Sánchez no quiere acoger de momento el Lifeline: pide una "respuesta común" de la UE
Logra el apoyo de Merkel para que la Unión ayude a España ante la nueva oleada migratoria. La canciller destaca que otros países recibieron auxilio en otros momentos de la crisis de refugiados
El Gobierno español no seguirá con el Lifeline la misma estrategia que con el Aquarius. De momento no ofrecerá llevar el buque de la ONG alemana hasta un puerto seguro español porque cree que la Unión Europea ha de arbitrar una "respuesta común". Compartida. Esa es su lucha desde que planteó una salida nada más llegar al Ejecutivo al barco en el que viajaban 630 migrantes y que tanto Italia como Malta rechazaron. Ahora el problema se repite, pero la respuesta del Ejecutivo socialista es más cauta.
Debemos responder de forma eficaz al desafío migratorio con una actuación conjunta y solidaria. He trasladado a Angela Merkel la disposición del gobierno español a trabajar con el resto de socios europeos para ser parte de una solución constructiva e integradora. pic.twitter.com/0nS12gDmFd
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) 26 de junio de 2018
Pedro Sánchez continuó este martes su debut internacional. El sábado se reunió con Emmanuel Macron en El Elíseo, el domingo asistió a la 'minicumbre' informal monográfica sobre migración y asilo y hoy tenía cita en Berlín con la canciller, Angela Merkel. El objetivo del presidente es construir un eje estable de colaboración entre Madrid, París y Berlín. Tras el desayuno, Merkel explicitó además el aval de su país para que España reciba más "apoyo" si se intensifica la llegada de inmigrantes a las costas españolas.
1/3 Maltese PM @josephmuscat_jm leading diplomatic efforts for a solution to the #Lifeline issue. Problems caused by the actions of captain who ignored instructions given in accordance to international rules by Italian authorities.
— Kurt Farrugia (@KurtFarrugia) 26 de junio de 2018
2/3 Effort has two facets: First is to prevent a possible humanitarian crisis by means of sharing of responsibility by a number of willing MS. Second to carry out investigations and explore actions that can be taken in regards to the actions of the #Lifeline
— Kurt Farrugia (@KurtFarrugia) 26 de junio de 2018
3/3 @MaltaGov thanks @eucopresident and the @JunckerEU for their assistance in this effort, which is ongoing
— Kurt Farrugia (@KurtFarrugia) 26 de junio de 2018
En la rueda de prensa conjunta, Sánchez fue preguntado si su Gobierno ofrecería "puerto seguro" al buque de la ONG alemana Lifeline, que espera desde hace cinco días en el Mediterráneo con unas 230 personas a bordo. Italia se niega de nuevo a que atraque en su suelo, igual que Malta, cuyo primer ministro, Joseph Muscat, trabaja para "tratar de encontrar una solución".
España estará en la respuesta común que demos, en este caso al Lifeline, pero tiene que ser común, europea, de distintos países
"Lo importante es trasladar que se tiene que dar una respuesta europea —contestó el presidente desde Berlín—. España es un país solidario, lo ha demostrado con el buque Aquarius, lo demuestra diariamente en las costas del sur de España con muchísimos seres humanos que llegan y son atendidos por la Guardia Civil, los Servicios Marítimos, la Cruz Roja... Lo importante es dar una respuesta común a un desafío común. En ese sentido, España estará en la respuesta común que demos, en este caso al buque Lifeline, pero tiene que ser común, tiene que ser europea, tiene que ser de distintos países". El Gobierno, por tanto, no quiere asumir en solitario el coste de la solidaridad. La batalla del Ejecutivo es que Europa se remangue y la solución sea compartida.
