Estepona o cómo pasar de ser foco de corrupción a optar a un prestigioso premio urbanístico

¿Se puede pasar de llenar espacio y tiempo en los medios por corruptelas varias, sospechosas operaciones inmobiliarias y políticos investigados a optar a ser la Ciudad Europea del Año en Urbanismo? ¿Y en poco más de una década? Pues es factible. Lo ha logrado Estepona, municipio al alza de la Costa del Sol, cuya transformación ha llamado la atención de los miembros de The Academy of Urbanism, que la han nombrado finalista a un prestigioso galardón que en años anteriores, por ejemplo, reconoció la metamorfosis de Bilbao o San Sebastián.

La localidad esteponera, que se convirtió en uno de los puntos de expansión del GIL tras su éxito en la vecina Marbella, sufrió el ladrillazo que consumió cualquier tramo virgen de la costa malagueña y fue epicentro de tramas delictivas sustentadas sobre la corrupción urbanística. Astapa, aún a la espera de sentencia, fue la principal. Supuso el fin político del entonces alcalde, el socialista Antonio Barrientos, que fue sustituido por uno de los puntales de la acusación en su contra, su compañero de partido David Valadez.

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Al caso le siguió una tortuosa instrucción que fue revelando prácticas delictivas como la presunta concesión de puestos de trabajo municipales a cambio de votos y una supuesta inacción premeditada para dejar morir un millar de infracciones por edificación en suelo no urbanizable, ampliación de viviendas o movimientos de tierra, según las indagaciones de la Policía Nacional y el relato de la Fiscalía.

La imagen del municipio quedó seriamente dañada, máxime cuando en la investigación surgió el nombre del excomisario José Manuel Villarejo. A esto se unía la situación económica de un ayuntamiento al borde de la bancarrota y con una deuda que hace 12 años superaba los 300 millones. Una situación que, por ejemplo, hizo que los coches de la Policía Local no pudiesen salir a patrullar por falta de dinero para gasolina y que situó el plazo medio de pago a proveedores en 1.492 días.

El municipio espera completar su apertura al mar completando el bulevar peatonal que transita junto a la costa

Pero la situación de Estepona ha dado un giro de 180 grados. En parte, por las medidas de saneamiento y contención del gasto impuestas por el alcalde que ostenta el cargo desde 2011, José María García Urbano, sobre las que pivotó una recuperación económica que ha sido clave en el posterior desarrollo de la localidad. Un cambio basado en "buenas prácticas en materia urbanística", que ha sido reconocido por The Academy of Urbanism, una organización internacional independiente y sin ánimo de lucro formada por líderes, pensadores y profesionales del urbanismo.

¿Pero qué ha hecho bien este municipio para ser candidato a Ciudad Europea del Año en Urbanismo? "Situarse a la vanguardia de las ciudades sostenibles que apuestan por la calidad de vida, el bienestar de los ciudadanos, el medioambiente y los amplios espacios para el peatón", precisaron desde el Consistorio, que días atrás informaba de la última fase de las obras que culminarán en la apertura definitiva de la ciudad al mar a través de "uno de los mejores paseos marítimos del país".

Estepona, Jardín de la Costa del Sol ha sido una de las actuaciones más reconocidas. Ha supuesto, hasta el momento, la remodelación de infraestructuras y restricción del tráfico rodado en 130 calles y plazas públicas. "Esta transformación urbana mediante un proyecto de sostenibilidad medioambiental ha provocado una eclosión de la actividad turística, comercial y de restauración, en una ciudad más humana, más resiliente y llena de vida", remarcaron fuentes municipales, que destacaron la creación del Balcón al Mediterráneo como complemento al bulevar que transita paralelo al litoral. Es un espacio reurbanizado en el que se ha construido "una singular torre-mirador" para uso cultural y de ocio.

En el "corazón" del municipio, donde se ha implantado un modelo de desarrollo sostenible, personalizado con flores y colores en las fachadas, domina el Parque Botánico-Orquidario. Un equipamiento "único en Europa" por su colección de orquídeas y especies tropicales.

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La revitalización del centro urbano está acompañada de dos significativas acciones culturales: la creación del museo al aire libre, con más de 60 murales artísticos en las fachadas de edificios; y una gran biblioteca formada por los poemas incluidos en una ruta con obras de distintos artistas. The Academy of Urbanism ha explicado que Estepona ha logrado ser una de las tres finalistas de este año, además de por su iniciativa de unir toda su costa a través del corredor litoral o la integración en el paisaje urbanístico de propuestas culturales, por la creciente peatonalización de sus calles que persiguen una movilidad urbana más sostenible. Una apuesta en la que ha sido clave "una red de aparcamientos" con el coste de 1 euro al día para el usuario.

Los miembros del jurado han querido premiar a la ciudad por su "valentía" al liderar una "audaz reinvención" y sostienen que la candidatura al galardón, al que también aspiran Amersfoort (Países Bajos) y Exeter (Reino Unido), ya es un reconocimiento a la labor realizada en materia de sostenibilidad. Una delegación de la citada institución se trasladará a Estepona el 2 y 3 de octubre para evaluarla.