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Rubiales almacenó conversaciones privadas de WhatsApp con Pedro Sánchez desde 2018
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decenas de mensajes en momentos clave

Rubiales almacenó conversaciones privadas de WhatsApp con Pedro Sánchez desde 2018

El presidente de la Federación guardó en su teléfono móvil decenas de mensajes enviados por el jefe del Ejecutivo en momentos decisivos para el mundo del fútbol pero también de la vida política nacional

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Luis Rubiales almacenó conversaciones privadas de WhatsApp con Pedro Sánchez. Las comunicaciones se remontan al menos a junio de 2018, tras la moción de censura contra Mariano Rajoy que provocó la llegada del dirigente socialista a Moncloa, y se prolongan hasta la actualidad. Los mensajes giran en su mayoría sobre episodios clave para el mundo del fútbol, pero también abordan asuntos de política general, según ha podido confirmar El Confidencial.

La copia de las comunicaciones del presidente del Gobierno se suma a las grabaciones que el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) hizo también a ministros y otros altos cargos del Ejecutivo, entre ellos, el ministro de Cultura y Deporte entre junio de 2018 y enero de 2020, José Guirao, y la secretaria de Estado para el Deporte y presidenta del Consejo Superior de Deportes (CSD) entre enero de 2020 y marzo de 2021, Irene Lozano, como ha desvelado este diario.

Foto: Comparecencia de luis rubiales

Los archivos de los llamados Supercopa Files revelan que algunos de los mensajes que Sánchez mandó a Rubiales fueron luego reenviados por este último a terceros dispositivos. Los intercambios evidencian que, tras su llegada a Moncloa, el dirigente socialista mantuvo una relación cordial con Rubiales, pero, con el paso del tiempo, empezó a poner distancia entre ambos.

Se desconoce el motivo por el que el máximo responsable del fútbol en España decidió guardar estas comunicaciones y otros archivos supuestamente comprometedores para el Ejecutivo. En las grabaciones que realizó clandestinamente a Guirao, se ve a Rubiales moviendo su móvil para asegurarse de que el nombre del entonces ministro quedara registrado con claridad, por ejemplo. Un método similar usó para captar la voz de Lozano en varias ocasiones.

Foto: El presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales (c). (EFE/Rodrigo Jiménez)

Tanto el exministro de Cultura como la expresidenta del CSD han lamentado en las últimas horas que Rubiales traicionara su confianza grabando conversaciones privadas sin su conocimiento. El malestar se extiende al conjunto del Gobierno de Sánchez. La RFEF emitió un comunicado el miércoles para desvincular a Rubiales de estos audios y vídeos, pero las revelaciones de El Confidencial han demostrado que no solo era consciente de que se estaban realizando grabaciones, sino que él mismo se aseguró de que las capturas tuvieran una calidad impecable.

La publicación de estos archivos ha llevado al ministro de Cultura, Miquel Iceta, responsable de Deportes del Gobierno, a mover ficha. El actual presidente del CSD, José Manuel Franco, anunció este jueves por la tarde que su organismo está estudiando dos denuncias contra Rubiales. Una de esas denuncias ha sido presentada por el presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), el principal sindicato de jugadores, David Aganzo, que fue investigado por detectives contratados por la Federación a través de una empresa pantalla.

Foto: José Manuel Franco (i) y Luis Rubiales el pasado marzo. (EFE/J.J. Guillén)

Según Franco, en el caso de que el CSD aprecie indicios de irregularidades en la gestión de Rubiales, las denuncias serán trasladadas automáticamente al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD), que deberá decidir si los hechos le incapacitan para continuar ejerciendo como presidente de la RFEF, un órgano privado, pero con utilidad pública, que, además, ejerce competencias delegadas por la Administración del Estado.

En paralelo a ese frente, Rubiales tiene otra vía de agua en la jurisdicción penal. La Fiscalía Anticorrupción ha decidido abrir diligencias de investigación sobre su gestión al frente de la RFEF tras admitir una denuncia que le imputa los posibles delitos de corrupción entre particulares, corrupción en los negocios, administración desleal, prevaricación administrativa y cohecho, sin descartar la posibilidad de que esta lista termine siendo mucho más larga.

Luis Rubiales almacenó conversaciones privadas de WhatsApp con Pedro Sánchez. Las comunicaciones se remontan al menos a junio de 2018, tras la moción de censura contra Mariano Rajoy que provocó la llegada del dirigente socialista a Moncloa, y se prolongan hasta la actualidad. Los mensajes giran en su mayoría sobre episodios clave para el mundo del fútbol, pero también abordan asuntos de política general, según ha podido confirmar El Confidencial.

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