¿Quién mece la renta de CR7? Imputado su banquero, el séptimo asesor investigado

¿Quién hizo la declaración de la renta de Cristiano Ronaldo? "Fuenteovejuna, señor", contestan al unísono una pléyade de asesores fiscales. Ya son siete de ellos, portugueses y españoles, gente del fútbol y de las finanzas, los que han pasado o pasarán por el juzgado de instrucción de Pozuelo de Alarcón que investiga al futbolista por delito fiscal. Mientras en una mesa la defensa de Ronaldo negocia con Hacienda, la instrucción judicial se alarga porque siguen apareciendo nuevas piezas para intentar encajar el rompecabezas que, llegado el caso, no lleve solo al futbolista al banquillo sino también a quien montó la estructura 'offshore'.

La sentencia del Supremo que condenó a Messi por delito fiscal introdujo una novedad. El futbolista fue condenado pero su asesor fiscal ni se sentó en el banquillo, cuando era obvio que había contado con ayuda para abrir esas sociedades opacas: "La perplejidad de la parte recurrente puede compartirse por este tribunal. Y es que no se acierta a encontrar coherencia entre esa estrategia procesal, que garantiza impunidad a tales profesionales, y funda la acusación al recurrente en el empleo de las fórmulas que estos crearon y suministraron al acusado, incluso hasta gestionar su puesta en práctica". Los asesores fiscales están siendo perseguidos en casos de delito fiscal como cooperadores necesarios, un grado más que cómplice, y ya hay condenas firmes de cárcel.

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La sentencia de Messi cayó en plena ofensiva de Hacienda, la Fiscalía y la Abogacía del Estado contra futbolistas en Madrid (Cristiano, pero también Falcao, Carvalho, Coentrao, Marcelo, Modric y Di María) y las acusaciones se pusieron manos a la obra. En la causa contra Falcao tuvo que declarar el superagente Jorge Mendes entre un alud de cámaras de media Europa. Después de aquello, el delantero colombiano negoció una condena de conformidad: asumió el delito y pactó una condena de menos de dos años de cárcel que no conlleva ingreso en prisión. Con eso, Mendes quedó limpio. El resto de futbolistas fueron buscando conformidades similares por lo que nadie se molestó en los agentes: la Agencia Tributaria lo que quiere es cobrar y si es por la vía rápida, mejor.

En la causa contra Falcao tuvo que declarar el superagente Jorge Mendes entre un alud de cámaras de televisión de media Europa

Pero llegó Cristiano —un caso distinto al resto porque estaba acogido a la Ley Beckham y por las cantidades astronómicas de sus patrocinios— y todo cambió. El delantero portugués decidió en un primer momento defender su inocencia y aseguraba estar dispuesto a ir a juicio. Así que la jueza de Pozuelo, Mónica Gómez Ferrer, citó como investigados —la antigua figura del imputado— a Jorge Mendes, Carlos Osorio de Castro y Luis Correia. Es la terna de portugueses que ha acompañado a Cristiano desde el principio de su carrera. Mendes es el corazón de la agencia de representantes Gestifute; Correia es su mano derecha, sobrino y responsable de la empresa irlandesa Polaris, donde acaban los derechos de imagen de los futbolistas de Mendes, y Osorio es un abogado mercantilista, presuntamente el verdadero experto en temas fiscales.

En la declaración de Cristiano —en la que Florentino Pérez coló a su número dos en ACS como oyente— este afirmó que se fiaba de sus asesores, que para eso eran los mejores. Mendez declaró después por videoconferencia (esta vez se salvó del tumulto de las cámaras) que él es un agente de futbolistas, que negocia traspasos pero no sabe de fiscalidad. Como Correia y Osorio están en Portugal, alguien debió presentar las declaraciones de la renta de Cristiano en las que, según la fiscalía de delitos económicos de Madrid, defraudó 14,7 millones de euros.

Ampliar el círculo a los asesores

Así que después se amplió el círculo a los asesores españoles. Ahí se ha visto que Mendes tenía compartimentada la tarea entre varios despachos en España. Por un lado ha sido llamado un socio de Garrigues, Diego Rodríguez Titos, que confeccionaba las declaraciones de la renta. Otro de los asesores involucrados es Pablo Tejerizo, de King & Wood Mallesons, que realizó las valoraciones de los contratos.

Son siete los asesores que ya han pasado ante la jueza. Esto, por un lado, alarga la instrucción y también aumenta la presión sobre Cristiano

También declaró Julio Senn, de Senn Ferrero (un 'hackeo' a su despacho comenzó el 'footballeaks' español aunque posteriormente llegó a un acuerdo extrajudicial con 'El Mundo'). Este declaró que presentó las declaraciones de la renta con los datos que le pasaban y que procedían de Miguel Marqués. Este es el representante en Portugal del banco suizo St. Galler Kantonal Bank. Después de eso la juez lo citó como investogado y su declaración aún tiene que producirse.

Con él, son siete los asesores que ya han pasado ante la jueza Gómez Ferrer. Esto, por un lado, alarga la instrucción y por otro aumenta la presión sobre Cristiano. Fuentes del sector interpretan que cuantos más asesores de su entorno estén imputados mayor será la urgencia sobre el futbolista para cerrar el caso asumiendo él los delitos en una condena de conformidad, ya que además corre el riesgo de que alguno declare algo inconveniente para la defensa. El caso ha tenido un efecto colateral que ha sacudido el mundo de la auditoría. Aunque Cristiano sigue con Mendes como representante —su relación va más allá de lo profesional—, Cristiano ha fichado a Pwc para llevar sus cuentas.