El estudio de los huesos enterrados en la casa de la bestia de Melilla no es concluyente

La mayoría de los restos óseos encontrados en el garaje de la vivienda de Melilla, donde una mujer fue salvajemente agredida por su pareja y donde se perdió la pista de la madre de la víctima, tienen características propias de fauna. Es la principal conclusión del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses tras el análisis de 40 muestras de huesos encontradas en el número 26 de la calle Larache, en el humilde barrio de Reina Regente.

Sin embargo, los facultativos del servicio de criminalística tienen especialmente dudas sobre dos de las muestras, la n.º 1 y la n.º 24, correspondientes a fragmentos de costilla. "No conservan suficientes rasgos macroscópicos como para poder confirmar la determinación de especie, por lo que se recomienda el estudio genético de estos fragmentos", concluyen.

La Policía Nacional esperaba encontrar el cadáver, o al menos algún resto, de una persona desaparecida hace 30 años. El caso arrancó tras una denuncia de violencia de género en la que la víctima dijo que su agresor la amenazó con estas palabras: "Te voy a matar como maté a tu madre".

A raíz de este suceso, el 27 de marzo los agentes realizaron una excavación en la vivienda, concretamente en el garaje privado de unos 20 metros cuadrados. Bajo las losas del suelo, en una capa de arena compactada, encontraron el hallazgo: una cantidad importante de fragmentos óseos. Fueron identificadas partes de costillas, cráneo, falange, fémur, maxilar, escápula o vértebras, entre otras.

TE PUEDE INTERESAR

La Policía busca huesos humanos bajo su casa: "Me quiso enterrar como a mi madre"

Javier García Angosto. Melilla

Los restos, procedentes del Instituto de Medicina Legal de Melilla, fueron remitidos a Madrid, al Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, para que estudiara la morfología de los huesos y determinara si eran humanos o de animales. Durante cerca de un mes, estuvieron trabajando con las muestras. El informe está firmado por dos facultativos del Servicio de Criminalística, un jefe de Servicio y la directora del departamento.

Para su análisis, los expertos comenzaron con un cepillado suave para retirar la tierra incrustada en algunos elementos y limpiaron con agua uno de ellos. El estudio descriptivo de las muestras revela que la mayoría de ellas presentan características morfológicas propias de fauna. Sin embargo, aproximadamente un 30% no conservan suficientes características que permitan determinar si son humanas o no. De hecho, no se descarta que dos de las muestras puedan ser humanas.

El fragmento n.º 1, una parte de una costilla, es una de ellas: "No puede descartarse un posible origen humano". La muestra número 24, dos fragmentos de costilla "de poca entidad y tres pequeños fragmentos óseos", tampoco puede descartarse que sea de origen humano, según las conclusiones del informe.

¿De qué época son?

El estudio contiene una estimación de la data de las muestras. Conocer la época de la muerte exclusivamente por el análisis de los restos es una de las tareas más complicadas, según admiten los expertos del informe. Explican que, al incrementarse el tiempo desde la muerte, es mayor el número de variables que pueden afectar a los huesos. No obstante, no descarta que los restos sean anteriores a 1996-1997, momento en que supuestamente desapareció la persona que están buscando.

El estudio también revela las lesiones que han encontrado en los huesos. Advierten, al igual que en la data, que es una tarea compleja y que afectan multitud de factores. A pesar de ello, dicen que hay algunos con características compatibles con "la acción de un objeto cortante, posiblemente aserrado". También hay muestras compatibles con el "uso de un objeto cortante con cierto componente contuso de borde no aserrado".

TE PUEDE INTERESAR

Descubren los restos del 'último fugitivo' de la erupción del Vesubio del año 79 d. C.

El Confidencial

En cualquier caso, los investigadores recomiendan la posibilidad de llevar a cabo el estudio genético de una selección de los fragmentos que carecen de rasgos propios o compatibles con fauna. Por ello, han remitido las pruebas al Departamento de Sevilla para estudios genéticos.

La investigación judicial sigue adelante en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción n.º 4 de Melilla. El principal sospechoso estuvo a punto de matar a su exmujer, a quien supuestamente golpeó con un bate de béisbol y casi ahoga con una cuerda al cuello. Está en prisión preventiva desde el día de la agresión por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa.