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Agencia del Medicamento y Capitalidad 2016: los fracasos de Málaga antes de Expo'27
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SE ANALIZARÍAN LAS CIUDADES SOSTENIBLES

Agencia del Medicamento y Capitalidad 2016: los fracasos de Málaga antes de Expo'27

"No queremos luego pabellones cerrados y sin uso tras 6 meses de Muestra", avisa el grupo municipal del PSOE. El Gobierno Central es quien tiene que aprobar y hacer suya la iniciativa

Foto: El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, en el 'Smart city expo world congress' de 2017 en Barcelona. (EFE)
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, en el 'Smart city expo world congress' de 2017 en Barcelona. (EFE)

Casi un año antes de que Pedro Sánchez se decidiera a impulsar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU dentro de su Gobierno y de que Pablo Iglesias fuese el vicepresidente del ramo, el alcalde de Málaga, el popular Francisco de la Torre, lucía casi a diario en su chaqueta o traje un pin de los ODS de Naciones Unidas.

Málaga, la sexta ciudad española, la nueva capital económica de Andalucía, está en permanente ebullición. Esta semana ha tenido dos hitos: una gala en el Palacio de los Congresos que abrió el camino de la ciudad como destino turístico inteligente y la presentación de una Exposición Internacional (no confundir con la Universal de Sevilla de 1992) para el año 2027.

Foto: Fotografía del estreno del Centro Pompidou de Málaga en 2015 (EFE).

La ambición es máxima y mucho más la de un alcalde que gobernaría la ciudad, si sigue al frente de Málaga, con 84 años, y 27 años en el poder (33 del PP). Todo esto, ahora mismo, es quimera... pero el primer edil está dispuesto a no fracasar en el objetivo de la expo, pero se encontrará el mismo escollo: el Gobierno.

¿Más competidores?

Y es que la Administración central es quien debe aprobar y tomar como suya la iniciativa. Aún no se sabe si habrá otros competidores y faltan detalles del proyecto (el dosier final no se presenta hasta el año que viene y se decide en 2022). Otro aún: el Gobierno todavía no ha dicho nada. La iniciativa podría costar entre 50 y 100 millones. Estararía situado en un área de 25 hectáreas.

Daniel Pérez, portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Málaga, ha preguntado a Moncloa y nada de nada. "Hay que pedir información de cuánto costaría a la ciudad. Lo que no queremos es que sean seis meses y luego nos encontremos con pabellones cerrados y supongan un fiasco", cuenta Pérez a El Confidencial.

placeholder Cubo del Pompidou Málaga, icono de la Málaga contemporánea. (Agustín Rivera)
Cubo del Pompidou Málaga, icono de la Málaga contemporánea. (Agustín Rivera)

El fracaso de la Agencia Europea del Medicamento, a la que Málaga aspiró sin éxito, y de la Capitalidad Cultura Europea 2016 son claros antecedentes de cómo las candidaturas malagueñas para albergar un gran acontecimiento no son escuchadas con atención "por Madrid". En el caso de la agencia, la entonces vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, apoyó a Barcelona como sede de la agencia, a pesar del gran interés mostraado por Málaga y también Granada.

Y el revés de 2016 como urbe de gran referencia cultural en el Viejo Continente sirvió como acicate para impulsar más infraestructuras en la ciudad. "Lo que verdaderamente ha puesto en el mapa en la ciudad ha sido la renovación urbanística del centro y sobre todo la creación de los museos", sostiene el arquitecto y urbanista Salvador Moreno Peralta, creador del Plan General de Ordenación Urbana de Málaga de 1983, que fue Premio Nacional de Urbanismo.

"La desgracia de las inundaciones de noviembre y diciembre de 1989 supusieron una 'riada' de millones para la gran modernización"

Considera Moreno Peralta que la desgracia de las inundaciones que sufrió Málaga en noviembre y diciembre de 1989 supusieron una 'riada' de millones "sin los que cuales la ciudad no hubiera podido afrontar esa gran modernización que empezó en la década de los noventa". Ahora es una la ciudades españoles con mayor calidad de vida.

El sitio escogido para la exposición, cerca de la Hiperronda (la segunda circunvalación de la ciudad), junto al Centro de Transporte de Mercancías, el acceso norte al Aeropuerto (el tercero peninsular, solo por detrás de Madrid y Barcelona) y la ampliación del campus universitario, lo sitúa en un espacio de oro para convertirse en un lugar de referencia. Un triángulo productivo en el que Málaga se podría convertir en un laboratorio urbano para reflexionar sobre las ciudades sostenibles.

"Hay una legítima ambición para aspirar al máximo y es verdad que Málaga no tiene nada que ver con la de hace 15 años. La feroz competitividad entre ciudades es de alguna forma el móvil que la mueve y justifica su desarrollo. Esto tiene algo que ver con la sociedad del espectáculo", explica Moreno Peralta.

Foto: Mariano Barroso, en su discurso en la gala de los Goya 2020. (EFE)

Pone como ejemplo el arquitecto la celebración en Málaga de la gala de los Goya. "Si no tienes el sitio adecuado [la ciudad carece de auditorio, hay un proyecto, pero no está comprometida la financiación… también pendiente del Gobierno], pues no lo hagas y espérate. Ahora se trata de competir en todo con Madrid y Barcelona gracias al cambiazo enorme en su papel de liderazgo económico".

Las inundaciones de esta semana en la barriada de Campanillas, próxima al Parque Tecnológico de Andalucía, han saltado las alertas por la falta de previsión. "Se ha hecho mucho en el Centro, pero los barrios no han visto el aumento de calidad de vida de los malagueños". En el plano turístico, hace dos décadas ni existía para el visitante.

"No como excusa de propaganda"

Aparte del auditorio, una solución al cauce del río Guadalmedina (la Junta de Andalucía se ha comprometido a que este año habría proyecto) es clave para dar solidez a la propuesta de la Expo 2027. "Creemos que en principio es algo bueno para la ciudad, pero no como mera excusa para la propaganda, como parece pretender el alcalde, sino como oportunidad histórica de Málaga para avanzar en la sostenibilidad urbana", indica Eduardo Zorrilla, portavoz de Adelante Málaga.

Mientras tanto, el alcalde (un optimista irredento) seguirá luciendo su pin de los ODS a la vez que lucha por una Expo que depende de Sánchez y Pablo Iglesias.

Casi un año antes de que Pedro Sánchez se decidiera a impulsar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU dentro de su Gobierno y de que Pablo Iglesias fuese el vicepresidente del ramo, el alcalde de Málaga, el popular Francisco de la Torre, lucía casi a diario en su chaqueta o traje un pin de los ODS de Naciones Unidas.

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