No hay clases para tanto maestro: los máster de profesorado se desbordan

Es un problema extensible a toda España: la Universidad pública no tiene capacidad para responder a la demanda del máster del profesorado. El Máster de Enseñanza, conocido como MAES, es un requisito imprescindible para dar clases en los institutos. Cada vez son más los jóvenes interesados en completar esta formación de posgrado destinada a quienes deciden acceder a la enseñanza tras completar su carrera universitaria. Sin embargo, la necesidad de contar con el título habilitante para opositar ha provocado que los MAES se desborden. Con largas colas de espera en las universidades públicas, la única alternativa para muchos jóvenes es cursar el máster a través de las privadas, que obligan a pagar miles de euros para abrir la puerta a la oposición.

El incremento de la demanda ha generado un problema en varias comunidades, con una oferta limitada y notas de corte muy elevadas. El año pasado, la Generalitat de Cataluña se marcó como objetivo sacar de manera urgente un millar de plazas más para evitar que los potenciales profesores siguiesen formándose en máster privados online, diseñados fuera de la comunidad, donde la formación se ofrecía en español. En la Comunidad Valenciana, las solicitudes del máster ya triplican las plazas ofertadas por las universidades, según el periódico Levante. Y en Andalucía, donde las cifras evidencian un déficit similar, preparan una propuesta que acabaría con el problema de raíz: obligar a cursarlo solo a quienes aprueben la oposición.

El MAES sustituyó a las pruebas de aptitud pedagógica y está presente en el sistema educativo desde 2008, cuando se fijó la obligatoriedad de cursarlo para ejercer la docencia en Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanza de Idiomas. Con el paso de los años, el profesorado, una opción laboral que sirve de refugio a la precariedad de otros sectores, se ha convertido en una alternativa cada vez más atractiva para los jóvenes graduados. Así lo constatan también las cifras de Andalucía, la comunidad con más opositores y donde se busca una solución al problema. Solo en las tres universidades de Sevilla, el último curso, se quedaron fuera del máster 20.000 personas. Es el triple que hace cinco años, según los datos recabados por Diario de Sevilla.

¿Reformar el sistema?

Ante estos "datos escandalosos", el PSOE andaluz quiere seguir los pasos del Gobierno catalán y plantea crear un millar de nuevas plazas para responder a la demanda. La propuesta, sin embargo, ha recibido el rechazo de la Junta por una razón: no habría clases disponibles para tanto maestro. En estos momentos, la comunidad ofrece unas 3.800 plazas anuales en el máster, pero el sistema educativo solo absorbe unas 1.500, según las estimaciones de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación. Cada año, el ritmo de egresados en los MAES públicos ya supera con creces las vacantes disponibles en las oposiciones. "Debemos adaptar la oferta académica atendiendo al sector", explican fuentes de la Consejería de Universidades. La solución, aseguran, no pasa por seguir ampliando plazas, sino por reformar el sistema.

Andalucía propondrá al Ministerio de Educación la eliminación del MAES como requisito obligatorio antes de opositar. El objetivo de la Consejería andaluza, liderada por el exrector de la Universidad de Córdoba José Carlos Villamandos, es restringir el máster solo a los que aprueben la oposición, que afrontarían esa formación habilitante en su primer año, como ocurre en otras oposiciones como la de Medicina. Una medida que permitiría "racionalizar el sistema" y evitar que miles de estudiantes completen el máster sin llegar a acceder nunca a la plantilla de Educación. Según un informe del Ministerio de Educación, en el curso 2021-2022 hubo 37.262 egresados en los MAES en toda España, mientras que apenas quedaron 10.000 vacantes por jubilación.

La propuesta andaluza consiste en posponer el máster y limitarlo a quienes aprueben la oposición

El PSOE andaluz se muestra abierto al debate, pero considera que es necesario dar una respuesta desde ya al alumnado que se ve obligado a pagar las tasas de la privada, que pueden alcanzar los 6.000 euros, para poder opositar. Según los datos expuestos en la Comisión de Universidades del Parlamento andaluz, en el año 2020-2021 los centros privados representaron el 54% de las cincuenta mil plazas disponibles, en contraste con el 38% en 2015. Más de un tercio de esa oferta privada es online. "No podemos dejarlo en manos de la privada porque si la oposición depende de que puedas pagar el máster no es una competición justa", expone Antonio Ruiz, portavoz del PSOE andaluz en la Comisión de Universidades.

La iniciativa parlamentaria de los socialistas consiste en crear un nuevo máster virtual en la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA), una entidad pública y especializada en la formación de posgrado. Con mil plazas, apuntan los socialistas, se respondería a esa demanda. Desde la Consejería apuntan a la dificultad que supondría encontrar prácticas a un millar de estudiantes nuevos, muchos de los cuales no acabarán accediendo a la plantilla del profesorado andaluz. Además, recuerdan que recientemente ya se ha ampliado la oferta en 140 plazas y que la ley impide impartir más del 20% de las horas de manera on line, salvo que se trate de una universidad a distancia como la UNED, de competencia estatal, que en estos momentos solo ofrece en Andalucía 61 plazas.