El rechazo del forense a tratar el cáncer de Griñán en prisión lo aleja de la cárcel

La Audiencia de Sevilla todavía tardará varios días en tomar una decisión sobre la entrada en prisión de José Antonio Griñán, pero el informe médico que se ha conocido este lunes tiene muchas posibilidades de alejar al expresidente andaluz de la cárcel. Al menos mientras el cáncer de próstata que padece no remita, según ha indicado la forense del Instituto de Medicina Legal (IML) que ha analizado las pruebas presentadas por la defensa del exdirigente socialista para justificar la suspensión de la pena de seis años de cárcel por su papel en el caso de los ERE fraudulentos.

Se trata de un informe independiente elaborado a petición de la propia Audiencia después de que el abogado de Griñán, José María Calero, informase de la condición del también exministro el pasado 22 de diciembre. Fue ese día cuando el tribunal sevillano activó la ejecución de la pena para el exlíder del PSOE andaluz tras rechazar todas las peticiones de su defensa —y del resto de condenados— para paralizar el ingreso en la cárcel. La sospecha de los médicos de Griñán había comenzado días antes, el 5 de diciembre, y se confirmó a medida que le fueron realizando más pruebas.

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La forense María Ángeles Dichas, en su escrito fechado el 3 de enero, aboga por suspender la entrada en prisión una vez que ha analizado todos los exámenes aportados por el expresidente y tras la entrevista que mantuvo con Griñán ese mismo día. "La no conveniencia" de la entrada en prisión del expresidente responde al tratamiento al que ya se está sometiendo, con bloqueadores hormonales y radioterapia. Según el informe, los efectos secundarios, la constante necesidad de acudir al hospital —de lunes a viernes, durante tres meses— y las consecuencias psicológicas de todo el proceso "parecen poco compatibles con la dinámica carcelaria".

"Se suele hacer caso a estos informes, aunque los tribunales no están obligados", señala a esta redacción el abogado penalista José María de Pablo, que admite que el criterio de cada Audiencia Provincial es distinto. El documento emitido por el IML de Sevilla no es vinculante, como tampoco lo son los posicionamientos de la Fiscalía Anticorrupción y de las partes personadas, que el tribunal hispalense solicitó este lunes. Es el último paso antes de tomar la decisión definitiva, a pesar de que ya el 15 de noviembre rechazó en un primer pronunciamiento suspender las penas de los ocho ex altos cargos socialistas condenados por los ERE.

El informe de la forense asume las tesis del abogado de Griñán tras analizar las pruebas médicas y el tratamiento para el cáncer

"El informe corrobora la versión del condenado", apunta la magistrada Natalia Velilla, que considera "prácticamente seguro" que la Audiencia atienda la recomendación de la forense. Esta jueza ve también probable que la Fiscalía haga lo mismo, tras la emisión de este "informe independiente de un perito judicial". Para Velilla, el tribunal tendría que "justificar mucho" su rechazo a las tesis que incluye el documento de la médica del IML de Sevilla para no atender su posicionamiento.

Hay que tener en cuenta que la forense no practicó nuevas pruebas a Griñán, sino que se limitó a analizar las aportadas por la defensa del expresidente. Los informes analizados proceden del servicio de Urología del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, que apunta al alto riesgo del tumor que sufre el expresidente de la Junta y plantea el tratamiento que la forense del IML defiende que se aborde sin que entre en prisión. Todo ello, a pesar de que el informe admite que la sanidad penitenciaria puede abordar "cualquier demanda médica".

Otros casos homologables

Natalia Velilla apunta también a casos de presos condenados por delitos "más graves", como el terrorismo, que han sido excarcelados para recibir tratamiento de cáncer fuera de la prisión. José María de Pablo, por su parte, alude al caso de otro político que se encontró con dificultades para tratarse fuera de la cárcel. Es el caso de Eduardo Zaplana, aunque hay que tener en cuenta que el exministro popular solicitó la suspensión de su entrada en la cárcel ante una petición del juez de prisión provisional. No tuvo éxito y estuvo durante nueve meses internado por su papel en el caso Erial mientras padecía leucemia. Hace unos días, el exdirigente popular llegó a pedir que no se internase a Griñán en prisión: "La Justicia pierde su sentido cuando olvida las lesiones humanitarias".

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Europa Press

Hay un segundo exdirigente condenado por los ERE a la espera de un informe médico y que también alude al artículo 80.4 del Código Penal para solicitar la suspensión de su pena. Se trata del exviceconsejero Agustín Barberá, que padece una enfermedad avanzada. Los demás fueron entrando en la cárcel entre el 28 de diciembre y el 2 de enero: cuatro exconsejeros (Carmen Martínez Aguayo, Francisco Vallejo, Antonio Fernández y José Antonio Viera) y otros dos ex altos cargos (Jesús María Rodríguez y Miguel Ángel Serrano).

Mientras tanto, el Gobierno andaluz señaló que "respetará y acatará" la decisión que tome la Audiencia sobre la enfermedad de Griñán, en palabras del consejero de Justicia, José Antonio Nieto. "Tendremos una doctrina que marcará a futuro una actuación muy clara, algo que creo que hasta ahora no ha ocurrido", reconoció el dirigente del PP. Por su parte, Vox ha rechazado que se suspenda la entrada en la cárcel del expresidente de la Junta. "Si puede recibir el tratamiento, debe entrar en prisión, como están otros muchos presos", defendió el lunes el portavoz de la formación en Andalucía, Manuel Gavira.