Una mujer se lanza desde el tercer piso de su casa en Huelva para escapar de un incendio

Este domingo 28, cuatro personas fueron rescatadas en la localidad onubense de Nerva, al quedar encerradas dentro de una vivienda en llamas perteneciente a la segunda planta de un bloque del barrio de La Garza. A estos ciudadanos se suma una quinta vecina que se vio obligada a saltar desde su ventana en el tercer piso al ser incapaz de abandonar el edificio de otro modo.

En palabras de Emergencias 112 a Diario de Huelva, varios testigos alertaron al Servicio por la existencia de un incendio cuyo desencadentante se desconoce hasta el momento. Un ciudadano grabó el fuego en un vídeo que se ha hecho eco en redes sociales, y que muestra cómo la vecina de la tercera planta abandona su vivienda mediante un salto sin que las llamas cesaran su actividad.

Hasta el lugar del suceso llegaron efectivos de la Policía Local, al igual que de Emergencias Sanitarias y del Consorcio de Bomberos. Estos últimos, que recibieron el aviso a las 19:30 horas, fueron capaces de completar la evacuación de los primeros cuatro vecinos sin que el estado de estos se viese alterado.

Un aterrizaje arriesgado

Sin embargo, la vecina del tercer piso en el que se produjo el incendio, se vio obligada a lanzarse desde la ventana. Aunque la caída fue amortiguada con una manta que extendieron los vecinos, la mujer se fracturó su pie, por lo que fue trasladada al hospital Comarcal de Riotinto para ser asistida por personal sanitario

Por su parte, el Consorcio de Bomberos ha informado que la vivienda de la segunda planta ha sufrido desperfectos por el incendio, al igual que el resto del edifico. El Sindicato Andaluz de Bomberos Huelva y Provincia ha aprovechado la ocasión para denunciar en su perfil de la red social Twitter la importancia de garantizar un número mínimo de operarios, puesto que, actualmente "es imposible trabajar con seguridad, y mucho menos llegar a ser eficientes".

Finalmente, los agentes de la Policía Local que acudieron al lugar, procedieron a precintar el bloque, por lo que los vecinos afectados quedaron repartidos entre las viviendas de sus familiares y un albergue, donde pasaron la noche.