ERC agita la calle contra Pedro Sánchez tres semanas después de derogar la sedición

El BOE publicó el pasado 23 de diciembre la derogación del delito de sedición y la reforma de la malversación, tal vez dos de las medidas más costosas en términos electorales para Pedro Sánchez. En ese momento, la alianza del presidente del Gobierno con ERC parecía estructural, apoyada por las tensiones en el Tribunal Constitucional y Consejo General del Poder Judicial. "Ahí estará ERC porque la diferencia entre ustedes y nosotros es que nosotros y nosotras no les dejaremos tirados", aseguró Gabriel Rufián desde la bancada del Congreso. Apenas tres semanas después, los republicanos se han sumado a la manifestación del 19 de enero convocada por Carles Puigdemont desde Waterloo contra la cumbre hispano-francesa que reunirá a Pedro Sánchez y Emmanuel Macron en Barcelona. Y se cumple así el mantra del PSC que sus representantes repiten en Moncloa: “ERC no es de fiar”.

La portavoz de ERC, Marta Vilalta, denunció este lunes que se sumarán a la movilización que pretende agitar Barcelona. "Aprovecharemos la cumbre hispano-francesa para dejar claro que el independentismo sigue bien vivo". El posicionamiento de los republicanos apoya la convocatoria que hizo Puigdemont el 7 de enero. Al día siguiente se incorporaron la ANC, Òmnium Cultural, JxCAT y la CUP. Se completa, por tanto, una unidad independentista más forzada que otra cosa, pero que coinciden en que celebrar en la capital catalana una cumbre hispano-francesa con motivo del pacto para construir un corredor de hidrógeno submarino entre Barcelona y Marsella es una provocación política por parte del Gobierno de España.

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Con este giro de los acontecimientos en solo tres semanas, ya queda claro, aunque nadie lo ha verbalizado aún, que no habrá acuerdo entre ERC y PSC por los presupuestos de la Generalitat para 2023, tal y como avanzó El Confidencial. Lo que también implica que no habrá cuentas y que la prórroga presupuestaria que iba a ser técnica se convertirá en perpetua en marzo.

Cataluña será la única comunidad autónoma que se queda sin cuentas en un año en que el PIB español caerá de manera dramática. Así, las conversaciones para desjudicializar el conflicto y para que buena parte los políticos condenados pueda volver a presentarse a cargos públicos ha tenido un final tan abrupto como inesperado.

El PSC como enemigo

El PSC pasa de nuevo a convertirse en el enemigo de los republicanos. Hoy mismo, el partido de Salvador Illa celebraba la celebración de la cumbre en Barcelona, mientras que el independentismo convocaba su protesta, que aspira a que sea masiva, mediática y con impacto internacional.

Opinión

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Todos los que apostaban por un nuevo tripartito en Cataluña se han quedado de piedra, más que nada porque la prioridad de Oriol Junqueras es vencer al socialismo catalán en las elecciones municipales. Aunque el precio sea dejar a la Generalitat sin cuentas para este año en curso. Sin presupuestos y con ERC con solo 33 diputados, Pere Aragonès tendrá que avanzar los comicios el mes de octubre, una vez pasen la cita del 28 de mayo.

Sin presupuestos y con ERC con 33 diputados, no se descarta que haya elecciones en octubre

A Aragonès le queda ahora la carta de abrir juego con JxCAT, pero es muy improbable que Laura Borràs (presidenta) y Jordi Turull (secretario general) apoyen las cuentas de la Generalitat tras haber forzado la salida del Ejecutivo catalán. Los votantes de Junts no entenderían salvar al presidente catalán, al que han calificado de presidente ilegítimo tras haber roto el Govern.

Eso le permitirá ganar tiempo, pero no tener unas cuentas en condiciones. Aragonès ni podrá gobernar ni podrá legislar. Así que en términos económicos, Cataluña se enfrenta a un año perdido. Habrá que ver si la manifestación del día 19 de enero es un éxito y si la forzada unidad independentista dura hasta entonces.