Héctor Gómez, PNV y la presidencia europea: jugada a tres del turismo para poner coto a Airbnb

"Enorme contradicción". Así definió ayer el vicepresidente de Exceltur, José Luis Zoreda, la falta de referencia a los alquileres turísticos dentro de la ley de vivienda, algo que esta patronal lleva meses pidiendo al Ejecutivo, ya que los pisos vacacionales son uno de los elementos que más han presionado al alza el precio de la vivienda en los últimos años.

Su crítica coge el guante lanzado este lunes por Aitor Esteban, portavoz del PNV en el Congreso, cuando cuestionó que el texto acordado entre Gobierno, ERC y EH-Bildu "no entra a regular los pisos turísticos que están tensionando muchas zonas", poniendo así la alfombra roja a que haya un "enorme trasvase", en palabras de Zoreda, de viviendas de alquiler tradicional a turístico para esquivar el tope de precios.

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A pesar de este revés, el sector cree que sigue habiendo partido, sobre todo, por el nuevo escenario que se abre con el reciente nombramiento de Héctor Gómez como ministro del ramo, la inminente presidencia española de la UE y la necesidad que tiene el PNV de jugar sus cartas con la ley de vivienda, tras el órdago que le ha lanzado EH-Bildu al haberse llevado el mérito de desbloquear la norma.

El nuevo ministro de Industria y Comercio es amigo personal del presidente del Gobierno, y quienes le conocen aseguran que su criterio es muy respetado por el jefe del Ejecutivo. Una ascendencia de la que carecía su predecesora, Reyes Maroto, que siempre tuvo buenas palabras para el sector, pero ningún fruto. Ahora, en cambio, la primera industria del país confía en poder ganar peso en la Moncloa para, desde ahí, aprovechando la presidencia de turno de la UE, dar el salto a Bruselas.

El origen tinerfeño de Gómez hace que lleve en la sangre la sensibilidad hacia el sector turístico, industria cuyos intereses ya ha defendido en el exterior tras su paso por la dirección general de Turespaña. Una experiencia que le presupone galones para saber aprovechar ahora la presidencia europea en defensa de un objetivo claro: regular las plataformas como Airbnb.

El sector siempre ha criticado que estas empresas están dando voz a miles de anuncios de viviendas ilegales y en reiteradas ocasiones ha pedido que Europa les ponga coto haciéndolas responsables, del mismo modo que a las grandes cadenas de supermercados se les exige velar por que los productos que venden cumplan los requisitos de Sanidad.

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Bruselas planteó el pasado ejercicio obligar a que haya un registro de estas casas, que sea transparente para las autoridades locales y que se hagan controles que acrediten la veracidad de esta información. Un primer paso sobre el que los hoteleros esperan que España profundice durante el segundo semestre de este ejercicio, en que tendrá la presidencia. Y con ese objetivo se está trabajando entre bambalinas.

Según han señalado en varias ocasiones desde Exceltur, el 95% del problema de los pisos turísticos desaparecería con solo responsabilizar a estas compañías de que los pisos que anuncian sean legales. ¿Por qué? Porque gran parte de la oferta desaparecería, responden desde la patronal.

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En esta ofensiva contra las viviendas vacacionales, Exceltur ya cuenta con el respaldo de los ayuntamientos de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Málaga y San Sebastián, junto a los que unió fuerzas en la iniciativa bautizada como ReviTUR y dirigida a reclamar al Ejecutivo que estableciera un marco legal sobre viviendas de uso turístico (VUT).

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Su primera apuesta para conseguir este objetivo era la ley de vivienda, disparo fallido, por el momento, a la espera de ver si queda alguna opción para hacer algo, aprovechando la tramitación de la norma y la crítica del PNV. Un reto que a priori se dibuja inalcanzable, por la velocidad que ha inyectado el Gobierno a la tramitación de la norma para que esté lista de cara a los próximos comicios municipales y autonómicos.

Pero la espada seguirá en alto para intentar librar la batalla en cualquier norma o decreto que permita crear el marco legal que llevan años reclamando los hoteleros. Y que tiene una oportunidad de oro para terminar de ganar la partida en Bruselas.