Orgullo gay en Náquera, feudo de Vox: "Negáis el balcón municipal, pero tenemos el pueblo"

La llegada de Vox a la Alcaldía de Náquera, además de haber puesto a esta población valenciana de apenas 8.000 habitantes en el mapa por ser el primer municipio valenciano gobernado por los ultraconservadores, ha dado pie esta tarde a otro hito: la celebración de su primera manifestación del Orgullo LGTBI. Unas 500 personas se han unido a la movilización de la comunidad LGTBI convocada por Lamba en rechazo a la prohibición expresa de situar la bandera arcoíris en balcones y fachadas del ayuntamiento decretada por el nuevo alcalde de Náquera, Iván Expósito, de Vox, en el pacto firmado con el Partido Popular para repartirse el Gobierno municipal.

Con el lema "Ante el odio, derechos y orgullo", los manifestantes han completado el recorrido, que ha discurrido por la calle principal del pueblo en un ambiente festivo, a ritmo de batucada, con vecinos del pueblo y más de fuera, familias con niños envueltos en la bandera arcoíris y fuerte presencia policial y de la Guardia Civil, movilizados por la Delegación de Gobierno en previsión de posibles incidentes. En apenas media hora, la manifestación ha llegado a las puertas del ayuntamiento, cuyo acceso estaba perimetrado y vigilado por agentes de la Policía Local.

"Tenéis el balcón y nos lo negáis, nosotros el pueblo", han coreado los manifestantes frente a la fachada principal de la casa consistorial, cerrada a cal y canto. Al final del acto, han tomado la palabra los convocantes para lanzar proclamas como "no vamos a permitir que nos devuelvan al armario" y "Náquera orgullosa". Tras la pancarta que encabezaba la marcha del Orgullo de Náquera apoyada por varios colectivos locales activistas de los derechos LGTBI (Queer Fest, Castelló LGTBI, Chrysallis, Marietes y Mirall), ha estado la ministra de Ciencia e Innovación y cabeza de lista por Valencia, Diana Morant, acompañada de otros representantes socialistas y varios concejales de Compromís del Ayuntamiento de Valencia, como la también activista Lluïsa Notario y Sergi Campillo.

El nuevo alcalde se ha subido el sueldo a 45.000 euros y ha puesto otro de 38.000 al edil del PP

"Hoy Náquera está en todos los focos nacionales por una mala noticia, y es que el Gobierno formado por Vox y el PP ha lanzado un mensaje claro de que, en vez de ser ciudades libres de LGTBfobia, envían el mensaje contrario, es un retroceso de 20 años que [Alberto Núñez] Feijóo ha logrado en 20 días. No hay derecho más fundamental de poder amar a quien quieras. Abrazamos la diversidad y no el odio". El pacto de gobierno con el PP que dio el bastón de mando de Náquera a la ultraderecha no solo obliga a retirar las banderas LGTBI de los edificios oficiales, también niega la violencia de género y obliga a sustituir las concentraciones contra la violencia machista por actos "contra toda violencia" o "contra la violencia".

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EFE

El nuevo alcalde, que también ha creado una concejalía de Festejos Taurinos, Tradiciones y Caza y otra de Familia y Vida, ha decidido subirse el sueldo. El acuerdo con los populares contempla otorgar sendas dedicaciones exclusivas al alcalde de Vox y al teniente de alcalde popular, y dedicaciones parciales al resto del equipo de Gobierno compuesto por siete personas.

Expósito se ha puesto un salario de 45.000 euros, casi un 50% más que el anterior primer edil, mientras que Vicente Estellés percibirá 38.000 euros anuales. La edil de Toros y Caza, por ejemplo, cobrará 34.750 euros. En total, los concejales se repartirán un cuarto de millón de euros al año en salarios, al tiempo que han dejado a la oposición sin posibilidad de acceder a dietas por asistencia a plenos. La cantidad más que dobla la que aprobó en 2019 el anterior Gobierno local. El presupuesto anual del municipio es de unos 10 millones de euros, incluyendo el pago de la deuda. El exalcalde, Damián Ibáñez, ha criticado el dispendio en sueldos del nuevo equipo de Gobierno tras años de recortes y ajustes para sanear las arcas municipales.

Vox ganó las elecciones en Náquera, localidad con un censo de poco más de 6.000 votantes, con el 28,97% de los sufragios y cuatro concejales, por encima del PSOE, que fue segunda fuerza con el 24,77%. Para alcanzar la alcaldía, el candidato de los ultraconservadores, Iván Expósito, selló un pacto con el PP, cuyos tres concejales le permitieron desalojar al alcalde saliente de un partido independiente nacido antes de 2015 de una escisión de los populares.