El mapa de todos los centros de examen de conducir: ¿dónde hay más aprobados?

"Quieres aprobar el examen práctico fácilmente?, ¿has suspendido varias veces en Móstoles o Alcalá de Henares? Nosotros te examinamos en Quintanar de la Orden (Toledo). Aprueba a la primera". Era la promesa publicitaria de una autoescuela madrileña hace ahora justo diez años. La noticia la contaba La Tribuna de Toledo en 2014, cuando se conoció que la mitad de los que se inscribían en el centro manchego venían de Madrid y otras provincias "al creerse más fácil aprobar" allí. Pero el periódico local advertía de que se trataba de una falsa meca para sacarse el carnet, según informaba la Dirección General de Tráfico (DGT), que decía que las tasas de suspensos eran similares a las de otros sitios.

Pocos años después, el programa Equipo de Investigación, de La Sexta, acudió a la localidad toledana para comprobar cómo era allí un examen de conducir. Los examinados explicaban que habían ido a Quintanar por recomendación y porque la circulación era menos intensa que en otros centros de examen, donde algunos ya habían intentado sacarse el carnet sin éxito.

La DGT publica datos mensuales del número de aprobados y suspensos en el examen práctico del permiso B en cada centro de exámenes. Entre 2019 y 2023 se realizaron 4,3 millones de pruebas en los más de 150 centros de examen que hay repartidos por la península. Y las cifras confirman que, efectivamente, el de Quintanar de la Orden es el centro con la tasa más alta de aprobados de España: un 63,3% de todas las pruebas realizadas en ese periodo. En el siguiente mapa puede comprobar cuál es el porcentaje en cada lugar en total y la tasa de los que aprueban a la primera en cada pista.

"La forma de trabajar en este tipo de pueblos es diferente a la de las grandes urbes", defiende Pedro Vaquero, director de la autoescuela Váfer-Vial, en Quintanar de la Orden. Según su experiencia, las autoescuelas de zonas como la suya "viven de los aprobados", y no se pueden permitir llevar a examen a alumnos que no estén preparados. "En las ciudades grandes el negocio es casi el suspenso, son enfoques diferentes", opina.

El instructor cuenta que son muy exigentes con la preparación de los alumnos. "Hay veces que vienen alumnos diciéndote que han dado 40 clases en Madrid y que con dos que den con nosotros es suficiente, pero no. Nosotros tenemos que ver cómo funcionan", explica.

En la siguiente tabla puede consultar la tasa de aprobados en los últimos años en cada centro de exámenes, así como el porcentaje de personas que lo consiguió en una sola convocatoria. Para cerca de un 8% de los casos no se ha podido consignar el centro de exámenes. Tampoco hay datos para los examinados en el centro de Vielha e Mijaran, en la provincia de Lleida, por lo que no se incluye en el gráfico.

El centro donde más personas se examinan en toda España es el de Móstoles, en la provincia de Madrid. Durante el periodo analizado, se hicieron allí casi 500.000 pruebas, cerca del 10% de todas las del país. La tasa de aprobados es del 35%, diez puntos por debajo de la media nacional, que se sitúa en el 45,7%.

Con la información que publica la DGT puede calcularse también cuál es la proporción de gente que aprueba a la primera el examen de conducir, y ahí las posiciones en el ranking inicial cambian. En el último lustro, Molina de Aragón, en Guadalajara, es el lugar con una mayor tasa de aprobados a la primera entre el total de presentados: un 38,9%. En Quintanar, sin embargo, la tasa es del 15%.

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En Valencia, en cambio, solo uno de cada 20 alumnos consigue sacarse el práctico a la primera. Y los centros de exámenes de Las Palmas de Gran Canaria y de Ourense capital destacan entre los menos agradecidos para conseguir el permiso de circulación. A la primera solo lo consiguen uno de cada diez y las tasas de aprobados totales están entre el 30% y el 40%. "Supongo que es más por el lado de los examinadores", opina un profesor de autoescuela ourensano, que desconoce los motivos que pueden provocar la desigual situación.

Preguntados por estas diferencias entre centros, desde la DGT responden que "no existe limitación geográfica ni para presentarse a un examen en otra provincia". Además, desde el organismo aseguran que trabajan para "dar un servicio de calidad a los ciudadanos y más concretamente en el servicio de exámenes; en este ámbito, lo fundamental es la formación del alumno, siendo imprescindible para lograr un buen resultado".

La realidad es que solo en diez provincias las tasas de aprobados están por encima del 50%. Se trata de Álava, Lugo, Pontevedra, Toledo, Albacete, Cuenca, Badajoz, Murcia, Castellón y Granada. A la lista habría que añadir la ciudad autónoma de Ceuta. Esta es, de hecho, la zona donde es más probable conseguir el permiso a la primera.

Desde la Confederación Nacional de Autoescuelas de España (CNAE), consideran que es "inevitable" que existan estas diferencias, atendiendo a que la circulación en vías urbanas es más intensa y hay más semáforos o peatones, entre otras situaciones, mientras que en zonas periféricas es más probable que el examen sea en una carretera convencional o en autopista.

Entre las propuestas de esta patronal remitidas a la DGT está la de "incorporar una formación obligatoria y acreditada ante la jefatura de Tráfico, que demuestre que el aspirante a conductor posee los conocimientos, habilidades y concienciación necesarios para circular por vías convencionales". Pero desde su punto de vista, resulta "materialmente imposible" homogeneizar las condiciones del examen práctico en todo el país.

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Además, desde CNAE indican que existen otros factores a tener en cuenta. "Nuestros alumnos exigen que en las clases prácticas circulemos exclusivamente por las mismas o parecidas vías que serán después escenario de examen. Esto no significa que nos resignemos a que nuestros alumnos no hayan transitado nunca, antes de disponer del permiso, por una carretera convencional, o por una autopista o por una ciudad, o que aceptemos como inevitable que ingresen en el complejo tráfico sin haber conducido jamás de noche o con lluvia. De hecho, el propósito es formar a los futuros conductores para que sepan desenvolverse en diferentes circunstancias, no solo en las que han superado con éxito en el momento del examen".

Para CNAE, hace falta "un cambio de enfoque en el proceso formativo", para que los alumnos aprendan a conducir "de verdad". Para ello, instan a Tráfico a "dar un paso hacia delante" e introducir módulos de concienciación para los aspirantes al permiso de conducir, así como cambios profundos en los exámenes que primen "el razonamiento frente a la memorización de las normas".