Rodríguez-Toquero (Mahou San Miguel): "Aunque lo peor ha pasado, la hostelería sigue necesitando nuestra ayuda"
La cervecera española quiere ser un negocio 100% sostenible y para lograrlo ha anunciado una inversión a 10 años de 220 millones de euros. Hablamos con su director general, Alberto Rodríguez-Toquero, sobre este desafío
La cervecera española elabora un tercio de la cerveza que se produce en nuestro país. Sus marcas se pueden encontrar en más de 200.000 puntos de venta nacionales y hasta en 70 países alrededor del mundo. Entre los retos a los que se enfrenta ahora la compañía, ser un negocio 100% sostenible juega un papel crucial. Y es que las empresas cada vez son más conscientes de su papel en este camino. El Acuerdo de París, los ODS de las Naciones Unidas, la Agenda 2030 y la presión de una sociedad cada día más coincienciada con la huella medioambiental y la necesidad de cuidar el planeta en el que vivimos ponen el foco en un cambio radical de modelo productivo. Para conseguir este desafío, Mahou San Miguel ha anunciado una inversión a 10 años de 220 millones de euros.
Hablamos con Alberto Rodríguez-Toquero, director general de la cervecera, en el ciclo de encuentros ‘Directivos por la economía circular’, acerca de cómo la sostenibilidad marca el presente y futuro de un sector clave para la economía española.
PREGUNTA. La sostenibilidad también comienza en casa. ¿Qué prácticas realiza usted en su día a día para reducir su huella medioambiental?
RESPUESTA. Es fundamental que, como sociedad, seamos conscientes del impacto que generan nuestras acciones individuales en el entorno y de que el cambio empieza por uno mismo. Gestos tan simples como reciclar y reutilizar para reducir el volumen de residuos o hacer un consumo responsable del agua contribuyen a un gran beneficio general, mejorando la vida de las personas y del planeta. Son acciones que realizamos desde hace muchos años en casa, como consumir productos de proximidad o elaborados con criterios sostenibles. También conduzco un vehículo híbrido para reducir el impacto medioambiental de mis desplazamientos, los cuales, generalmente, los realizo andando si es posible.
P. La última ‘Memoria de sostenibilidad ambiental’ de Cerveceros España apunta a la industria cervecera en nuestro país como un ejemplo de buenas prácticas verdes. ¿De qué manera ayuda la colaboración entre las distintas empresas del sector a frenar la emergencia climática?
R. La colaboración es clave en todos los sentidos, y más en el ámbito de la sostenibilidad. Avanzar en este camino de forma conjunta es fundamental para lograr el futuro que soñamos y que necesitamos como sociedad.
Somos un sector realmente concienciado con la importancia de cuidar y respetar nuestro entorno. Nuestra compañía, como líder cervecera, también tiene un rol transformador y activo en este ámbito e intenta abrir un camino al que se sumen otras compañías. Una de las máximas de nuestra estrategia de sostenibilidad, recogida en nuestro plan para la próxima década 'Vamos 2030', es que el futuro es un viaje compartido, así que estamos encantados de que cada vez más empresas asuman este reto.
P. Han anunciado una inversión de 40 millones de euros durante este año para impulsar la sostenibilidad en toda su cadena de valor, ¿qué acciones van a implementar en este sentido?
R. Concretamente, en el ámbito medioambiental, estamos poniendo el foco en el desarrollo de proyectos de eficiencia energética, de 'packaging' sostenible y en el uso responsable de los recursos naturales. Me gustaría destacar especialmente que este año llevaremos a cabo la instalación de placas solares en nuestro centro de producción de Alovera y que nos va a convertir en la cervecera española con la mayor instalación de autoconsumo fotovoltaico de nuestro país. Gracias a esta iniciativa, que se materializará en el primer semestre del año, casi dos de cada 10 cervezas que salgan de nuestro centro estarán elaboradas con energía eléctrica autogenerada, lo que evitará la emisión a la atmósfera de más de 2.600 toneladas de CO₂ al año.
