La Generalitat moviliza a 409 licenciados del MIR para evitar que la sanidad colapse

Como en la guerra, el bando que va perdiendo empieza a incorporar a filas reservistas o personas muy jóvenes. Así, la Generalitat ha movilizado a 409 examinados del MIR, tanto a los que hayan obtenido plaza como a los que no, para que se sumen a los centros hospitalarios catalanes, que este fin de semana “podrían entrar en estrés” y la próxima semana "podrían colapsar", en palabras de la 'consellera de Salut', Alba Vergès. Cataluña se prepara para lo peor en medio de una fuerte escalada de los casos de contagio de coronavirus.

Ante el incremento de casos, la Generalitat está rebañando el fondo de los cajones. También se está contactando con médicos jubilados para que vuelvan al servicio activo y también con los estudiantes de enfermería de último año para que se sumen. Pero Vergès no ha dado las cifras de estos dos últimos colectivos.

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Efe

"Estamos movilizando a todos los médicos, estudiantes del último año de enfermería y licenciados en medicina de universidades catalanas. Llamamos a todos para que se puedan incorporar para hacer frente a la epidemia", ha apuntado hoy la 'consellera de Salut'.

Alba Vergès ha evitado polemizar con el Gobierno central por la falta de material médico y de protección. En su opinión, “se debe comprar desde todas las instancias pero no se pueden parar pedidos que teníamos hecho desde nuestros centros sanitarios y no entenderíamos que se pudieran parar dichos pedidos”. Sin embargo, no ha entrado a polemizar sobre ningún tema concreto.

Tampoco lo ha hecho el 'conseller' de Interior Miquel Buch que no ha renegado del despliegue del ejército español se despliegue en Cataluña para desinfectar puerto y aeropuerto. Eso sí, no ha faltado la pullita: "No haría falta desinfectarlos si se hubiera aceptado nuestra petición de cerrarlos, cuando pedimos el aislamiento".

Por su parte, la 'consellera' de Presidència Meritxell Budó ha seguido lamentándose de que el Gobierno español no haya respondido a su carta con la resolución para confinar Cataluña: "Es muy importante que el estado español nos dé respuesta y nos autorice quedarnos a casa", ha asegurado.

Medidas excepcionales

Sin embargo, todo esto parece residual. La clave es el frente sanitario, donde se está jugando a vida o muerte, de manera literal. Por eso, la 'consellera de Salut' ha asegurado que ya no se distingue en Cataluña entre sanidad pública y sanidad privada y que los centros privados ya están del todo integrados en la actividad contra el coronavirus. Lo mismos pasa con las residencias de ancianos, donde la enfermedad también está castigando a sus residentes de manera muy importante. Alba Vergès ha asegurado que se está dotando ya de material médico a este tipo de centros. También se está reforzando el Hospital de Igualada.