"Quieren talar 38 árboles con fondos de europeos": la pugna medioambiental que agita a Miraflores de la Sierra

El área recreativa de Fuente del Cura, en Miraflores de la Sierra, es un refugio recurrente para los ciudadanos, domingueros y ciclistas que buscan alejarse de las zonas urbanas del municipio. Un espacio casi sagrado para los locales que, en verano, hacen uso y disfrute de los dos chiringuitos del lugar para comprar helados y bebidas frías. El municipio ha ido escalando con los años en el top de los mejores destinos de la Sierra de Guadarrama: incluso el poeta Vicente Aleixandre le dedicó unos versos en El Álamo. Por ello, y para mejorar el mantenimiento de este enclave, el Ayuntamiento del municipio solicitó fondos de financiación para hacer frente a la obra. El problema es que esto implica la tala de 38 árboles y no todos están de acuerdo.

El pasado miércoles, en la comisión de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, el diputado Alejandro Sánchez, de Más Madrid, lanzó la pregunta a la directora general de Biodiversidad de la región. La polémica gira en torno al uso de una subvención de la Consejería de Medio Ambiente para talar una alameda en el área de influencia socioeconómica del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. "Es un lugar muy especial para los vecinos", explica Sánchez: ¿Por qué se utilizan fondos para la conservación y restauración de ecosistemas marinos y terrestres y su biodiversidad de los Next Generation para talar árboles?

La respuesta del Ejecutivo regional fue tajante: es por seguridad. La Fuente del Cura es un espacio público utilizado como "lugar de paseo y recreo" y la tala de arbolado se ejecutará para evitar "el riesgo de caída", según explicó la directora general.

Esta iniciativa se enmarca dentro de un proyecto integral de mejora y modernización de la zona. "Incluye la renovación de los accesos y de zona de aparcamiento, así como el desbroce de una superficie aproximada de tres hectáreas [...] todo para asegurar el acceso en condiciones de seguridad [...] así como la mejora del entorno, accesibilidad al río y miradores y prevención de riesgos forestales", detalló. Fuentes de la Consejería de Medio Ambiente aclaran que "aunque el proyecto incluye 38 ejemplares, la corta final de los mismos se ejecutará después de la operación de señalamiento y solo afectará a los que presentan mal estado vegetativo" y aquellos que "puedan suponer un riesgo para los usuarios y visitantes del área recreativa".

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La conclusión fue que el Ayuntamiento de Miraflores cumplía todos los requisitos para que se le adjudicara el presupuesto. La subvención se enmarca en una convocatoria de la Comunidad de Madrid de 2022 y en el "plan de recuperación, transformación y resiliencia" con fondos Next Generation de la Unión Europea.

Es este detalle el que trae de cabeza a vecinos, ecologistas y expertos. Lo que defienden es que estas acciones deben ir orientadas a preservar la biodiversidad y que la tala de árboles potencia el efecto contrario. Denuncian que se vayan a utilizar fondos europeos directamente para talar 38 árboles.

El profesor de Ingeniería y Gestión Forestal de la Universidad Politécnica de Madrid, Gabriel Dorado, redactó un informe técnico al respecto. "Pretenden usar fondos europeos cuyo objetivo es la mejora de la biodiversidad y la mitigación de los efectos de cambio climático, para talar árboles sanos y desbrozar áreas de vegetación de ribera ecológicamente muy interesante", relata a El Confidencial. Dicho estudio concluye que solo cuatro pueden correr riesgo de provocar algún altercado y recomienda revisar periódicamente todos los ejemplares para hacer un seguimiento de su evolución. De hecho, las pudriciones de estos se explican por la tala excesiva para la reducción de copa. La consejería de Medio Ambiente indica que tres de estos chopos están "ya muertos" y tienen un importante riesgo de "caída de ramas".

Por su parte, diferentes grupos ecologistas se unieron hace dos meses y medio para tratar de parar la tala. Simón Cortés, portavoz de la Asociación de Recuperación del Bosque Autóctono (ARBA), matiza que dichos árboles están sanos. "El otro día cortaron ya un chopo. Nosotros solo hemos detectado dos posibles casos de arbolado en mal estado", continúa. Detalla que se ubican fuera de las zonas de los chiringuitos.

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Por su parte, el Ayuntamiento celebró este miércoles la contestación de la Comunidad de Madrid en la comisión. "El proyecto cumple todos los requisitos requeridos", postearon en Facebook. El equipo de Gobierno ha declinado dar declaraciones a este periódico, pero en la memoria justificativa de la obra asegura que los árboles están en mal estado: "Estos árboles presentan daños de hongos xilófagos en la madera del tronco, tanto en la base como en las zonas medias. Además, presentan daños estructurales ocasionados por eventos de viento, hielo y nieve [...] al encontrarse en un área recreativa de mucho tránsito, representa un peligro para los usuarios".