P. Esta inversión está englobada dentro de los 220 millones de euros que han estimado para su estrategia ‘Vamos 2030’. ¿De qué modo va a impactar esta en la economía circular?
R. 'Vamos 2030' es un plan a 10 años al que, efectivamente, tenemos previsto destinar más de 220 millones de euros y con el que pretendemos reforzar nuestro papel como agente de transformación social para mejorar la vida de las personas y del planeta. Uno de nuestros objetivos es fomentar la circularidad del modelo de negocio para luchar contra el cambio climático a través de toda nuestra cadena de valor. Nuestro compromiso es que en 2030 la circularidad sea una máxima de todos nuestros envases y materiales, eliminando el plástico virgen y garantizando que todos ellos sean 100% reciclables y/o reutilizables.
"Desde 2011, hemos reducido nuestro consumo unitario de agua un 18%, equivalente al consumo de una población de 5.700 personas en un año"
P. Las imágenes de 'basuraleza' son frecuentes. ¿Qué están haciendo desde Mahou San Miguel para evitar esta lamentable realidad y promover la circularidad de sus envases?
R. Como comentaba anteriormente, gran parte de nuestros esfuerzos en el ámbito de la sostenibilidad están enfocados en impulsar la circularidad de nuestros envases. El 84% de los que comercializamos en hostelería son devueltos a nuestros centros de producción para que sean reutilizados, mientras que el 70% de los que destinamos al canal de alimentación son infinitamente reciclables.
Asimismo, desde 2009, gracias a nuestras iniciativas de ecodiseño, hemos dejado de consumir 8.000 toneladas de material, evitando así la emisión de 15.000 toneladas de CO₂ a la atmósfera y generando un impacto positivo equivalente al que produce un bosque de 700.000 árboles durante un año. Por citar un ejemplo, nuestra agua mineral natural Solán de Cabras utiliza PET 100% reciclado en sus botellas y ha reducido de manera notable el gramaje de sus envases. Por otro lado, en 2022, eliminaremos más de 1.000 toneladas de plástico en todas nuestras referencias, sustituyendo los embalajes secundarios y las anillas que agrupan las latas por cartón reciclado, reciclable y procedente de bosques gestionados de forma responsable.
P. Se necesitan aproximadamente entre tres y cinco litros de agua para producir un litro de cerveza, ¿qué medidas llevan a cabo para reducir el consumo de los recursos hídricos en sus fábricas? ¿Y de los energéticos?
R. Desde 2011, hemos reducido nuestro consumo unitario de agua un 18%, un logro que ha supuesto evitar la utilización de 277.000 metros cúbicos de este preciado recurso, lo mismo que consume una población de más de 5.700 personas en un año. Si nos remontamos al año 2000, la disminución aumenta hasta el 43,6%. Con 'Vamos 2030', nos hemos marcado el objetivo de reducir en dos dígitos el consumo de agua en todos nuestros procesos, lo que viene a reforzar las acciones que hemos emprendido en este campo en los últimos años.
En cuanto al consumo energético, en 2021 pusimos en marcha el ya mencionado proyecto de autoconsumo fotovoltaico en nuestra fábrica de Alovera, en el que invertimos tres millones de euros. En esta misma línea, hemos implantado un proyecto pionero de forma conjunta con el fabricante de vidrio Verallia por el que aprovechamos la energía residual que se genera en la fundición de sus productos para emplearla en el proceso de elaboración de cerveza, en sustitución del gas natural, ahorrando así un 68% del consumo de este recurso en nuestro proceso productivo.
"La concienciación desde el sector público y privado es esencial. Debemos trabajar conjuntamente para conseguir un marco común"
P. La hostelería es uno de sus activos más importantes. Durante la pandemia, han ayudado a los hosteleros con diversos recursos para salir adelante. ¿Cómo lo hacen en materia de sostenibilidad?