Responsabilidad repartida
La canciller, por su parte, adelantó que se implicará a nivel europeo para que España reciba más apoyo. Y es que nuestro país ya recibe más inmigrantes de Marruecos que Italia de Libia. El aumento experimentado este año explica que los ministros de Exteriores y de Interior viajen conjuntamente este jueves a Rabat para ratificar la necesidad de cooperación con el reino alauí en plena crisis migratoria. Merkel sostuvo que otros países de la UE han recibido un apoyo extra en situaciones de mayor presión. Así fue con Grecia, en el momento más álgido de la crisis de los refugiados.
"Creemos que España podría recibir más apoyo de la Comisión Europea, eso lo apoyaríamos con seguridad", asegura Merkel ante Sánchez
"Creemos que España podría recibir más apoyo de la Comisión Europea, eso lo apoyaríamos con seguridad", indicó la mandataria germana, quien añadió que "si la situación en España se agrava", ella se involucraría para que el país "reciba más apoyo". "Vemos que la llegada inmigrantes a España se ha incrementado", indicó la dirigente, constatando el número creciente de embarcaciones que llegan en las últimas semanas a las cosas españolas.
El Gobierno español defiende la necesidad de la cooperación con los países de origen y de tránsito como una vía de control de los flujos migratorios. Merkel, en ese sentido, afirmó que podía estipularse que cada jefe de Gobierno dialogue con los Estados de origen —básicamente africanos—, pero "no individualmente", sino "en nombre del resto de colegas". "La responsabilidad se puede repartir entre líderes europeos", de tal forma que cada socio miembro de la UE hable con "uno o dos" países de origen, señaló, informa EFE. El planteamiento fue apoyado por el presidente español.
"Luces largas"
Sánchez fue preguntado por su reunión de ayer lunes con el lendakari, tras la cual ambas partes ofrecieron versiones no coincidentes. El presidente subrayó que tras la disolución de ETA, ocurrida por la "derrota" de la banda por los demócratas, la "política penitenciaria tiene que ser revisada", y por tanto hace falta "aproximarse de otra manera a una realidad que ya es completamente distinta". Así que lo que trasladó a Iñigo Urkullu es que su Gabinete está dispuesto a revisar la política penitenciaria. "En esto no me escondo, soy claro. Y por una sencilla razón, porque ETA ha sido derrotada. Lo que le pido al conjunto de fuerzas políticas es que este no sea un elemento de división [...]. Pongamos las luces largas, sepamos que tengamos que normalizar más aún la convivencia en el País Vasco, y desde esa perspectiva es la que va a trabajar el Gobierno".
Sánchez insiste en que trasladó a Urkullu su disposición a revisar la política penitenciaria, pero asegura que no habrá un grupo bilateral sobre eso
Ahora bien, el Gobierno se mantiene en su lectura de la cita en La Moncloa. Así, Sánchez recordó que pactó con Iñigo Urkullu la creación de solo dos grupos de trabajo. Uno para reducir los índices de conflictividad entre gobiernos —estudiando el desistimiento de algunos recursos presentados ante el Tribunal Constitucional por el anterior Ejecutivo contra normas vasca—, y en ese sentido subrayó cómo en Alemania los niveles de choque entre el Gobierno federal y los Länder no son "ni de lejos" los que existen en España. El segundo se centra en el análisis de la treintena de transferencias pendientes a Euskadi recogidas en el Estatuto de Gernika de 1979, y el espíritu "constructivo" del jefe del Ejecutivo autonómico puede facilitar, "y mucho" los traspasos previstos. Pero Urkullu, durante su rueda de prensa en Madrid, sí habló de un tercer grupo de trabajo específico sobre reclusos de ETA, para estudiar su acercamiento progresivo.
Apoyo a la 'Declaración de Meseberg'
Sánchez sí quiso salir al paso de "algunas cosas" que leyó este martes en los medios, porque consideran que no se ajustan a la conversación que mantuvo con el dirigente del PNV, como lo relativo a la Seguridad Social. El presidente vino a decir que en ningún momento se ha planteado la ruptura de la caja única, y subrayó que su Ejecutivo tiene como misión "fundamental" garantizar la sostenibilidad del sistema y la viabilidad de las pensiones. "Es el objetivo que trasladé al lendakari y entendió y comprendió la situación de nuestra Seguridad Social y los retos que tenemos por delante para garantizar su sostenibilidad".
