El BCE visita Málaga con un informe demoledor sobre la gobernanza de Unicaja Banco

El Banco Central Europeo (BCE) ultima una revisión a fondo de la gobernanza de Unicaja Banco, con conclusiones demoledoras sobre las prácticas llevadas a cabo por parte del consejo de administración: la ligada al bloque asturiano, según fuentes supervisoras consultadas por El Confidencial. Así lo puso sobre la mesa un equipo del BCE que visitó Málaga el pasado lunes para exponer el resultado casi definitivo de un trabajo en el que lleva desde el pasado otoño. Desde el banco, no hicieron comentarios.

El resultado de esta inspección llega en un momento en que la mayor parte de las situaciones que denuncia ya han sido corregidas tras la salida de consejeros que se ha producido en los últimos meses. Aun así, también pone deberes al grupo andaluz, que hace dos semanas hizo oficial el cese de su consejero delegado, Manuel Menéndez, y debe elegir uno nuevo en las próximas semanas.

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Jorge Zuloaga

Se trata de un informe de 160 páginas en el que se cuestiona la actuación "como un bloque" de una parte del consejo de Unicaja durante los últimos meses. Dichas fuentes creen que se refiere a la actuación de los antiguos consejeros representantes de la Fundación Unicaja (Petra Mateos, Manuel Muela, Teresa Sáez y Juan Fraile), nombrados por Braulio Medel, junto a los dominicales e independientes procedentes de Liberbank. Otras fuentes conocedoras del documento critican fuertemente al BCE por este "ataque" a parte del consejo.

Estos consejeros dejaron ya la entidad en la junta de finales de marzo, momento en que la actual fundación (dueña de un 30% del capital) nombró a cuatro nuevos dominicales.

Según los inspectores del BCE, la actuación de los consejeros salientes junto a los de Liberbank provocó que se rompieran "los pactos de fusión" aprobados a finales de julio de 2021. Así, como adelantó este medio, entonces se fijó un reparto de funciones que fue revisado en agosto de 2021 para darle más poder al consejero delegado, Menéndez, en detrimento del presidente, Manuel Azuaga.

El informe también arroja dudas sobre la actuación de la antigua Comisión de Nombramientos, que lideró hasta hace unos meses María Garaña. El BCE considera que esta comisión tuvo una actuación cuestionable al nombrar independientes que no lo eran y tomar decisiones al margen de la propia comisión. En el foco, están los nombramientos de los consejeros Isidoro Unda y Maite Costa, que la junta de accionistas tumbó en marzo por dudas sobre su independencia, como apuntaba el BCE.

Retos

Al margen de las críticas a consejeros salientes, el BCE también pide cambios a futuro en la entidad. En concreto, solicita que se amplíen los perfiles de los consejeros para que el máximo órgano de gobierno de la entidad pueda abordar retos como el cambio climático, la digitalización, las novedades sobre supervisión o la contabilidad.

La entidad tiene actualmente en marcha un proceso para renovar el consejo en esta línea dentro del fichaje de cuatro nuevos independientes. Esta selección se va a solapar con la búsqueda de un nuevo consejero delegado tras la decisión de Menéndez de no someterse a una reevaluación.