R. La hostelería es uno de los sectores que se han visto más afectados por las consecuencias de la pandemia. Desde 2020, hemos contribuido a su recuperación con más de 385 millones de euros y, aunque lo peor parece que ya ha pasado, el sector necesita y seguirá necesitando nuestra ayuda. Por ello, estamos impulsando la transformación futura del sector hostelero a través de la digitalización y, por supuesto, de la sostenibilidad. En este sentido, por ejemplo, cabe destacar que estamos facilitando a nuestros clientes mobiliario para sus terrazas fabricado con materiales 100% reciclados y reciclables y parasoles que contribuyen a mejorar la calidad del aire.
P. Trabajan en más de 70 países con sus diferentes culturas y normativas. En su opinión, ¿qué más se puede hacer en la lucha contra el cambio climático a nivel global?
R. La concienciación desde el sector público y privado es esencial. Debemos trabajar conjuntamente para conseguir un marco común que nos permita centrar los esfuerzos que destinamos a esta materia y conseguir un cambio real y transversal que todos podamos sentir en nuestro día a día. En nuestro caso, por ejemplo, hemos vinculado los 15 compromisos concretos que hemos establecido en nuestro plan estratégico de sostenibilidad a los ODS de las Naciones Unidas, para que todo lo que hagamos contribuya a ese proyecto común.
Otro campo que considero que es básico es fomentar la concienciación a todos los niveles. En primer lugar, entre los más pequeños, para que comprendan la importancia de incorporar hábitos de vida conscientes y sostenibles, pero también entre la población adulta, ya que el cambio tiene que empezar desde ahora mismo y todos debemos tener clara la importancia de conseguir el cambio. Solo tenemos un planeta y tenemos que cuidarlo para que las generaciones futuras puedan disfrutar de él tanto como nosotros.
"El reciclaje es una realidad en los hogares y empresas. Las compañías tenemos mucho por hacer para fomentar la economía circular"
P. El reciclaje se ha convertido en la acción medioambiental más extendida entre los españoles. ¿Cuáles considera que son los principales logros alcanzados y qué retos nos quedarían todavía por conseguir en esta área?
R. El reciclaje ya es una realidad en gran parte de los hogares y empresas. Según los datos de Ecoembes, el hábito de separar nuestros residuos para reciclarlos no ha parado de crecer en los últimos años y, solo en 2021, se enviaron a instalaciones recicladoras más de 1,5 millones de toneladas de envases domésticos de plástico, 'brick', metal, papel y cartón.
De nuevo, las compañías tenemos mucho que hacer para fomentar la economía circular. Por ejemplo, todos nuestros centros de producción son residuo cero, gracias a la valorización del 99,9% de los residuos que generamos. Un ejemplo es que el bagazo que se extrae de nuestro proceso cervecero se utiliza, principalmente, como alimento animal, sobre todo en ganado vacuno, por su importante aporte nutricional.
10. Ustedes pertenecen a Ecoembes. ¿Cómo valoran el trabajo realizado desde esta organización ambiental para fomentar la economía circular?
R. Creo que Ecoembes tiene un rol muy importante a la hora de concienciar a la sociedad sobre la importancia de reciclar, reutilizar y reducir. Su trabajo en la promoción de la economía circular, a través de campañas e iniciativas que tienen como finalidad sensibilizar a la sociedad de la importancia de dar una segunda vida a nuestros residuos, persigue ese objetivo. Sus diferentes iniciativas para lograr un modelo circular lo más eficiente posible son muy relevantes para el desarrollo de una economía sostenible en nuestro país.
La cervecera española elabora un tercio de la cerveza que se produce en nuestro país. Sus marcas se pueden encontrar en más de 200.000 puntos de venta nacionales y hasta en 70 países alrededor del mundo. Entre los retos a los que se enfrenta ahora la compañía, ser un negocio 100% sostenible juega un papel crucial. Y es que las empresas cada vez son más conscientes de su papel en este camino. El Acuerdo de París, los ODS de las Naciones Unidas, la Agenda 2030 y la presión de una sociedad cada día más coincienciada con la huella medioambiental y la necesidad de cuidar el planeta en el que vivimos ponen el foco en un cambio radical de modelo productivo. Para conseguir este desafío, Mahou San Miguel ha anunciado una inversión a 10 años de 220 millones de euros.