Los dos mandatarios constatan las "excelentes" relaciones de los dos países y se comprometen a celebrar una cumbre bilateral en Madrid en 2019
El jefe del Ejecutivo español volvió a mostrar su apoyo a la 'Declaración de Meseberg' que pactaron la semana pasada Macron y Merkel, para reforzar la eurozona y potenciar la unión económica y monetaria para hacerla más resistente frente a futuras crisis. En la cita de este martes no se entró tanto en cuestiones bilaterales, más allá de que ambos constataran las "excelentes" relaciones entre los dos países. Sánchez fue recibido con honores militares y pasó revista a las tropas junto a la mandataria germana.
Eso sí, los dos se comprometieron a recuperar la costumbre de las cumbres España-Alemania. La próxima se celebrará probablemente en Madrid, en 2019. La última tuvo lugar en Santiago, cuando Merkel acudió a un encuentro de dos días con Mariano Rajoy. Sánchez no quiso meterse en la política doméstica de la canciller, que se enfrenta a una crisis de gobierno por la amenaza de su ministro del Interior, Horst Seehofer, de sellar las fronteras si no hay un acuerdo migratorio.
Sánchez avisa a Torra: el 1-O es "una página que hay que pasar"
El Gobierno de Pedro Sánchez sigue ofreciendo mano tendida a la Generalitat y en general a los ejecutivos autonómicos, en virtud de su propósito de "normalizar" las relaciones institucionales. Pero también deja claro que no tolerará una ruptura de la legalidad. Ese era, en síntesis, su mensaje dirigido a Quim Torra desde Berlín.
El 'president' de la Generalitat defendió este lunes "otro 1 de octubre" para hacer "efectiva" la república catalana. Sánchez le dijo que él está dispuesto a dialogar, aunque siempre dentro de la ley. Nunca fuera de ella. "En los márgenes de la Constitución y de nuestro estado social y democrático de derecho, podemos hablar de muchas cosas, pero desde luego lo que representó el [referéndum unilateral del] 1 de octubre es una página que hay que pasar", subrayó ante Angela Merkel.
.@sanchezcastejon destaca la positiva y constructiva relación que existe entre #España🇪🇦 y #Alemania🇩🇪 y apunta a una respuesta común del conjunto de la #UE como la única respuesta eficaz a la inmigración https://t.co/PM8lBASa4G pic.twitter.com/4iuzgIzgb1
Lo que ha de hacer el Govern, indicó, es mantener un tono constructivo, porque se pueden encontrar muchos "puntos de unión". El Ejecutivo central, garantizó, ya está trabajando para que la reunión en La Moncloa con Torra del 9 de julio sea un "éxito".
A Merkel se le preguntó si le incomoda a su Gobierno la presencia de Carles Puigdemont en territorio alemán. Ella respondió que no. "En lo que respecta a Puigdemont tenemos muy buenos contactos entre las autoridades correspondientes y todo se está desarrollando según el claro procedimiento de un Estado de derecho. Y en tanto que ambos somos Estados de derecho, no tenemos ningún problema con ello", mantuvo.
El Gobierno español no seguirá con el Lifeline la misma estrategia que con el Aquarius. De momento no ofrecerá llevar el buque de la ONG alemana hasta un puerto seguro español porque cree que la Unión Europea ha de arbitrar una "respuesta común". Compartida. Esa es su lucha desde que planteó una salida nada más llegar al Ejecutivo al barco en el que viajaban 630 migrantes y que tanto Italia como Malta rechazaron. Ahora el problema se repite, pero la respuesta del Ejecutivo socialista es más cauta.