Cambio de ciclo: las familias dejan de amortizar hipotecas y guardan liquidez

Cambio de ciclo en las finanzas de las familias. Los hogares frenaron el ritmo de amortizaciones hipotecarias durante el último tramo de 2023, tras meses en los que esta variable se llegó a situar en máximos históricos. Así lo informó este miércoles la subgobernadora del Banco de España, Margarita Delgado, en unas jornadas organizadas por Pimco y El Confidencial.

“Durante 2022 y gran parte de 2023, se produjo un ritmo muy dinámico de amortizaciones, que llegó a alcanzar en marzo un 34,8% más que la media observada entre 2019 y 2023. En un contexto de incremento de tipos de interés, las familias han destinado parte de sus ahorros para amortizar parcialmente préstamos hipotecarios, amortiguando de este modo el impacto de la subida de tipos. No obstante, este ritmo acelerado de amortizaciones ya se ha ralentizado significativamente y los niveles actuales ya se encuentran cercanos a esta media”, explicó la subgobernadora.

Este cambio de tendencia ha llegado en un momento en que los tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE) han tocado techo y todo apunta a que bajarán durante 2024. De hecho, según informó la subgobernadora, un tercio de los hipotecados españoles comenzará a ver rebajada su cuota durante los tres primeros meses del año.

Aunque el euríbor apenas ha bajado desde el 4,2% que llegó a tocar en el momento álgido (septiembre de 2023) hasta el 3,6% actual, todo alivio es poco para las familias. Por ello, podrían estar aprovechando esta mejora para dejar de destinar gran parte de su ahorro exclusivamente a amortizaciones.

Podrían estar aprovechando esta mejora para dejar de destinar gran parte de su ahorro exclusivamente a amortizaciones

Otro factor que podría estar pesando en esta tendencia es que se está empezando a acabar el dinero sobrante acumulado desde 2020. Las últimas cifras de depósitos del Banco de España reflejan que el dinero en estos productos se situó en el caso de las familias en 985.000 millones de euros a finales de noviembre, un 2% menos que a principios de año.

Delgado incidió en su discurso en que la mejora de las rentas de las familias ha sido clave en esta capacidad de aguante y en que se aceleraran las amortizaciones. "La renta bruta real se ha visto impulsada tanto por el crecimiento del empleo como de los salarios. Ajustada por la evolución de la inflación, la variación interanual de la remuneración de los asalariados se situó en el 5%, alcanzando un nivel en torno a un 6% por encima de los niveles prepandemia".

Por barrios

Otro factor que ha empezado a cambiar en el último tramo de 2023 ha sido la mejora de las remuneraciones de las entidades financieras. Tras meses en que no pasaban casi del 0% en sus ofertas de depósitos, algunos bancos empezaron a ofrecer cuentas remuneradas al 3% o incluso depósitos a rentabilidad mayor, lo que podría haber llevado a las familias a preferir aparcar su dinero en estos productos en lugar de reducir sus deudas.

Esta tendencia también va por barrios. De este modo, la morosidad hipotecaria ha repuntado ligeramente durante los últimos meses del año pasado. Según las entidades consultadas, estos primeros impagos se han dado principalmente entre rentas bajas y hogares que ya estaban apretados antes de la subida de la inflación y de los tipos de interés.

Delgado subrayó la importancia de que aguante el empleo para que las familias no se vean abocadas a un mayor número de impagos de sus hipotecas. Para ello, es clave que los riesgos geopolíticos no vayan a más, disparando la inflación y pinchando el crecimiento de la economía internacional, más en un entorno en el que la economía de la eurozona está en desaceleración.