El desembarco local de Ciudadanos en el PP andaluz levanta ampollas en Sevilla

La integración de Ciudadanos en el PP andaluz tuvo una primera ronda después de las elecciones andaluzas. Las caras visibles del partido naranja se fueron incorporando, casi por goteo, en el organigrama de la Administración autonómica. La segunda ronda ha sido mucho más lenta y silenciosa y ha llegado poco a poco en el camino hacia las municipales del próximo 28 de mayo. Hay lugares donde los viejos cargos naranjas se integran en el PP casi con alegría de los populares, pero hay otros, como la provincia de Sevilla, donde se han generado algunas suspicacias.

A menos de cuatro meses de que se abran las urnas —y a cinco de que acabe el mandato local— el grupo de asesores del PP en la Diputación sevillana ha sufrido una remodelación que da pistas de lo que ocurre. Dos de los anteriores miembros, la concejal de Olivares Isabel Díaz Cutiño y el edil de Alcalá Pedro González, han sido sustituidos. Por ellos han entrado José Antonio López, que fue confirmado como candidato en la localidad de Mairena del Aljarafe hace unos días, y José Carlos Raigada, que sigue siendo alcalde de Ciudadanos en Almadén de la Plata a fecha de hoy.

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Los naranjas conservan el Ayuntamiento de esta localidad de la Sierra Norte de Sevilla y desde mayo del año pasado cuentan también el Consistorio de Palomares, donde Manuel Benjumea es alcalde tras una moción de censura que fue apoyada por el PP. Pero los pasos lógicos es que ambos acaben en las filas populares, como ha ocurrido profusamente en otras provincias donde los naranjas tuvieron presencia municipal, como Almería o Jaén. La diferencia es la reacción que provocan estas integraciones en la militancia y los cuadros del partido a nivel provincial.

Los dos asesores sustituidos pertenecen al grupo que controló el PP de Sevilla hasta el pasado octubre, encabezado por Virginia Pérez. La exdirigente, que mantuvo su puesto en las listas del Parlamento andaluz y hoy es presidenta de la comisión de RTVA en la Cámara, llegó a un acuerdo con la dirección regional del partido y facilitó la sucesión. El PP de Sevilla está hoy en manos de Ricardo Sánchez, persona de la total confianza de Juanma Moreno, pero la integración de los afines a Pérez no ha sido tan profunda como se esperaba.

El PP ganó unas elecciones en la provincia de Sevilla por primera vez el pasado 19 de junio

El partido llega a la precampaña del 28-M después del logro de haber ganado unas elecciones en la provincia por primera vez desde la vuelta de la democracia. Pero la partida municipal es distinta y eso lo saben en el equipo de Juanma Moreno. Esto ha provocado un alto nivel de intervención de la dirección regional en el diseño de las candidaturas, ya que las estructuras del PP de Sevilla son todavía algo bisoñas.

La prueba es que todavía no se ha designado al candidato o candidata de Dos Hermanas. Este viejo bastión socialista es la única ciudad de más de 100.000 habitantes donde los populares no ha anunciado a su cabeza de lista. Tras la marcha del histórico Francisco Toscano y los 12 puntos que el PP sacó al PSOE en esta localidad el 19-J abren una ventana de oportunidad para mejorar los números, pero hay encuestas que incluso dan a los socialistas mejor resultado que en 2019.

Los casos de éxito

El caso almeriense fue de los primeros en conocerse ya que dos regidores anunciaron poco después de las andaluzas su cambio de filas. En Jaén ha ocurrido algo similar con los alcaldes de Aldeaquemada y Cárcheles, que se presentarán bajo la papeleta popular el 28-M. La primera localidad, con unos 600 habitantes, fue la única, junto a la cercana Porcuna, donde Ciudadanos se impuso en las elecciones autonómicas del pasado junio.

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El regidor porcunense, Miguel Moreno, se mantiene como uno de los principales dirigentes de lo que queda de Cs en Andalucía. En la capital jiennense, además, trabaja ya desde hace meses Mónica Moreno, exportavoz adjunta del grupo naranja en el Parlamento andaluz y una de las figuras al alza del partido en sus últimos momentos con presencia institucional. Lo lógico es que acabe integrada en la lista del candidato del PP, Agustín González, que procede del equipo de Rocío Blanco, la consejera de Empleo.

Esta cordobesa fue la primera integrada en el Gobierno, ya que mantuvo la cartera que tenía en el primer gobierno de Juanma Moreno. La diferencia es que entonces fue nombrada como independiente a propuesta de Ciudadanos y ahora Blanco ya tiene el carnet del PP. Tanto es así que está integrada, con un cargo orgánico, dentro del equipo que dirige Juan Bravo como vicesecretario económico de los populares a nivel nacional.

El goteo seguirá en las próximas semanas. "Hay gente que volverá después de haberse ido", apunta una fuente popular. El objetivo de Juanma Moreno es contar con los mejores candidatos. Y si su perfil es similar al del presidente de la Junta, mejor. "Pero no podemos tener a 785 juanmas", admite otra fuente del partido, escéptica con la fórmula elegida para captar a esos fichajes que no tienen pasado orgánico en el PP. Esta misma fuente añade que el problema puede después del 28-M, en las generales, cuando será necesario que la militancia se active para impulsar a Alberto Núñez Feijóo. Y los nuevos cargos llegados en el aluvión municipal no siempre bregan igual que un afiliado con lustros de carnet