A subasta por 1 M la nave calcinada del narcofrutero que trajo cocaína en fruta desde Ecuador

Frutas Mavaz SL, la empresa que alojó en el interior de su nave un alijo de 359 kilos de cocaína procedente de Ecuador, fue declarada en concurso de acreedores hace varios años y su plan de liquidación contemplaba la venta directa de la parcela en la que se ubicaba su bien inmobiliario más preciado. No obstante, tras no ser posible la operación, se ha declarado su subasta pública con el objetivo de que la cantidad que se logre vaya a saldar parte de los montantes adeudados a los acreedores, entre los que figuran entidades como Santander, BBVA, CaixaBank o Abanca, y en torno a una decena de personas a título individual.

Así, el Juzgado de Primera Instancia Número 4 de Ourense ha decretado la subasta de la parcela de 1.749 metros cuadrados que tenía la empresa en el Polígono Barreiros, en el municipio de San Cibrao das Viñas, que ha sido tasada en 905.263,69 euros y que saldará parte de los casi 2,85 millones que le reclaman los acreedores a Frutas Mavaz SL.

Sobre esta finca se levantó una nave industrial de 1.281 metros cuadrados que estaba destinada a almacén de fruta y que consta de una planta sótano, con una superficie útil de 674 metros cuadrados, que cuenta con un montacargas, muelle y aseos; una planta baja, de 1.012 metros cuadrados, con montacargas, oficinas, aseos, muelle y distribuidor; y un almacén en la entreplanta de 495 metros cuadrados.

La nave, que tiene una gran parte de su superficie calcinada, vivió un incendio a finales de 2018 que provocó que la Guardia Civil analizara no solo los restos de productos en su interior para ver si se utilizó algún acelerador del fuego, sino también para investigar la salud financiera de la compañía.

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No obstante, sería meses después cuando la Agencia Antidroga de Estados Unidos, la DEA, diera un chivatazo e iniciara colaboración con las autoridades españolas a raíz de una operación contra el narcotráfico que tenía como punto de destino la nave que ahora se subasta. El plan era trasladar cocaína, valorada en 11 millones de euros, de Colombia a Ecuador y, más tarde, a Galicia aprovechando la actividad de Frutas Mavaz, puesto que camuflaría los 359 kilos de coca en su fruta.

Lo que no sabían los nueve implicados en la operación, que aceptaron penas prisión tras un acuerdo de conformidad con el fiscal a comienzos de este año, es que el operativo policial desplegado les estaría esperando en la nave en la que descargarían la fruta que alojaba en su interior la cocaína y que trasladaron por carretera desde un puerto de Oporto (Portugal) por las carreteras portuguesas hasta el pueblo de Ourense.

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No obstante, allí las fuerzas del orden arrestarían a todos, a excepción del cerebro del plan, Juan Miguel García Santos, que permanece en paradero desconocido años después de producirse la operación policial. No así el dueño de la empresa dedicada a la venta de frutas, Manuel Benito Vázquez Pardo, que aceptó ocho años de prisión y el pago de dos multas de 15 millones al contar con la infraestructura necesaria para realizar las labores de importación en contenedores; o el resto de implicados, que afrontan penas de entre dos y casi ocho años de cárcel.

Una situación que ha trastocado la operativa de la sociedad Frutas Mavaz SL hasta solicitar el concurso de acreedores, al igual que con Froitas Mavaz Distribución SL. La empresa dueña de la nave obtuvo una facturación de más de 4,17 millones de euros y un beneficio neto de 8.109 euros en 2017, último ejercicio en el que presentó sus cuentas en el Registro Mercantil. Dos ratios que se comportan mejor que un año antes, cuando su cifra de negocio fue de 3,9 millones y registró pérdidas de 37.014,77 euros.