana. Sobre todo, después de que el dato provisional de abril reflejara un repunte de la inflación interanual del 0,5 al 0,7%. Como reconoce José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España,"el mercado ha ido reduciendo sus expectactivas de que el BCE tome decisiones en la reunión de esta semana", con el consiguiente impacto en la marcha de la divisa europea.

Sin embargo, entre la clase política europea está creciendo la impaciencia ante, lo que a su juicio, es una actitud pasiva del BCE con respecto a la fortaleza de la divisa europea. Por tanto, la escalada del euro calienta las expectatitivas ante la reunión del jueves, porque el malestar puede crecer si la entidad no anuncia medidas -ni abona el terreno para hacerlo pronto- y la moneda única responde con mayores subidas.

El último acelerón del euro se apoya en la mejoría experimentada por los datos de actividad del sector servicios. En abril repuntó en la Eurozona hasta los 53,1 puntos, por encima de los 52,2 puntos de marzo y el mejor dato desde 2011. En el caso español, la subida fue más allá: de los 54 a los 56,5 puntos, el nivel más alto desde 2007.

Junto al empuje del dólar, el mercado de divisas también está pendiente del yuan chino. Tras haberlo depreciado hasta las 6,26 unidades por dólar, su cambio más bajo contra el billete verdedesde octubrede 2012, las autoridades chinas están volviendo sobre sus pasos. Este martes se revalúa un 0,3%, hasta los 6,226 yuanes, después de que el lunes ya hubiera recuperado un 0,25% de su valor.