La reunión entre Carmena, Iglesias, Errejón, Garzón y Sánchez Mato que lo precipitó todo

Miércoles, 13 de diciembre: reunión de urgencia en el Palacio de Cibeles. Unas 15 personas participan en el encuentro, monográfico sobre el Plan Económico y Financiero (PEF), entre las que destacan la alcaldesa Manuela Carmena, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, el exnúmero dos de esta organización y candidatable a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Íñigo Errejón, el coordinador federal de IU, Alberto Garzón, el cesado concejal de Economía y Hacienda, también de IU, Carlos Sánchez Mato, o la portavoz del Gobierno municipal, Rita Maestre, junto a asesores varios. Los citados ponen todas las cartas sobre la mesa, coinciden en la necesidad de evitar malentendidos, no caer en un cruce de acusaciones a través de los medios de comunicación y reducir al máximo el impacto público de las diferencias. A partir de ahí, comienzan las diferencias, la tensión y, finalmente, la imposibilidad de llegar a un acuerdo consensuado entre las partes, según relatan fuentes presenciales.

Carmena y su equipo ya habían enviado la tarde anterior al Ministerio de Economía y Hacienda el borrador del PEF, definiendo las líneas maestras de los recortes millonarios en consonancia con las imposiciones de Cristóbal Montoro. De ahí la tensión y la convocatoria de la reunión de urgencia, ante una eventual ruptura de la confluencia de Ahora Madrid. Desde IU plantean que no es su plan, y que votarán en contra si se convoca un pleno extraordinario el siguiente lunes. Su objetivo es que no se lleve a votación y ganar tiempo. Una proposición que se rechaza de plano. Podemos está con Carmena.

Ante la imposibilidad de modificar los tiempos, que la federación de izquierdas planteaba reunir al plenario de Ahora Madrid con el fin de convocar un referéndum de urgencia entre las bases, dejando en manos de los simpatizantes de la candidatura municipalista la última palabra sobre si asumir o no los recrotes, reclaman que se normalice la diferencia. Esto es, que no se cese por ello a Carlos Sánchez Mato, como había asegurado Carmena momentos antes si votaba en contra o se ausentaba del pleno. La formación insiste, coincidiendo en parte con Podemos, que en Unidos Podemos, el grupo confederal del Congreso, está normalizada esta diferencia. Su máxima es evitar unas represalias que desde el equipo de Gobierno se consideran inevitables debido a lo que está en juego.

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Desde Podemos se apela a la lealtad, al tiempo que tratan de convencer a IU de que no rompa la disciplina de voto a tenor de las consecuencias que, tajante, avanza Carmena. La reunión no sirve para que los actores enfrentados se muevan de sus respectivas posiciones. Cada uno expone sus argumentos, y más allá de lo que han ido explicando en público desde la votación en el pleno del PEF, se arrojan mutuamente la carga de la responsabilidad sobre el advenimiento de una crisis en Ahora Madrid.

Sábado, 16 de diciembre: Iglesias, Garzón y Ada Colau coinciden en el mitin central de campaña de Catalunya en Comú-Podem. El líder de Podemos busca evitar una crisis en el Gobierno municipal a toda costa, dado el peso simbólico que tiene el Ayuntamiento de Madrid para las aspiraciones electorales de la formación. Colau también interviene para evitar una ruptura, e incluso se producen llamadas desde otras "alcaldías del cambio" para contribuir a rebajar tensiones, como explican fuentes conocedoras de este proceso.

El objetivo compartido sigue siendo evitar un efecto dominó que extienda la inminente crisis en Ahora Madrid al resto de confluencias municipalistas. Máxime cuando se están planteando ya los términos en los que se reeditarán estos proyectos de cara a las próximas elecciones de 2019. Garzón asegura que se convocarán reuniones orgánicas de IU a lo largo del fin de semana tanto para evitar la crisis de gobierno como el cese de Sánchez Mato, a la vez que mantiene contactos con otros actores de las diferentes confluencias durante todo el fin de semana.

En las reuniones de la dirección municipal de IU se valora el sentido del voto de los tres concejales de la organización en el Ayuntamiento de Madrid. Sobre la mesa, dos únicas opciones. La primera de ellas es votar sí al PEF, siempre y cuando se añadan condiciones técnicas adicionales, que pasarían por una prórroga del presupuesto, pretendidamente hasta marzo, tratando de incluir así nuevas inversiones. La segunda opción que se somete a discusión en la dirección de IU Madrid es abstenerse y no participar en la votación, ausentándose del pleno. Finalmente vence esta última opción. Decisión que se traslada al equipo de Carmena con una última petición de retrasar la celebración del pleno.

Lunes, 18 de diciembre: celebración del pleno. La suerte está echada, y hasta los grupos de la oposición son conscientes de lo que ocurrirá a lo largo del pleno. Los tres diputados de IU, con Sánchez Mato a la cabeza, se ausentan junto a otros tres ediles del sector de Ganemos, núcleo impulsor de Ahora Madrid. El PEF sale adelante solo con los votos de los ediles del Gobierno municipal y el PP. A partir de entonces, se precipita la crisis de Gobierno que, algún avezado edil de la oposición, llevaba cronometrando desde el pasado viernes.

El futuro de Ahora madrid en 2019 y las confluencias todavía está por escribir. A corto plazo, al menos, no habrá ruptura, como se han encargado en subrayar desde la dirección de IU el mismo lunes al mediodía, asegurando que "seguimos referenciándonos en Ahora Madrid y seguimos referenciándonos en el Ayuntamiento de Manuela Carmena”. Además, hacían una llamada a la tranquilidad, dirigida tanto a sus bases como a otros actores de las confluencias, afirmando que "IU va a seguir apostando por trabajar en las candidaturas de unidad popular, en las convergencias y en las confluencias en el conjunto del Estado porque son la mejor herramienta para defender a las capas populares y trabajadoras".