Grandes fortunas catalanas logran una avalancha de sentencias contra Q-Renta

La Justicia da la razón a decenas de clientes de Q-Renta, la agencia de valores que se fue a concurso de acreedores tras ser sancionada por la CNMV. En los últimos meses, se han ido sumando sentencias en contra de esta firma de inversión catalana, que ya suma cerca de 30 fallos en contra en los que se le obliga a devolver más de tres millones de euros a antiguos clientes.

De momento, esta agencia todavía no ha recurrido dichas sentencias, que han sido dictadas por el juzgado de lo Concursal donde se discute cuánto van a recuperar sus acreedores. De hecho, el magistrado ha abierto la puerta a que se sumen el resto de perjudicados que todavía no lo hayan hecho.

El principal responsable de este desenlace es Fernando Gavín, abogado de Gavín y Linares, firma que ha trabajado de la mano de Asufin (Asociación de Usuarios Financieros) en estos procesos. Este experto legal reconoce que, tras la victoria en estas demandas, queda el principal reto: que cobren los clientes. El concurso de acreedores es complejo, por lo que la principal vía es la de reclamar a la aseguradora que tenía Q-Renta, Chubb.

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Es muy probable que en los próximos meses se presenten las primeras reclamaciones en este sentido, aunque Gavín asume una oposición de esta aseguradora internacional. Bajo su punto de vista, Chubb está obligada a asumir los costes legales, ya que las sentencias en contra de Q-Renta no se basan en ningún tipo de dolo de sus gestores, sino en malas prácticas no penales.

Sentencias

En este sentido, una de las sentencias a las que ha tenido acceso este medio recuerda los cuatro expedientes que la CNMV incoó contra Q-Renta, que son firmes, por manipulación de mercado en 2015 y 2016 y por inadecuada gestión de conflictos de interés por la operativa de gestión y asesoramiento sobre los valores cotizados entre enero y septiembre de 2017.

El escándalo de esta agencia de valores estalló en verano de 2018, cuando la CNMV suspendió los reembolsos de dos fondos gestionados por esta pequeña firma catalana. A raíz de ello, se difundió el escándalo dentro de la jet set catalana, con centenares de clientes con pérdidas millonarias por presuntas prácticas irregulares de Q-Renta.

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Las recientes sentencias dan por probado que Q-Renta asesoró de forma "sesgada" a sus clientes: "La demandada no ha probado que informara al inversor de manera concreta, clara y sincera de los riesgos de pérdida de la inversión y, por otro, tampoco ha justificado que la información periódica que le remitía se ajustara a la realidad, por lo que procede declarar el incumplimiento contractual". "La pérdida patrimonial puede imputarse a la insuficiencia de la información que sufrió" el cliente, añade.

Junto a ello, el juez cree que Q-Renta manipuló el mercado. Esta firma asesoraba a ocho compañías del MAB —Eurona, Euroconsult, Inkemia, Home Meal, Elzinc, Cerbium, Inclam y Clever—, cuyas acciones colocaba a su vez a sus clientes. "En el MAB cotizan empresas pequeñas y medianas en expansión que, como señaló el perito, tienen una capacidad de resistencia muy inferior a las empresas grandes, lo que implica" que "tiene riesgos añadidos" para los inversores. "Es poco recomendable para un inversor sin conocimientos financieros cualificados", añade.

"La demandada incumplió los deberes de lealtad y diligencia para salvaguardar los intereses de sus clientes, lo que provocó que los clientes de Q-Renta sufrieran una importante pérdida patrimonial", concluyen.