El independentismo revive el juicio del 'procés' a las puertas del aniversario del 1-O

A solo unos días del quinto aniversario del 1 de octubre, el independentismo ha desfilado de nuevo por el Tribunal Supremo en una rememoración del juicio del 'procés'. Este miércoles, el TS ha celebrado una vista oral por desobediencia contra la portavoz de la CUP en el Parlament, Eulàlia Reguant. La diputada autonómica se negó a contestar en su día a las preguntas de la acusación popular de Vox. Se enfrenta a una petición de la Fiscalía de cuatro meses de prisión e inhabilitación para el derecho de sufragio pasivo, así como una condena en costas.

La representante de la CUP ha acudido al alto tribunal acompañada de una delegación de ERC formada por la portavoz adjunta de la formación en el Parlament, Meritxell Serret; las portavoces del Senado, Mirella Cortès y Sara Bailac, y las diputadas del Congreso Pilar Vallugera, Marta Rosique y Maria Dantas. Desde Unidas Podemos se le ha mostrado apoyo público entre acusaciones al partido de Santiago Abascal por "instrumentalizar la justicia".

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EFE

Los hechos se remontan a febrero de 2019 cuando, como testigo en el juicio, no quiso responder a los letrados de Vox pese a su deber de contestar a todas las preguntas que se le formulen. Durante su declaración de este miércoles como acusada, ha precisado que habría contestado en el caso de que el presidente del tribunal, Manuel Marchena, le hubiera trasladado las preguntas de los letrados que ejercían en el procedimiento.

En su escrito de defensa alegó que actuó de este modo como un símbolo de su "objeción de conciencia" por el papel "abusivo" del partido. Reguant ya fue sancionada mediante un acuerdo de corrección disciplinaria, iniciado y terminado por la Sala de lo Penal del Supremo en 2019, y que dicho acuerdo se saldó con la imposición de una multa de 2.500 euros. La diputada ha sido juzgada por el Supremo debido a su condición de aforada.

En solo unas horas, otro miembro de la CUP será juzgado por hechos similares, en este caso en los Juzgados de Madrid. Como informa Europa Press, el exdiputado de la CUP Antonio Baños está también acusado de un delito de desobediencia, también por negarse a contestar a las preguntas de la acusación popular de Vox durante el juicio del 1-O, donde compareció como testigo en febrero de 2019.

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B. Parera

Baños ha defendido públicamente que su decisión de no contestar a las preguntas de los de Santiago Abascal (Vox) en el Supremo fue un gesto "para marcar un límite y demostrar que el fascismo no puede entrar en ninguna institución, en la judicial tampoco". A diferencia de Reguant, Baños se enfrenta a una petición de seis meses de prisión. Fuentes fiscales han asegurado que lo más probable es que el fiscal rebaje la pena y la iguale a la de diputada de la CUP, que está acusada por los mismos hechos.