Aragonès y el PSC cierran un acuerdo para los presupuestos de 2024 sin los comunes

El Govern y el PSC han llegado a un acuerdo para aprobar los presupuestos de la Generalitat para 2024, que todavía no cuentan con los apoyos suficientes, pues republicanos y socialistas no llegan a la mayoría absoluta de 68 diputados en el Parlament. El pacto se presenta hoy de manera formal sin los comunes con la esperanza de poner a los de Ada Colau contra la pared y que al final de la tramitación tengan que apoyarlos o que incluso se abstengan. Si los comunes o JxCAT se abstienen, los presupuestos de la Generalitat para 2024 prosperan y Aragonès salva la legislatura.

Los comunes exigían que se hiciese descarrilar de manera definitiva el Hard Rock Cafe, el complejo hotelero y de juego en Tarragona que lleva 10 años paralizado, en parte por las reticencias de ERC. El primer secretario del PSC, Salvador Illa, ha comparecido en rueda de prensa en el Parlament y ha asegurado que "A mí me gustaría que estuviesen los dos en el pacto, tanto Junts como los comunes. Un momento en el que Cataluña requiere un amplio acuerdo para el presupuesto. Pero ha de negociar el Govern".

El PSC ha presentado un documento de 17 páginas que es una lista de la compra de todo lo que se ha pactado en este presupuesto del 2024, con 7.435 millones para Educación —aunque no se dice para qué—, construir 4.000 viviendas nuevas de alquiler social y 120 millones de subvenciones para que entes locales puedan ejecutar actuaciones contra la sequía, entre los puntos más destacados.

Para Salvador Illa, "damos las condiciones para los presupuestos de 2023 por cumplidas. No dudo de la palabra del presidente de la Generalitat y tengo las garantías de que las tramitaciones pendientes seguirán adelante", obviando situaciones flagrantes, como el año que se ha perdido con el Aeropuerto de Barcelona, mientras que la ampliación de Barajas avanza con normalidad. En El Prat, la única cosa que se ha hecho ha sido crear una comisión.

Según han informado el Govern y PSC, la firma del acuerdo será este martes a las 16 horas en el Palau de la Generalitat. El primer secretario del PSC, Salvador Illa, ya afirmó el sábado que estaban en "conversaciones avanzadas" con el Govern para las cuentas tras dar por cumplido el paquete esencial de peticiones de los socialistas de los presupuestos de 2023.

El acuerdo acerca al Govern a la mayoría absoluta para poder aprobar las cuentas —contando con el aval de los 33 diputados de PSC-Units y los 33 escaños de ERC en el Parlament—, aunque aún le faltan dos votos para superar el listón de los 68. En Comú Podem podría ser el segundo socio de la oposición que el Govern necesita para desencallar los presupuestos, pero los comunes ya han advertido de que, para poder contar con ellos, Aragonès debe descartar el proyecto recreativo y turístico del Hard Rock, una iniciativa cuyo impulso era precisamente una de las condiciones que planteaba el PSC para apoyar las cuentas.

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Para los presupuestos del año pasado, el Govern cerró primero un acuerdo con los comunes y, semanas más tarde, lo hizo con el PSC, una geometría que Aragonès busca repetir esta vez, aunque con un orden inverso. Pero, con las elecciones a la puerta de la esquina, los comunes podrían tener más incentivos para derribarlos. De hecho, en el Ayuntamiento de Barcelona. PSC y ERC han pactado las cuentas, pero los comunes, con Ada Colau al frente, parecen el principal grupo de la oposición.

Después de que en el pleno del Parlament de la semana pasada Aragonès diera a entender que el proyecto del Hard Rock saldrá adelante, la portavoz del PSC, Elia Tortolero, afirmó ayer lunes que el Govern ha "cumplido" los principales compromisos pendientes de 2023, incluido el impulso del proyecto de Hard Rock, y reveló que la negociación para un acuerdo presupuestario estaba "avanzada".

Llamada a la responsabilidad

"PSC ha aprobado esto pensando en Cataluña, no estamos pensando ni en las elecciones y no aprobamos esto pensando en Barcelona", ha apuntado Illa en una alusión a si unos comunes desplazados del Gobierno municipal podían estar jugando a la contra del Parlament. Illa ha añadido que "el PSC ayudará en todo lo posible a que haya presupuesto y, desde este Parlament, hago una llamada a la responsabilidad. Pero, si esto sale mal, la culpa no será de los socialistas".

Illa ha valorado que "solo faltaría que el PSC, después de hacer un ejercicio de responsabilidad, fuese el culpable si esto naufraga. Nosotros ayudaremos en todo lo que podamos. No cambia nuestra opinión del Govern, pero le damos una pelota de gol a ver si rematan".