Es noticia
Diputados de Unidas Podemos, ERC y Bildu denuncian que hubo muertos del lado español de la valla de Melilla
  1. España
Investigación abierta

Diputados de Unidas Podemos, ERC y Bildu denuncian que hubo muertos del lado español de la valla de Melilla

Tres representantes de estos partidos contradicen, al término de un recorrido por la verja y la frontera del Barrio Chino, la versión de Grande-Marlaska sobre la tragedia del 24 de junio

Foto: De izq. a dcha., Enrique Santiago, Jon Iñarritu y María Dantas, tres de los diputados de la Comisión de Interior que se han desplazado a la frontera de Melilla con Nador. (EFE/F. G. Guerrero)
De izq. a dcha., Enrique Santiago, Jon Iñarritu y María Dantas, tres de los diputados de la Comisión de Interior que se han desplazado a la frontera de Melilla con Nador. (EFE/F. G. Guerrero)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, le ha salido el tiro por la culata con la organización, este lunes, de la primera visita de miembros del Congreso de los Diputados para recibir explicaciones y recorrer la zona de la valla donde hace más de cuatro meses murieron 23 subsaharianos, según Rabat —37, según Naciones Unidas— que intentaban entrar en la ciudad. Tres de los diputados de la Comisión de Interior de la Cámara Baja, Enrique Santiago (Podemos), Jon Iñarritu (Bildu) y Maria Dantas (ERC), que se desplazaron a Melilla, han puesto de nuevo en duda la versión de la tragedia que dio Grande-Marlaska ante el pleno y en sede parlamentaria.

Los tres han insistido en que algunos de los inmigrantes muertos el 24 de junio se encontraban en una zona, adyacente al llamado Barrio Chino, no solo bajo soberanía española, sino incluso bajo control operativo de la Guardia Civil. “Todo indica que hubo fallecidos en la zona de control español”, señaló Santiago. Desde Cuenca, donde estaba de visita, el ministro les respondió que “no hubo ningún muerto en territorio español”. Recalcó que el uso de la fuerza para repeler el asalto fue “proporcional, legal y necesario”.

Foto: Presencia policial en la valla de Melilla. (EFE/Paqui Sánchez)

Grande-Marlaska accedió finalmente a organizar esta visita por dos razones. Quería, por un lado, intentar desmentir el documental de investigación que emitió el 1 de noviembre la BBC (televisión pública británica) que señaló la presencia de muertos del lado español. Trató así, además, de desactivar que el Congreso apruebe la creación de una comisión de investigación sobre los sucesos de Melilla.

“Es el momento de que Interior deje de escurrir el bulto y aclare qué ocurrió en cada uno de los lugares, ya que es una obviedad que ocurrieron en territorio español hechos importantísimos, no tangenciales, como decía el ministro”, declaró Iñarritu al término de la visita a Melilla. Pidió a continuación que se ponga en pie esa comisión de investigación, un anhelo compartido por Podemos y ERC.

El Partido Popular mantiene, en cambio, una actitud ambigua sobre la oportunidad de esta comisión y sin su apoyo esta no saldrá adelante. “No sabemos por qué Marlaska no ha dicho la verdad, que sea transparente, venga al Congreso y traiga las imágenes, y no utilice a la Guardia Civil”, declaró Ana Vázquez, la diputada del PP que viajó a Melilla. Vox, por su parte, se negó a participar en esta visita tachándola de “farsa”.

Foto: Varias inmigrantes, ya en territorio español. (EFE/Paqui Sánchez)

A los diputados les quedan aún muchas imágenes por ver, pero las que les enseñaron el lunes en la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla les bastaron para, siempre según Iñarritu, comprobar que “no hubo ningún tipo de auxilio ni de atención por parte de las autoridades” españolas. “Hemos tenido conocimiento de la coordinación que hubo con las autoridades marroquíes para que los gendarmes accedieran a la infraestructura de la valla y también a territorio español”, añadió. “Rechazaron a casi 500 personas”, precisó. Esta cifra coincide prácticamente con la que proporcionó el defensor del pueblo, Ángel Gabilondo, sobre el número de expulsiones en caliente.

Además de esas expulsiones, afloraron también otras imágenes, grabadas por el fotoperiodista Javier Bernardo, en las que se ve a los antidisturbios marroquíes, algunos de ellos gendarmes, no solo llevarse de vuelta a Marruecos a inmigrantes irregulares, sino también golpearles, junto a la Guardia Civil, del lado español de la valla. Grande-Marlaska siempre negó que hubieran reprimido el asalto desde territorio nacional.

Foto: Interior del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla. (Foto: J.G)

El jefe accidental de la Comandancia, el coronel Arturo Ortega Navas, informó a la delegación parlamentaria que, para intentar repeler el asalto, sus agentes lanzaron ese día 86 botes lacrimógenos, 28 botes de gas y 65 pelotas de goma, y utilizaron 41 aerosoles lacrimógenos grandes y 12 de otro tipo. Dispararon, además, 270 salvas cuyo ruido puede aturdir a los que no llevan los oídos taponados.

En Melilla, donde solo estuvieron unas horas, los diputados solo pudieron ver en la Comandancia de la Guardia Civil algunas imágenes previamente seleccionadas. Grande-Marlaska les ha prometido, sin embargo, que en Madrid podrán visionar todas las grabaciones, las de las cámaras fijas de la valla, las de un dron y las del helicóptero de la Guardia Civil que sobrevolaron la zona.

Foto: El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska. (EFE/ Fernando Villar)

Las que nunca podrán ver son las del paso fronterizo de Barrio Chino, entre España y Marruecos, por donde transitaban las porteadoras con sus mercancías de contrabando, porque no existen, según les aseguraron a los diputados. Las cámaras estaban apagadas desde su cierre, en marzo de 2013, a consecuencia de la pandemia. Resulta curioso que, al producirse un asalto por esa zona, no se activaran las cámaras, una operación que se hace en unos segundos.

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, intentó, por su parte, echar un capote a su colega de Interior durante una entrevista, el lunes por la mañana, en Antena 3. Habló largo y tendido de la “complejidad” de la frontera sur de España. Afirmó incluso que “Ceuta y Melilla son las fronteras más desiguales del planeta y, por lo tanto, las más complejas de gestionar”. Por renta per cápita o por otros criterios hay en el mundo otras fronteras mucho más desiguales, como las de Arabia Saudí y Yemen o la de Corea del Norte con su vecina del sur. Incluso la frontera de Argelia con Níger es más desigual que la que España tiene con Marruecos.

Al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, le ha salido el tiro por la culata con la organización, este lunes, de la primera visita de miembros del Congreso de los Diputados para recibir explicaciones y recorrer la zona de la valla donde hace más de cuatro meses murieron 23 subsaharianos, según Rabat —37, según Naciones Unidas— que intentaban entrar en la ciudad. Tres de los diputados de la Comisión de Interior de la Cámara Baja, Enrique Santiago (Podemos), Jon Iñarritu (Bildu) y Maria Dantas (ERC), que se desplazaron a Melilla, han puesto de nuevo en duda la versión de la tragedia que dio Grande-Marlaska ante el pleno y en sede parlamentaria.

Melilla Fernando Grande-Marlaska
El redactor recomienda