Saracho contraataca frente a Cremades y Ron: "Cuando llegué, la acción ya valía cero"

El caso Banco Popular va subiendo de temperatura casi un mes después de que el juez José Luis Calama propusiera enviar el caso a juicio oral. Los primeros recursos que llegaron fueron de acusados defendiéndose y recurriendo el auto, pero también ha habido fuego cruzado. En concreto, contra el expresidente Emilio Saracho, al que piden sentar en el banquillo la Asociación de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (Aemec), representados por el bufete Cremades & Calvo-Sotelo, y su predecesor, Ángel Ron.

Ambos reclaman que la Audiencia tenga en consideración un presunto delito de administración desleal del banquero madrileño al haber llevado a Banco Popular a resolución de forma deliberada, algo que el auto de Calama descartó. Saracho ha respondido a esta petición con un escrito al que ha tenido acceso este medio, en el que cuestiona que cuando asumió la presidencia "la acción ya valía 0, en concreto 0,25".

"Banco Popular se encontraba en una grave crisis, y es en ese marco en el que deben evaluarse las posteriores actuaciones de nuestro defendido", añade el escrito, firmado por Carlos Gómez-Jara (Corporate Defense), Jesús Santos (Baker McKenzie) y José María Alonso.

El expresidente fundamenta su escrito en que lo que hizo durante los cuatro meses que estuvo al frente de Popular fue contar al mercado la realidad de la entidad, y que lo contrario hubiera sido una manipulación:

¿Gestión desleal o manipulación?

"La representación de Aemec no afirma que las comunicaciones que se realizaron al mercado contuvieran información falsa –puesto que entonces habría calificado los hechos como delito de manipulación de mercado–, sino que, en la tesis acusatoria, la comunicación al mercado de información veraz constituye un delito de administración desleal".

En esta línea, la defensa de Saracho expone que las decisiones que tomó no fueron a título personal, sino que lo hizo el consejo del banco, y recuerda una frase del auto de Calama: "Tomó medidas para chequear y evaluar el balance del banco". Incluso, añade, si el consejo de Popular hubiera sabido en abril de 2017, cuando se hizo la reexpresión de las cuentas de 2016, determinados asuntos que conocieron después: "La caída del valor de la acción hubiera sido mucho más pronunciado".

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El expresidente también cuestiona otra de las críticas de Aemec-Cremades, el de lanzar una venta del banco en mayo de 2017, como adelantó este medio. Según Saracho, si el banco hubiera estado entonces en tan buen estado como defienden en esta asociación (y Ron), "todas las entidades financieras habrían comprobado dicha salud financiera envidiable y habrían realizado ofertas de compra", cosa que no sucedió.

El escrito concluye con un dardo hacia Aemec, al exponer que "leyendo el recurso se tiene en muchas ocasiones la extraña sensación de que parece más un recurso de los declarados en el auto como encausados que de una acusación que debería compartir gran parte del auto".

De hecho, este factor ha generado división en esta acusación, ya que una de las asociaciones a las que representa Aemec (la Asociación Independiente de Afectados por el Banco Popular) trató de desligarse de la estrategia legal apoyando que se siente en el banquillo a Ron y a su equipo, a los que Calama ve responsables de delitos de estafa y falsedad. Aemec paralizó este intento.